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Jueves 28 de Marzo de 2024 |
 

Fisiología de la Risa

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Buen humor y salud. Estrés. Actividad cerebral.

Agregado: 24 de MAYO de 2000 (Por Radio Hornero) | Palabras: 4564 | Votar |
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Categoría: Apuntes y Monografías > Medicina >
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  • Enlaces externos relacionados con Fisiología Risa

    Enviado por Informativo http:/// www.radiohornero.itgo.com
    radiohornero@giga.com.ar

    FISIOLOGíA DE LA RISA


    Dr. Daldo Hernández Mesa. 

    BUEN HUMOR Y SALUD 
    Pacientes, doctores y cuidadores están reportando que la risa puede ser la mejor medicina. Reír baja la tensión arterial, reduce las hormonas del estrés, aumenta la flexión muscular y activa funciones inmunes elevando las células T que luchan contra las infecciones, aumentando las proteínas que combaten las infecciones denominadas Gamma-interferón y las células B, productoras de anticuerpos. La risa produce liberación de endorfinas que combaten el dolor y producen una sensación de bienestar. 
    En muchas instituciones se están estableciendo programas formales e informales de humor terapia. En la India hay clubes de risa donde se celebran reuniones tan sólo para reir. En Australia hay grupos de médicos y enfermeras que hacen reir a sus pacientes para facilitar su tratamiento. En USA desde 1987 existe la American Association for Therapeutic Humor. Se sigue la idea de que el humor es un lenguaje universal y una emoción contagiosa puede tener efectos saludables, no cuesta nada y al parecer no tiene reacciones adversas, como por el contrario sucede con casi todos los fármacos. 
    El término humor cubre una variedad de factores como sentido del humor, generación del humor, apreciación del humor y risa. Por ello no debe sorprender que muchos estudios digan cosas distintas acerca de efectos del humor sobre la ansiedad, depresión e IgA y frecuencia de resfriados (1, 2, 3, 4, 5, 6). La variable más común en investigaciones del humor es el sentido del humor que se mide mediante el cuestionario de respuesta situacional al humor desarrollado por Martin y Lefcourt (7) que pregunta a la persona cómo ríe ante distintas situaciones. También se utiliza una escala que mide la tendencia de las personas a reaccionar con humor ante situaciones estresantes. Los récords de humor se interpretan relacionados con el nivel de estrés y del estado de ánimo (8). Thorson y Powell (9) arguyen que el sentido del humor es multidimensional y desarrollan una escala denominada Multidimensional Sense of Humour Scale (MSHS) que tiene cuatro subescalas para medir: producción de chistes (uso de humor en situaciones sociales); coping humor (tratando activamente de ver el chiste a cada cosa); apreciación del humor; y actitud de aprobación al chiste. Algunos recomiendan dar a los pacientes materiales humorísticos. Sin embargo no se debe asumir a priori que la exposición del paciente al humor tiene siempre efectos beneficiosos. Algo similar sucede con las terapias de relajación en la que se reportan algunos casos de ansiedad inducida por la relajación (10). Muchos estudios detectan direcciones atencionales (consideradas negativas por contribuir a psicopatología como la dependencia alcohólica) que favorecen el surgimiento de trastornos obsesivo-compulsivos (11,12). 
    ESTRÉS Y BUEN HUMOR 
    Como se ha planteado que el buen humor puede contrarrestar las manifestaciones del estrés resulta de interés para nosotros conocer lo que se polemiza en torno a esta reacción del organismo y sus consecuencias dañinas. 
    Uno de los términos que casi todo el mundo utiliza hoy en día es la de estrés aunque a veces con diferentes significados. Con mucha razón Pushkin planteó la necesidad de esclarecer el siginificado de las palabras para librar al mundo de la mitad de los equívocos que derivan en el cincuenta porciento de las discusiones estériles. Por ello es conveniente ponernos de acuerdo a priori del significado del estrés con vistas a evadir pseudoproblemas. 
    La palabra estrés proviene del vocablo inglés stress que significa tensión. Fue usado por el físico inglés Robert Hook en el siglo XVII para explicar el punto preciso en el que se produce la modificación física de los metales sometidos a estímulos intensos. Hans Selye, por analogía, aplicó el término a las situaciones extremas en las que el organismo sometido a fuertes agresiones no específicas debe adaptarse empleando mecanismos fisiológicos-metabólicos que permiten obtener la energía necesaria para la adaptación a la nueva situación. De acuerdo a la hipótesis de Selye, si el proceso continúa la adaptación mantenida agotaría la energía, lo que conduciría al daño de órganos y tejidos más debilitados, e incluso del organismo en su conjunto. Los mecanismos que ligan a los agentes causales con la reacción organismal celular se conciben como neuroendocrinos.
    Se puede definir por tanto al estrés siguiendo las ideas de Selye como el conjunto de procesos fisiológicos y metabólicos que se desencadenan como consecuencia de estresores físicos, metabólicos y psicológicos que desafían la homeostasis de los procesos del organismo. Llamamos la atención que muchas veces el empleo del término es confuso pues a veces algunos identifican incorrectamente al estrés como la causa, ello ocurre cuando escuchamos la expresión hace un estrés tremendo.
    CONSECUENCIAS O RESULTADOS DEL ESTRÉS.
    Queda claro que identificamos al estrés como la reacción del organismo y que los estresores son sus agentes causales (Estresor --> Estrés). En una situación de estrés cualquiera nos interesan también las consecuencias: Estresor --> Estrés --> Efectos. Los resultados o efectos pueden ser positivos y negativos. Para entender los positivos que en ocasiones no se notan ejemplifiquemos: a veces ante un frío intenso o calor extenuante la reacción de estrés proporciona la adaptación necesaria sin la cual la vida no continuaría. También pueden verse en el deporte y las competencias que implican situaciones de estrés sin las que el avance, logro de metas ambiciosas y récordes no serían factibles. En el estudio y en las pruebas o exámenes los estudiantes están en lo general en situaciones de estrés que en un nivel mínimo le ayudan a obtener mejores resultados. En cualquier actividad cultural o en una actuación de un artista o disertación en una conferencia el nivel mínimo de estrés se requiere para obtener buenos resultados. Se puede concluir que la reacción de estrés posee efectos positivos en su esencia. Pero en el campo de la medicina el estrés tiene una faceta diferente, la de las consecuencias dañinas o negativas. Éstas se evidencian como consecuencia de una estimulación muy intensa o prolongada, y pueden ir desde una alteración simple hasta enfermedades crónicas, envejecimiento acelerado o incluso la muerte del sujeto. Estas a veces no se notan o se contemplan como resultado inevitable. Lo cierto es que en verdad pueden ser controladas por los sujetos mismos con la ayuda de personal especializado.

     


    MECANISMOS DEL ESTRES. SISTEMA NEUROENDOCRINOINMUNE (SNEI). 

    SU AFECTACIóN POR EL ESTRÉS CRóNICO. ENVEJECIMIENTO POR DETERIORO DEL SNEI A CONSECUENCIA DEL ESTRÉS CRóNICO


    El sistema límbico y el hipotálamo proporcionan la base biológica de nuestros estados emocionales y rítmos diversos del organismo. El mecanismo del estrés se integra en estos sitios del sistema nervioso y desde aquí se controlan directa o indirectamente acciones hormonales e inmunológicas. El hipotálamo constituye el punto nodal del mecanismo del estrés y del hipotético sistema neuroendocrino inmune (SNEI). Esto se comprende mejor si interpretamos que el hipotálamo recibe y/o envía señales nerviosas, hormonales y de cambios físicos del medio interno. Veamos mediante un ejemplo concreto. Algunas de estas señales provienen de receptores que informan sobre la temperatura corporal (calor o frío intenso) mientras otras provienen de regiones límbicas que representan sentimientos de miedo, alegría, dolor, etc. La integración en el hipotálamo de estas señales confluentes se traduce en mensajes que regresan a las regiones límbicas y al mismo tiempo en cambios hormonales y del sistema autónomo (simpático-parasimpático). De esa manera en una reacción de estrés se manifiesta tanto el contenido psíquico psicológico mediante las señales hipotálamo-límbicas como la reacción neuroendocrina inmune. Las reacciones metabólicas incrementadas durante la reacción de estrés producen un estrés metabólico (estrés oxidativo) correlacionado con el estrés del organismo. Como consecuencia del estrés oxidativo se producen especies reactivas de oxígeno (ERO) que son potencialmente productoras de afecciones y enfermedades y se han vinculado al proceso de envejecimiento (13, 14, 15, 16, 17)
    La prevención incluye acciones de los sujetos en situaciones mantenidas de estrés relativas al reposo, acción sobre los estresores individuales, en el plano familiar y el trabajo. Se comprende que aquí también el personal de enfermería o médico puede ayudar en la prevención de daños mayores pues la disminución la caída inmune se acompaña de alteraciones que promueven enfermedades y envejecimiento acelerado. 
    A pesar que hay mucho que investigar aún, la hipótesis del estrés como proceso predisponente a cambios o alteraciones del organismo es aceptada por la mayor parte de la comunidad científica actual. El desafío de la homeostasis de los procesos fisiológicos-metabólicos que se produciría mediante una reacción neuroendocrina-inmune situaría al sujeto que se halla bajo la acción de estresores intensos y/o duraderos en desventaja para resistir las agresiones y por tanto enfermaría. Las cicatrices que fuesen dejando las diferentes situaciones del estrés a lo largo de la vida acelerarían el proceso de envejecimiento del individuo y disminuirián la calidad de vida durante la vejez. Existen evidencias experimentales que señalan el rol del sistema endocrino en el estrés y el envejecimiento (19, 20, 21).


    ACTIVIDAD CEREBRAL Y HUMOR 

    Después del descubrimiento de la Venus de Milo en 1820, comenzaron los estudios científicos de la simetría en Biología y Medicina. La descripción del cuerpo asimétrico de la Venus fue el punto de partida para el inicio de este campo de estudio (22). Muy pocos sujetos poseen un fenotipo perfectamente simétrico. Entre los tipos de asimetría encontramos:
    a) Asimetría fluctuante. Pequeñas variaciones de la simetría perfecta.
    b) Asimetría direccional. Un carácter es mayor hacia uno de los dos lados. Ejemplos: testículos derechos de mamíferos más grandes; lateralización del canto en canarios (hipogloso izquierdo); lateralización derecha de la mano en humanos; áreas del lenguaje en el hemisferio izquierdo (HI); áreas de reconocimiento de rostros en el hemisferio derecho (HD). 
    c) Antisimetría. En una población donde los individuos son asimétricos pero el 50 % tira a un lado y el otro 50% hacia el otro. Ejemplos: una de las dos muelas del cangrejo violinista; preferencia de extremidad anterior en roedores (50 % derechas y 50 % zurdas)
    Las variaciones de la simetría se tratan hoy día de explicar mediante factores del medio y genéticos como: alimentación, calor, frío, productos químicos, las radiaciones, las lluvias ácidas, el ruido, la luz, la competencia e interespecies, parásitos y enfermedades. 
    Entre los genéticos están: consanguinidad, hibridización, mutaciones y homocigotos.
    Con respecto de las diferencias hemisféricas, estas constituyen un tipo de asimetría direccional. Sus desviaciones pueden determinar inestabilidad del desarrollo.
    Son los trabajos realizados con pacientes a los que se le seccionó el cuerpo calloso como tratamiento, los que más aportaron en el campo de la investigación de las lateralizaciones. Después de los trabajos de Sperry, Gazzaniga y Bogen realizados en varios pacientes a los que se le seccionó el cuerpo calloso (debido a epilepsia irreductible por otros métodos) se ha demostrado que el cerebro humano posee lateralización. El hemisferio izquierdo en la mayoría de los humanos se ocupa del lenguaje, mientras que el derecho parece ser mudo. El izquierdo parece ser completamente dominante para las funciones cognitivas. El hemisferio izquierdo, racionalista extremo, construye, inventa historias falsas cuando no tiene un conocimiento exacto de las cosas (no puede dejar de conjeturar). El hemisferio derecho en contraposición siempre nos dice la verdad. Pronto tal vez en el argot popular se comience a decir: "háblame con tu hemisferio derecho, no con tu corazón, como se indica a veces". El hemisferio izquierdo también domina en tareas como la búsqueda de un objeto discordante entre un conjunto de objetos similares. Esta última actividad la realizan mejor los sujetos con cerebro dividido que los sujetos con cerebro intacto porque no existen, al parecer, mecanismos que inhiban la búsqueda. El hemisferio derecho domina en tareas visuales y motoras. En conclusión, debido a esos resultados y a otros que incluyen la imagenología cerebral mientras se realizan tareas, la ciencia cognitiva, la inteligencia artificial, la psicología evolutiva y la neurociencia coinciden en rechazar la hipótesis de que el cerebro es un dispositivo general de resolución de problemas en el que cada parte es capaz de realizar cualquier función. Más bien parece ser un conjunto de dispositivos, de módulos, algunos de ellos lateralizados, que atienden las demandas de la información que la mente hace. Los hemisferios lateralizados en este contexto constituyen la base para aprendizajes como el lenguaje, la destreza manual, el reconocimiento de rostros, etc. Ahora bien, ¿cómo es que ha surgido la lateralización de los hemisferios cerebrales?
    La mayoría de las especies existentes presentan simetría en la mayoría de sus funciones. En algunas tareas en que la creatividad puede ser nociva, las ratas que son mucho más simétricas que nosotros, son más eficientes que los humanos. En una experiencia en la que al apretar un botón entre dos se enciende una luz, los humanos desarrollaron 68 % de aciertos, mientras que los sujetos con cerebro dividido y los roedores alcanzaron el 80 %. En nosotros la conciencia es útil para resolver problemas, más cuando están resueltos y ya no son dificultad, nuestra conciencia en vez de ayudar dificulta. Se puede conjeturar que nuestro hemisferio izquierdo al no poder parar de hacer conjeturas --aunque sean falsas-- trata de crear una teoría del 100 % y no se conforma con el 80 %. Esta actitud creativa que resulta útil para los problemas, es ineficiente en tareas automáticas (23, 24).
    Se ha pensado clásicamente por tanto que la lateralización del cerebro humano es un añadido evolutivo. En la dura competencia por el espacio cortical, el cerebro en evolución de los primates tenía dificultades para adquirir nuevas facultades (lenguaje, habilidad manual para el trabajo) que implicaban creación de nuevas regiones cerebrales sin perder las antiguas, la lateralización pudo ser la respuesta adaptativa más eficiente. Al estar los dos hemisferios conectados, las mutaciones podrían hacer que una región cortical homóloga asumiera una nueva función, incluso sin coste alguno para el animal, ya que el otro lado permanecería intacto. Tal pudo ser el caso del área de Wernicke y de otras zonas del lenguaje que sólo existen en uno de los dos hemisferios, más frecuentemente el izquierdo, aún en los individuos siniestros. No obstante hay experimentos que sugieren otra alternativa, consistente en que la adquisición de nuevas funciones expulsara algunas viejas. Los dos hemisferios en sujetos con cerebro dividido pueden percibir contornos ilusorios, pero el derecho tiene ventaja perceptual para comprender ciertas agrupaciones que el izquierdo no puede. Interesante es que los ratones si pueden realizar la segunda tarea. El hecho de que un ratón tiene capacidades que escapan al hemisferio izquierdo humano parece indicar que el surgimiento de funciones como el lenguaje y la función interpretativa del hemisferio izquierdo humano hayan expulsado esta posibilidad perceptiva (23). No obstante las regularidades señaladas en este campo, hay muchas individualidades señaladas, pues posiblemente se presentan asimetrías fluctuantes que tal vez pudieran explicar las diferencias observadas en el aprendizaje cognitivo o motor de muchas personas. Ante la pregunta de por qué hay unos que parecen ser más inteligentes o eficientes que otros en ciertas tareas se podrían indagar el nivel de lateralización hemisférica que poseen los distintos sujetos, y tal vez posteriormente entrenar las capacidades disminuidas o no desarrolladas (23).
    Cabe preguntarse si la lateralización hemisférica de funciones tiene bases en asimetrías morfológicas. La lateralización de funciones en el ser humano, está vinculada con la localización de funciones en el Sistema Nervioso Central (SNC). La idea de situar la sensibilidad, los actos motores voluntarios, la inteligencia y las emociones es muy antigua pero la idea de localizarlas en el encéfalo no se expresó con claridad hasta el VI AC (25). En 1861 Pierre Paul Broca presentó un caso que revolucionó el ambiente precedente. Monsieur Tan Tan podía comprender el lenguaje pero sin deficiencias motoras de la lengua tan sólo podía replicar Tan Tan, algunas palabras aisladas, cantar una melodía pero no podía hablar gramaticalmente en oraciones completas, ni expresar ideas con la escritura (27). Al morir el paciente en 1864, Broca mostró en la Sociedad de Neurología de París su cerebro, portador de una lesión en el tercio posterior de la circunvolución frontal inferior del hemisferio izquierdo. Postuló que esa región era el centro de las imágenes motoras de la palabra (26). En los instantes en que enunció su famosa frase: "Nous parlons avec l´hemisphère gauche, cest`une habitude que nous prenons des notre premier enfance" por primera vez se estaba ubicando una función mental compleja (el lenguaje) en una zona precisa del cerebro (27). 
    Se abrió así un siglo en el que los conceptos de lateralización hemisférica para el lenguaje y la dominancia manual se solidificaron aunque con un marcado carácter dogmático (considerar al hemisferio izquierdo como dominante y el derecho como el menor) superado tan sólo por Huglins Jackson (1868) quien al estudiar pacientes epilépticos concluyó que los procesos mentales complejos no debían limitarse en su localización a áreas particulares del cerebro (26).
    Actualmente se considera que al menos una parte importante de los atributos del lenguaje humano tienen relación con el hemisferio izquierdo denominado cualificador. El hemisferio derecho conocido como identificador, especializado en reconocer rostros, relaciones espacio-temporales, identificar objetos por su forma y reconocer temas musicales y tonos del lenguaje (28). Lesiones del hemisferio izquierdo impiden al sujeto otorgar cualidades a un objeto determinado y se molestan por ello. Lesiones en el diestro por otro lado, provocan asteriognosia (incapacidad de reconocimiento táctil) y otras agnosias, sin el más mínimo asomo de molestia o depresión (28). 
    Existen evidencias de alteraciones que se producen por afectación de un hemisferio cerebral dado. Una afectación de lóbulo parietal derecho produce en el sujeto negación de miembros contralaterales y del rostro izquierdo (29).
    Las emociones también se relacionan con los hemisferios diestro e izquierdo. En una presentación de dos filmes (uno con contenido negativo y el otro positivo) por separado a los dos hemisferios mediante espejuelos especiales, la respuesta emocional más intensa fue la del hemisferio derecho (30). 
    El test del amital sódico produjo un resultado interesante pues se afecta no tan sólo el habla sino el humor. La inyección izquierda afecta el habla y provoca depresión breve, mientras que la inyección derecha provoca euforia (27).
    En los humanos las dos funciones lateralizadas más estudiadas e intrigantes son el lenguaje y la utilización preferencial de la mano diestra. Éstas parecen descansar sobre asimetrías en la estructura y microestructura cerebral susceptibles de ser investigadas en el momento presente. Razones éticas impiden investigaciones clínicas en humanos, por ello la búsqueda de ejemplos en animales es una tarea que justifica que prosigamos adelante en la búsqueda de circuitos neurales y neurotrasmisores que subyacen en la lateralización motora en roedores.
    En cuanto al buen humor tal parece que aún antes de producirse su manifestación externa, la risa, se producen acciones coordinadas en los dos hemisferios, iniciadas en el HI luego pasan al HD. La pregunta de si el humor está restringido a los humanos no tiene respuesta absoluta en el presente, pero si algún día la tuviese, la dicotomía HI y HD de los humanos jugará un rol protagónico con toda seguridad. 


    CONSIDERACIONES FINALES 
    1.- Con fidelidad a la idea de Pushkin expuesta al principio, el objeto conocido como buen humor en un sentido restringido estrictamente al neurofisiológico se sitúa en los circuitos neurales, neurotransmisores y campos físicos que se activan inmediatamente antes durante y posteriormente a la expresión de un acto de risa no fingida. 
    2.- El problema del humor o estado de ánimo positivo contrapuesto al estado de ánimo colérico en medicina ha sido resaltado en los últimos tiempos producto de datos experimentales que parecen demostrar que las situaciones de estrés acompañadas de aumentos de la tensión arterial, ansiedad, depresión y disminución de la resistencia inmune, entre otros signos, mejoran cuando el sujeto estresado se anima y ríe de veras. Puede sugerirse que el mantener en una persona un estado de ánimo caracterizado por la alegría vislumbrando el lado gracioso aún en los momentos más deplorables es una respuesta adaptativa que promueve salud.
    3.- Hay algunos datos que permiten sugerir que el estado de ánimo depende de la actividad cerebral de áreas diversas. En el caso del mal humor y la cólera (acompañada de hipertensión y otros signos) es bien conocida la puesta en marcha de circuitos que combinan la amígdala centromediana y el hipotálamo lateral. El estado de altruismo ha sido vinculado a ciertas zonas como las regiones septales. En el caso del buen humor y la risa se han registrado activaciones del hemisferio izquierdo primero y luego del hemisferio derecho antes de que el buen humor se manifieste en risa abierta y bienhechora. Cuando la risa se está manifestando los impulsos se detectan en las áreas sensorimotoras y puede especularse que también se hallarían en los circuitos límbicos encargados del control hipotálamico del Sistema autónomo. Estas acciones permiten proponer que como consecuencia de todo esto durante un acto de risa plena no fingida se ponen en juego las zonas del hipotálamo encargadas de producir hormonas que promueven la normalización de la tensión arterial y la promoción del anabolismo con lo que el organismo tiende a conformarse, rejuveneciendo o envejeciendo más lentamente y con menor probabilidad de sufrir enfermedades degenerativas como el cáncer. El mecanismo señalado sería similar al propuesto en el llamado efecto curativo de la mente que se logra según se ha sugerido mediante hipnosis, sugestión, autosugestión. La risa y su medio habitual, el buen humor, es un medio más natural, económico y simple. 
    4.- Puede especularse que el tipo de chiste sano pudiera tener efectos beneficiosos mediados por el circuito mencionado mientras que el chiste tendencioso de efectos nocivos pudiera afectar otros circuitos y provocar otros cambios pero aún faltan experiencias que comparen los efectos del chiste tendencioso (sexo, político, discriminatorio) impregnado de carácter social con otros tipos de chistes no tendenciosos y más naturales que pudieran tener sus antecedentes filogéneticos en los juegos de primates y canes. 
    5.- También son necesarias las experiencias que comparen los efectos del chiste sobre su creador o actor con los del receptor. En tal sentido la tragedia de Canio, de Garrid, de Tribulois, de Rigoletto y de otros tantos que han hecho reir a los demás mientras sufren interiormente sus complejos o decepciones, encontraría explicación.
    6.- En otro orden de ideas cabe interrogarse si hay características socioculturales autóctonas en cada región que promueven un tipo de humor u otro pero esto escapa de la neurofisiología y constituye interés de otras especialidades. 
    7.- Como quiera que el problema del humor en medicina está contenido en un problema más general que es el de la relación de nuestra conciencia con nuestro cerebro, resulta válido utilizar un esquema de trabajo en las investigaciones que contenga al menos:
    Primero.- Conjetura filosófica. Determinar el status y valor de nuestra teoría ordinaria del Humor (Si cada vocablo expresa una o varias propiedades).
    Segundo.- Experimentación global o psicológica. Ahora pasamos de la consideración del Humor como un todo (nivel personal) a los elementos o partes en que se organiza (nivel sub-personal). Se organiza el Humor en varios componentes o cajas negras que interactúan entre sí funcionalmente a partir de ciertas entradas y de tal interacción resulta el efecto global
    Tercero.- Trabajo integrador. Se debe lograr un punto de vista interdisciplinario en el que convivan la teoría personal, la sub-personal que logra descubrimientos a nivel general y la neurociencia, neuroinmunología, neuroendocrinología, etc. que convalida esos descubrimientos generales utilizando los cánones de la física que conlleva:
    a) Una hipótesis a priori del humor que se contraste por las experiencias y se vaya perfeccionando o rechazando hasta encontrar la verdadera.
    b) Experiencias socioculturales y psicológicas que incluyan estudios epidemiológicos 
    c) Experimentos neurofisiológicos con estudios electrofisiológicos, conductuales e imagenológicos que se corresponden con nuestro campo de acción cuyos resultados complementarían los estudios de los dos primeros incisos. 


    BIBLIOGRAFíA

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