LA APROPIACIÓN DE VALORES DE IDENTIDAD ESTÉTICA

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LA APROPIACIÓN DE VALORES DE IDENTIDAD ESTÉTICA

Agregado: 19 de NOVIEMBRE de 2009 (Por Lázaro Leadnro Laffita Mesa) | Palabras: 5818 | Votar |

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Autor: Lázaro Leadnro Laffita Mesa (lazaro@ant.hlg.rimed.cu)

Título: LA APROPIACIóN DE VALORES DE IDENTIDAD ESTÉTICA
Autor: Lic. Lázaro Leandro Laffita Mesa. Profesor Adjunto

RESUMEN

Los valores de identidad Estética, es una prioridad necesaria y preventiva en la formación educativa de nuestros estudiantes pues resulta en una mejor calidad de vida y fomenta las base para una cultura general integral. Es por esto necesario explicitar que el objeto de estudio de la Estética como ciencia es mucho más abarcador e imprescindible para la labor educacional de nuestros profesionales y su implementación por vía extracurricular en el Programa de Educación Estética
Precisamente en el Artículo se hace un análisis de los fundamentos teóricos sistémicos así como sus bases para insertar en el proceso docente educativo.
Palabras claves: valores, identidad, Estética, programa.
INTRODUCCIóN

Una de las líneas temática más recurrente a través de la historia de la humanidad, ha sido la formación de valores en el individuo y la búsqueda de la identidad como paradigma del modelo del hombre ideal desde las antiguas civilizaciones. Grecia jugó un papel fundamental en esta formación, aunque esta tenia en el héroe guerrero el modelo ideológico de aquella sociedad, los pedagogos Atenienses miraban como fundamental que la educación de las nuevas generaciones estuviera muy cerca de los intereses de la clase dominante, que en este caso estaba vinculado con el ideal social de su contexto teniendo en Aquiles su más alto prototipo.
Esta visión del mundo helénico vista por Homero, junto a otros ejemplos de la Historia Universal ha indicando al hombre que no puede vivir sin un patrón alto de la conducta humana, para desafiar los más bajos problema que se desarrollan en las mismas relaciones que el hombre va estableciendo a través de los años, y las que se generan ya sea por las más miserables condiciones de los actos que este desarrolla, o los creados como consecuencia de la producción de bienes.
Por una causa u otra, la búsqueda de cualidades ideales en el hombre ha generado variadas investigaciones sociales y educativas desde la cuna de la civilización hasta nuestros días, y en menor o mayor grado este aspecto fue conformando una identidad en el hombre, determinada por valores de pertenencia que le fue imponiendo la sociedad, como producto del resultado del medio social desarrollando símbolos, patrones, tipos, tradiciones, costumbres etc.
.Ahora bien, es evidente que estamos en presencia de una ineludible necesidad de formar a las nuevas generaciones con sentimientos humanos, aquellos que hacen de nosotros mismos y de nuestros estudiantes seres más dignos. De ahí la necesidad de un ideal del hombre deseado para el momento contextual, que requiere además la búsqueda de visiones axiológicas que permitan erigir una cultura de la solidaridad, en lugar de la competencia feroz, que apueste por la justicia social, la democracia y la equidad, y que nos lleven a luchar por nuevas utopías basadas en el respeto a la diversidad de todas las formas de existencia planetaria y universal.
Es imposible dejar de ver, que el ejemplo del hombre, que el mundo unipolar nos impone está presidido por la perdida de lo mejor de la conciencia estética universal, borrando la historia de los pueblos, sus características, a través de la importación de estilos de vida, y tipos de las altas sociedades de consumo, donde no se tiene en cuenta para nada el mundo espiritual del ser social y donde así mismo los anhelos de desarrollo de la individualidad creadora, se sustituyen por un individualismo cada vez más cruel y el desarrollo científico-técnico alcanzado, en su despliegue irracional se vuelve contra la propia seguridad de la subsistencia del mundo.
Desde mediados de este siglo en la Estética se han venido operando cambios, que parten de una comprensión de su objeto de estudio, mucho más amplia. Aún muchos consideran que sólo estudia todo lo relativo al arte: Por esto quizás, no se comprendan los estrechos vínculos de esta ciencia filosófica con la educación (Msc. Graciela Montero Cepero; ISPJV)
Ante todo lo expuesto, los educadores no podemos quedarnos de brazos cruzados, inerte ante una ineludible necesidad de formar valores que conforme el ideal del hombre de la nueva sociedad, Como dijera nuestro Apóstol: � Impedir a tiempo al Gigante de la siete Legua � esta visión martiana estuvo presente también por Fidel cuando planteó en el concepto de Revolución: .....sentido del momento histórico, defender valores, es cambiar todo lo que debe ser cambiado es igualdad y libertad plena, es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos, es emanciparnos por nosotros mismo y con nuestros propios esfuerzos, es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional, es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio, es modestia, desinterés, altruismo , solidaridad y heroísmo, es luchar con audacia, inteligencia y realismo, es no mentir jamás ni violar principios ético, es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y las ideas...... etc. ¿ Quienes tienen la responsabilidad de forjar voluntades, caracteres, etc. Para qué prepara el profesional de la educación, si no para una mejor calidad de vida, y para prevenir conductas e ideales inadecuados a nuestra conciencia estética socialista.
Ahora bien, por todo lo antes expuesto se hace imprescindible decir que la Estética estudia como el hombre se apropia del mundo a través de la sensibilidad, abarca toda su actividad, en la apropiación estética de la realidad. Según los estudiosos de la teoría ésta había sido relegada a un plano sin importancia. Incapaz del análisis y la solución de los grandes problemas y conflictos de la humanidad y de los agudas crisis espirituales del hombre de nuestro siglo.
Por otra parte, es necesario decir que cuando se valora el término Estética, se asocia urgentemente con los problemas relacionados con el Arte en su más alta dimensión, relacionándolo con sus manifestaciones artísticas (la pintura, danza, música, etc.) y en otros casos con los patrones de belleza que pueda tener una persona con respecto a los objetos que le rodean, no es meno cierto que forma parte de su campo de análisis, sin embargo es necesario explicitar que su objeto de estudio es aun mucho mas abarcador, apunta a dos partes fundamentales una es la belleza como mas alto exponente del ideal estético de la humanidad, pero además contempla los valores estético como la amplitud de categorías estéticas reflejadas en toda la actividad que hombre dirige hacia , la naturaleza , la vida, la técnica y la sociedad.
Al mismo tiempo, hay que admitir que en materia de educar estéticamente, son muchos los factores que interviene en dicho proceso, de los cuales podemos citar como fundamentales el sistema de educación y todo el conjunto de influencias educativas, en los que se destacan las instituciones, culturales y escolares, las organizaciones políticas y de masas hasta los medios de difusión masiva como medio informativo y educativo de la sociedad en su conjunto.
Reconocemos que la forma más especializada es el Arte, pero al mismo tiempo pensamos que la tarea de la formación de los ideoestético es una tarea superior a las fuerza de éste, por lo amplio de la dimensión a la que tomamos como marco referencial, la cual engloba lo polifacético y profiláctico de la vida humana y se realiza a través de diverso y disímiles medios y formas. Schiller y Read son ejemplos de ello al propugnar la educación estética y la educación por el arte, respectivamente como única forma de rescatar valores perdidos y de lograr un desarrollo humano.
Sobre esa base, puede plantearse el problema de la educación estética de un modo diferente, no como única salida, sino como un momento culminante de todo un proceso educacional, garantizado y accesible para todos...... la realización de la educación estética en la práctica, requiere que los fundamentos teóricos que la sustentan sean el instrumental con que se trabaje en la proyección, ejecución y la evaluación de las acciones educativas. (Msc. Graciela Montero Cepero; ISPJV)
Entonces es evidente que, al enfrentarnos a una temática tan poco abordada surjan un sin número de interrogantes como las que se exponen a continuación y tendrán su explicación a través del desarrollo del Artículo
¿Qué son los Valores de identidad estética?
¿Por qué es una prioridad necesaria y preventiva en la formación educativa de nuestros estudiantes?
¿Cómo se instrumenta nuestros profesionales la implementación por vía extracurricular en el Programa de Educación Estética?
DESARROLLO
Valores de identidad estética.

Es evidente que, para descodificar el compuesto de ésta frase según los antecedente filosóficos, hay que dejar plasmado que la conciencia estética de un individuo está formada por los sentimientos, los gustos, los valores y los ideales, que son sus componentes estructurales, es decir el conjunto de sentimientos, necesidades, ideales y teorías que reflejan el modo en que se realiza la relación estética del hombre con el mundo y el fenómeno estético que surge en esa relación. Ahora bien ¿Qué son los Valores de identidad estética?
Los valores estéticos son una dimensión del objeto de la Estética que abarca una parte de esta ciencia, de la cual aun se ha investigado muy poco por diversas causas, determinando dentro de todas ellas, que hoy por hoy se le atribuye solamente como filosofía del Arte, carente de otras posibilidades en las diferentes facetas de la vida del hombre en sociedad, sin embargo es evidente que el estudio y la práctica de ésta como ciencia, deja en un plano de ignorancia ha muchos de lo que piensa así en la actualidad, por lo que se hace necesario retomar sus fuerzas identificar al hombre nuevo y al viejo con esta como la parte olvidada de lo que es nuestra identidad con nuestra nación, con la sociedad y con todo lo que merezca adoptar una actitud estética, y pueda ser interpretado y perciba la esencia de nuestra identidad estética.
Por mucho que intentemos resumir la problemática planteada anteriormente, se hace lógico advertir que entendemos por identidad, decir que como definición se refugia, en un concepto complejo por el contenido y la extensión de la palabra. La primera caracterización aparece en la concepción cotidiana y formal de lo idéntico que considera a este de manera abstracta.
La identidad estética del hombre es analizada como termino complejo a partir de la medida en que el hombre elabora un determinado sistema de orientaciones valorativas, considerando una cosa buena y otra mala, una útil y otra perjudicial, una justa y otra injusta, una bella y otra fea es el estado armónico que alcanza el hombre teniendo la posibilidad de actuar efectivamente en correspondencia con lo que desea y lo que pretende evitar, con aquello a que aspira o teme
En el caso que nos ocupa la primera es la identidad del sujeto consigo mismo, el cual lo es, en tanto es también diferente. "La identidad consigo mismo, supone la diferencia con todo lo demás", (Engels, 1975). El psicólogo argentino Jorge Pellegrino expresa: "La identidad es una estructura de sostén del sí mismo, que sustenta el proceso de conformación del individuo, de su familia, de su etnia, de su nación", (Ulloa, 1999). En la personalidad, es el sello de identidad: de una familia que pertenece también a una etnia, a una nación, lo universal.
En el caso de la identidad estética del individuo, está vinculada a un proceso complejo en el desarrollo de la formación estética para la vida en la personalidad del individuo a partir de la apropiación de valores de identidad estética, lo que presupone un análisis por partes para su adecuada comprensión.
El carácter histórico-social de los valores estéticos es un hecho estatuido ya que éstos satisfacen las necesidades de expresión, comunicación , materialización objetivación de la humanidad entera , que no puede identificarse con una significación material, aunque se asocie a ella, sino con la revelación del desarrollo y las singularidad de la espiritualidad del hombre, y de su sensibilidad.
Son valores espirituales cuya significación social está dada en que, siendo subjetivos por su existencia, son objetivos por su determinación y proyección social. Ellos se sintetizan en los ideales y teorías de clases, grupos y personas, y a su vez en la medida en que estos ideales se corresponden con las tendencias del desarrollo social se convierten en valores de un contenido más rico y profundo.
Es necesario plantear que, no ha cualquier forma de la significación social se le puede atribuir valor, son valores aquellas que se desempeñan un en un papel positivo en la vida del hombre, aunque éste pueda hacer apropiaciones negativas o viceversa en la vida de sociedad, ya que en esta se producen experiencias que sistematizan el reflejo directo o indirecto de la conciencia social como significaciones sociales de la realidad por él sensopercibida
.... Los valores sólo pueden ser positivos. Los valores estéticos, como valores espirituales son las tendencias del desarrollo social expresadas en forma de ideal de perfección.
La belleza es el valor estético por excelencia, actúa al nivel teórico como eje del sistema categorial que capta las diversas y contradictorias manifestaciones esenciales de lo estético, a través de las categorías lo bello y lo feo; lo sublime y lo bajo; lo trágico y lo cómico. ..... (Msc. Graciela Montero Cepero; ISPJV)
De aquí que una identidad formada a partir de valores estéticos está presidida por que se manifiesta entre lo real y lo ideal, y que tienen una manifestación especial en la esfera de lo estético ....Las contradicciones entre lo logrado y lo deseado; la satisfacción y la insatisfacción, buscan su solución en esa modelación ideal de perfección, en términos absolutos, que el hombre sabe que no existe ni existirá en la realidad objetiva, de esa forma, sino en unidad con su opuesto: lo feo, lo imperfecto.....(Msc. Graciela Montero Cepero; ISPJV)
En armonía con lo ante expuesto, podemos llegar a la conclusión que la identidad de la persona a partir de los valores estéticos, está definida por la conducta que manifiesta un individuo conciente del mejoramiento humano que se plantea metas superiores, como una fuerza interior que lo impele al autoperfeccionamiento, a la acción transformadora y a la objetivación de lo mejor de sí mismo, es regido por un modelo, que no sólo lo inspira, sino cuya existencia provoca una conmoción emocional positiva en el sujeto, que promueve lo bello en toda su actividad humana , como valor en forma de ideal y que lo mueve a la acción transformadora del mundo objetivo que lo rodea, asumiendo sentimientos de incomodidad y desagrado ante tota forma que no ajuste a los valores ideo estéticos que deforman la transfiguración espiritual de lo más alto exponente de su especie.
Como la autora cubana que confiesa al referirse a su vínculo con la Habana: "Ella es responsable de la noción exacta que tengo de la ciudad, del color del mar y del cielo, de la textura del aire y de la tierra; del pueblo al que pertenezco, de la época en que vivo, del idioma en que hablo, es la que más me dio un sentido del ritmo y de la música, la que formó en mí, en fin, ese entrañable sentimiento de que todo vive en mí y de que yo vivo en todo. FERNANDEZ GONZALEZ. A. M. Comunicación educativa. Edit. Pueblo y Educación. La Habana 1995.

La Estética propicia patrones imprescindibles en la formación de valores una prioridad necesaria y preventiva en la formación educativa de nuestros estudiantes.
Como bien expresara Adolfo Sánchez Vázquez lo estético no tiene límites preestablecidos porque "varían de acuerdo con los ideales, los valores y las convenciones estéticas en el contexto social y cultural correspondiente".
Anteriormente explicábamos referente al objeto de la Estética que, no solamente se subscribía a la belleza como se ha asociado por lo general, por otra parte están los valores, los cuales explicitan una marco mas amplio acorde con su objeto y el contexto de la época en la que se desarrollen, ahora bien para abordar lo relacionado es necesario despejar que los valores forman parte de la conciencia estética como componente, así mismo la conciencia estética corresponde con sentimientos, gustos, entre otros elementos adyacentes importante para la formación de una identidad de valores estéticos en el proceso de formación del sentimiento estético.
¿Qué es el sentimiento estético?
Una de las más profunda cualidades de nuestra especie es esa particularidad espiritual, de percibir emociones, motivaciones, etc. que varían de acuerdo cual sea la experiencia a la cual nos enfrentamos, esta actividad de nuestra sensibilidad ante lo que nos rodea, donde nuestro pensamiento transcurre de forma asociativa dirigida hacia la memoria de la sensibilidad, elementos necesarios para su manifestación en nuevas percepciones estéticas de la realidad se conoce como sentimiento, de aquí que todo sentimiento es una síntesis de emociones y impresiones elementales, y a partir de la percepción, y el análisis sintetizan nuestro pensamiento hasta aproximarse ha nuestra
simpatías de sensaciones.
Por otra parte, el sentimiento estético es a la vez el modo y el resultado de la percepción estética, percibir estéticamente es captar la esencia en el fenómeno inmediato, directo, apoyándose en la experiencia emocional que está condicionada por el medió social, con su sistema de influencias educativas y patrones, tipo y estereotipos que se generan, hasta conformar el desarrollo del gusto estético en la persona.
Como dijera en su tema � Cómo educar valores � la (Msc. Graciela Montero Cepero; ISPJV)
.... � El gusto estético es un nivel intermedio de la conciencia estética, entre lo intuitivo y lo devenido consciente, que se mantiene en lo empírico, pero, donde la presencia de lo valorativo es más fuerte. Al igual que los sentimientos, el gusto es revelador de la individualidad, pero a la vez lo social ejerce sobre él una gran influencia, conformando la conciencia individual; el gusto estético no sólo es revelador del grado de asimilación de las normas estéticas elaboradas sobre la base de la cultura precedente, sino de la capacidad para valorar de manera independiente y de dar un valor estético personal a la realidad, en su diversidad
El gusto estético está condicionado socialmente, se forma en el proceso de la actividad, pero su originalidad está dada en que su realización tiene como base la experiencia personal. Por eso el gusto estético desarrollado permite al individuo reflejar al mundo de manera original. No cualquier juicio del gusto puede enriquecer la comprensión de lo valioso socialmente. Sólo es así, cuando con el gusto se expresa una personalidad capaz de valorar el contenido a través de la forma, evitando así la banalidad, la superficialidad y la volubilidad. La necesidad estética permite que el individuo rebase los límites de la simple....
Ahora bien, la apreciación del objeto, aglutina el sentimiento y el gusto estético en un todo único emocional intelectual para convertirse al sujeto en un ente activo en la relación estética con el mundo, de aquí que los valores estéticos, como valores espirituales son las tendencias del desarrollo social expresadas en forma de ideal de perfección.
El valor estético por perfección es el de la belleza, opera al nivel teórico como árbol del sistema categorial que capta las diversas y contradictorias declaraciones inevitables de lo estético, a través de las categorías lo bello y lo feo; lo sublime y lo bajo; lo trágico y lo cómico, y todas las otras formas elementales que se agrupan donde en dos primeros grupos se deducen la belleza, la elegancia y la gracia los cuales constituyen una misma familia de valores afines, que se diferencia por los matices de una cualidad que es común a todos ellos, variaciones de la categoría de o bello y lo feo.
Así mismo por otra parte, categoría tales como lo tragicómico o lo heroico, se unen distinto valores fundamentales: lo tráfico y lo cómico, en el primer caso, y lo sublime y lo bello en el segundo, de modo que toda la variedad de valores estéticos pueden ser divididos en tres grupos: los fundamentales, los complementarios y los sintéticos.
La Educación Estética una prioridad necesaria y preventiva en la formación educativa de nuestros estudiantes
En la medida que, que nuestros estudiante puedan tener muy bien definido que es lo bello y lo feo, lo sublime y lo bajo, y lo trágico y lo cómico, evolucionaran con una adecuada y lograda identidad estética hacia la vida previniéndolos como una prioridad en su formación educativa, así mismo una vez adaptados no podrán ser pasivo ante el antivalor apropiándolo en cada caso con una actitud transformadora hacia todo lo que le rodea, enseñando a aprender a sus coetáneos y arrastrándolo en el ideal estético que los apropia.
Ahora bien, la evolución del contenido de los valores estéticos a través de la historia universal de la humanidad ha cambiado de diversas formas, dependiendo de la época y las culturas el ideal del objeto sensorialmente percibido es muy diferente en cada caso, lo bello, lo sublime y lo trágico, al igual que lo feo, lo bajo y lo cómico no es lo mismo para el socialismo, que para el capitalismo, un ejemplo muestra que los trágicos problemas globales del medio ambiente fusionan dos grandes ideales que marchan unidos contradictoriamente, movilizando dos percepciones ambientalistas muy diferentes, primero la que apropia la urgente necesidad del uso adecuado de los recursos naturales para la preservación de la especie humana, la otra de un discriminado uso que trae la degradación del medio ambiente que amenaza como consecuencias acabar con la supervivencia de la especie humana, dejando como saldo, el hambre, las enfermedades y la pobreza, lo que corrobora el hecho de que, los valores son "expresión del ser social de los objetos y fenómenos" así mismo es evidente que si la tragedia es inconcebible sin un héroe sublime, la comedia es inconcebible sin un villano ridículo.
De aquí que: en el documento � Cartas sobre la educación estética del hombre � se dijera:
El futuro de la humanidad depende de si logra o no convertir el principio estético en principio fundamental de toda la actividad del hombre y de la sociedad ya que esta es la única capaz de superar el carácter fraccionario del individuo y sus desarrollos unilaterales y deformes organizados en la historia de la civilización
Schiller
La pertenencia de valores estéticos como elementos de la identidad estética posibilita un equilibrio de relaciones valórales como la unidad entre lo conforme y lo opuesto, entre lo convergente y lo divergente lo cual hace un amplio diapasón de situaciones concretas desde la conciencia entre la belleza y el bien, la utilidad, el progreso y la verdad, hasta el antagonismo entre ellos, la escala de valores y antivalores que posibilita la teorías estética se esencia en lograr cambiar el estilo de vida de una persona cambiando los símbolos de pertenencia con los que se ha acostumbrado a convivir, crearle un sistema de vida que incluya la formación de un gusto estético en la búsqueda del ideal estético del modelo de hombre al que aspiramos, una vez que existe como imagen modeladora, rige y orienta el accionar del hombre con su mundo
En armonía con lo antes expuesto, se valora que el caso de lo bello no es sólo lo bello artístico, como muchos aún consideran. Es la categoría que sintetiza el valor estético más universal cuando lo bello o lo grandioso ocupan nuestra vista y nos subyugan, hay luego como una interna reacción de nuestras fuerzas que dilata nuestro espíritu, lo saca de su nivel y parece elevarlo a la altura del objeto contemplado; y como en el hombre no hay sensación, ni imagen, ni afecto que de una u otra suerte no se convierta en acción o en tendencia para la acción, la necesidad de imitar, de realizar (. . .) la semejanza, adquiere en estos casos una incontrastable energía, que la convierte en un instrumento feliz de educación personal y de progreso.
Los valores en el hombre , la naturaleza y los objetos .
El ideal de belleza que se pueda tener hacia el hombre está determinado por el ideal del hombre nuevo, multifacético y armónicamente desarrollado fuerte de cuerpo y espíritu, luchador y creador, la imagen del hombre trabajador y combatiente, poseedor de una inmensa energía y una fe incondicional en el futuro creado por él, hombre absolutamente real, espiritual y enaltecido que sabe fundir el trabajo con el sueño.
Hombre emprendedor del porvenir amante de la belleza de la creación, difícil pero feliz triunfador contruidor de un mundo nuevo representado por la Paz, el trabajo la libertad la igualdad la fraternidad y la felicidad.
Este ideal de belleza unido a lo feo se dirige además hacia la naturaleza como la concepción que rompe con una posición absoluta hacia la naturaleza, que ve en esta una fuerza natural que arrasa con el hombre la que contrapone la belleza de esta, a los feos resultado de la intervención técnica del hombre en la vida de aquella , y hacia la monstruosa maniobra que rompe la belleza virginal de la naturaleza, sin una concesión medioambientalita que puede combinarse de modo asombrosamente armónico con la belleza natural, la armonía de una relación asombrosa, convincente de la unidad entre la naturaleza y las obras de la mano del hombre.
Por otra parte, la identidad estética de lo bello y lo Feo en el mundo de los objetos materiales, plantea que un objeto tiene valor estético cuando es suficiente la correspondencia entre la finalidad ideal subjetiva y objetiva, comprobado por el funcionamiento práctico del objeto y comprendido por los hombres que la utilizan, la perciben y las valoran estéticamente.
Se estima como fundamental, los atributos externos de la perfección: la concordancia visible entre las partes, el carácter proporcional y la organización formal.
Cuando contemplamos el proceso mismo de la actividad humana, si incluye su propia organización , el carácter rítmico preciso, e ordenamiento de un producto del trabajo y en el ordenamiento del proceso creador el elevado nivel de este orden alegra estéticamente tanto al propio maestro como a la personas que observan su labor pues la capacidad de crear lo ordenado, lo organizado, lo estructuradamente integro, es como uno de nuestros ideales sociales mas importantes: el ideal de la libertad actividad humana.
Al mismo tiempo se hace necesario evidenciar que, la existencia de lo feo, lo bajo, lo ridículo, lo grotesco, no puede ser omitida ni eludida, la formación del hombre no puede agenciarle una idealización de la vida apartada de esta realidad con la que tiene obligatoriamente que convivir, por cuanto su fin último es prepararlo para ella, en un mundo en el que coexiste la belleza y la fealdad, la virtud y el vicio, la elevación espiritual y la degradación humana. A este debe concedérsele el conocimiento para orientarse en ese mundo, de acuerdo con un sistema de valores que lo conduzcan al mejoramiento social y personal.
La representación de lo Feo permite valorar como pudo y debió ser la vida si se hubiera depurado de las monstruosidades, y contradice el ideal de una posible vida bella del hombre, esta verdad la dejó muy clara el autor cuando dijo: � Lo Feo considera la esencia de la Ley eterna e invariable de la vida humana.� (Moisés Kagan, Lecciones Estética Marxista Leninista)
La tendencia Axiológica en la actualidad, busca la formación de valores en nuestras escuelas a partir adaptar a nuestros estudiantes con los indicadores positivos de los valores a formar, olvidando la otra cara de la moneda o los antivalores como los manejan algunos autores, la verdad es que se aprende lo bueno, lo bello y lo sublime a partir del modelo opuesto al que se puede comparar.
Lo estético complementa muy bien este mecanismo, sistematizando que la apropiación de un ideal de belleza no es posible sino a través de apropiar el camino contradictorio de su manifestación en las relaciones del hombre con el mundo. Lo sublime como lo excepcionalmente bello, provoca un cierto desasosiego. No es lo común, lo alcanzable, lo que de modo natural rodea al hombre, lo que encuentra hasta en cosas sencillas y cotidianas. Lo sublime, ". . . consterna, conmueve y eleva el espíritu del hombre"

Es lógico por lo tanto que, si lo belleza suscita el placer de encontrar un relativa armonía entre lo real y lo ideal, lo trágico militarizar todas las fuerzas del sujeto hacia la transfiguración de la realidad, ante la certidumbre de que no se compensa con lo ideal, pero con la persuasión de que puede ser transformada. Por otra parte la moda vincula la tragedia a los géneros artísticos expresado en la Literatura y el Teatro es muy bien conocida la historia trágico cómica de Edipo rey el cual bajo un ataque de ira mata aun hombre en el camino a su reino, y resulta ser su propio padre, cuando llega al gobierno se casa con una mujer que llega a ser madre de sus dos hijas y resulta ser su propia madre, y como sentencia de sus pecados inconcientes manda a que se le saque sus dos ojos, arrastrando hasta el final de sus días la burla cómica de sus semejantes.
Sin embargo lejos de este sentido artístico, la verdad es que lo trágico cómico es un valor estético porque divisa un momento significativamente decisivo para el desarrollo social en una etapa dada, especialmente en su expresión más alta, de los procesos revolucionarios. Pero aún, los conflictos trágicos de menos envergadura social, porque atañen a lo individual, tienen una esencia compleja y una fuerte carga filosófica. Lo trágico, se relaciona con la necesidad y la posibilidad; la casualidad, la vida y la muerte. Sus protagonistas pueden llegar a alcanzar el rango de héroes, y por ello, otros valores: filosóficos, políticos, morales y patrióticos, se interrelacionan con este valor estético. El protagonista de lo trágico, es un movilizador de conciencias, se erige en ejemplo de que la imposibilidad del triunfo de su acción, es relativa y temporal. La acción misma propicia el desenvolvimiento de lo socialmente necesario.
Lo cómico, como dijera Martí "un manojo de látigos que rematan en cascabeles", fustiga lo real imperfecto, que se niega a desaparecer o a transformarse a pesar de que haya un consenso social que evidencia descontento o repudio hacia él.
La no correspondencia entre lo real y lo ideal se da a través de la imagen ridícula, que mueve a la burla, la broma y la sátira, según sea el caso. Este valor estético requiere de un desarrollo de la autoconciencia social e individual y a su vez, contribuye a ellas. Sus efectos educativos, cuando no se distorsiona su esencia, son muy beneficiosos.
El sujeto, al percibir como cómico al objeto, y reírse, se compara con él, aunque no tenga conciencia de ello, y esto repercute en un deseo de no ser él, objeto de lo cómico, que debe traducirse en un autoperfeccionamiento. Pero, lo más importante es que lo cómico contribuye el desarrollo del sentido crítico como el punto culminante, en su expresión más creativa, del acto de valorar.
La implementación de los valores estéticos por vía extracurricular en el Programa de Educación Estética.
Después del análisis valorativo desarrollado hasta el momento no se pretende, en primer lugar dar receta para la formación de valores estéticos, es una actividad de mucha imaginación y creatividad, en el Programa de Educación Estética traza todo un diseño curricular a partir ce las asignatura del ciclo estético en la que se encuentran Educación Musical, educación Plástica, y todos los talleres de apreciación y creación que desarrollan actualmente la Brigada José Martí de instructores de Arte insertados en todas nuestras escuelas. Al mismo tiempo están todas las asignaturas para las que se dan líneas de trabajo para esta formación que apuntan al enriquecimiento estético a partir de la vinculación de contenidos de profundos valores culturales que a la larga tienen como objetivo a largo alcance este fin.
Por otra parte, para el trabajo de formación de valores que pretendemos sugerir, es fundamental la actividad estética como el método de educación estética por excelencia, porque solo en ella se forma una actitud estética ante la realidad que a nivel de conciencia estética se da como experimentación consciente de su unidad directa con el mundo, y sólo en ella surgen los valores y los ideales estéticos, esta actividades se enmarcan en la objetivación de una proyección ideal de belleza surgida sobre esa base donde no se puede ser ajenos al medio que nos rodea, al paisaje, los sujetos con quiénes nos relacionamos y el trabajo que hacemos, con una percepción real de empatía, para la actividad estética hay que insertarse en el espectro de manifestaciones de la actividad humana en su conjunto, debe además concebirse como un sistema de elementos contradictorios entre sí e íntimamente relacionados.
Por otra parte educar en valores estéticos es permitir dar la posibilidad a nuestro estudiantes además de captar y valorar lo existente, le es, de crear nuevos objetos y fenómenos, creación que no puede ser arbitraria, no puede romper las relaciones equilibradas de las cuales hemos valorado las cuales, actúan con fuerza de ley, por consiguiente, lo que el hombre goza y disfruta como armonía, como belleza, se revela como ley en el acto de la creación. Por lo demás estar decir que la actividad para apropiar y apropiarse de valores estéticos es una actividad sujeta a límites objetivos, que deben ser percibidos, sentidos y conocidos, con el propósito de la creación original y renovadora

Conclusiones
� En el presente se evidencia que los valores estéticos es una parte del el objeto de estudio de la Estética que responde a fines mas abarcadores e imprescindible para formación de nuestros estudiantes.
� El tema valorado explicita que la identidad Estética, una vez formada complementa una prioridad necesaria y preventiva en la toma de decisiones , juicios y apropiaciones en la experiencia escolar, y el Programa para la vida
� Las ideas planteadas demuestran que la implementación de valores estéticos por vía extracurricular en el Programa de Educación Estética fortalecen labor educativa en la preparación de docentes y la formación de nuestros estudiantes.
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Bibliografía
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LA APROPIACIÓN DE VALORES DE IDENTIDAD ESTÉTICA

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