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Lunes 20 de Marzo de 2023 |
 

Los Submarinos Alemanes en la Segunda Guerra Mundial 1939-1945

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Esta monografía solo pretende compilar información referente los submarinos alemanes en la Segunda Guerra Mundial y en especial en la Batalla del Atlántico por el dominio de las comunicaciones marítimas.

Agregado: 20 de DICIEMBRE de 2021 (Por Eddie Ramírez) | Palabras: 66494 | Votar | Sin Votos | Sin comentarios | Agregar Comentario
Categoría: Apuntes y Monografías > Historia >
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    Autor: Eddie Ramírez (info@alipso.com)

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    Monografía

     

     

     

     

     

     

     

     

    Los Submarinos Alemanes en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945)

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    Fecha: 17 de Octubre de 2021

    Lugar: Ciudad de Panamá

    Autor: Eddie Ramírez

     

    Indice

    ·       Portada. 1

    ·       Índice. 2

    ·       Introducción: 3

    ·       Desarrollo. 4

    ·       Capítulo I: Antecedentes. 7

    ·       Capítulo II: Inicio de la Guerra Naval. 13

    ·       Capítulo III: La Batalla del Atlántico (Primera Fase septiembre 1939 a diciembre 1941). 20

    ·       Capítulo IV: La Batalla del Atlántico (Segunda Fase diciembre 1941 a junio 1943). 41

    ·       Capítulo V: La Batalla del Atlántico (Tercera Fase junio 1943 a mayo 1945). 51

    ·       Capítulo VI: La Manada de Lobos. 57

    ·       Capítulo VII: Los submarinos alemanes en el mar Caribe 1942 y 1943. 67

    ·       Capítulo VIII: Los submarinos alemanes en las costas de Brasil. 82

    ·       Capítulo IX: Los submarinos alemanes en el Océano Ártico. 85

    ·       Capítulo X: Los submarinos alemanes en el Estrecho de Gibraltar y Mar Mediterráneo. 88

    ·       Capítulo XI: Los submarinos alemanes en el Océano Indico. 92

    ·       Capítulo XII: El destino de los submarinos alemanes al finalizar la Segunda Guerra Mundial. La Operación Rengenbogen. 101

    ·       Capítulo XIII: El proceso de rendición de los submarinos alemanes al finalizar la Segunda Guerra Mundial. La Operación Deadlight. 106

    ·       Capítulo XIV: Enseñanzas de la guerra de submarinos alemanes en la Segunda Guerra Mundial. 121

    ·       Capítulo XV: Balance final de la guerra de submarinos alemanes en la Segunda Guerra Mundial. 126

    ·       Capítulo XVI: Cantidad de submarinos alemanes construidos durante la Segunda Guerra Mundial. 137

    ·       Capítulo XVII: Las Flotillas de submarinos alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. 159

    ·       Capítulo XVIII: Las tripulaciones de los submarinos alemanes. Reclutamiento, formación, capacitación y adiestramiento. 165

    ·       Capítulo XIX: Rangos y grados en la Kriegsmarine. 173

    ·       Capítulo XX: Dotaciones de los submarinos alemanes. 180

    ·       Capítulo XXI: Los Comandantes de los submarinos alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. 191

    ·       Capítulo XXII: Las patrullas de Combate. 202

    ·       Bibliografía: 207

    Introducción

    La guerra submarina es una de las tres áreas operacionales de la guerra naval y a su vez comprende la guerra submarina de ataque, las actividades antisubmarinas, la guerra de minas y las contramedidas para minas. Cada una de ellas posee elementos y estrategias especializadas que aprovecha las ventajas tácticas propias e inherentes.

    El submarino, apoyado en la sorpresa, obliga a su oponente a un despliegue de medios y a un esfuerzo en las operaciones considerablemente mayor, a la vez que le restringe severamente su libertad de acción.

    Una fuerza submarina, bien dirigida, correctamente empleada en la maniobra estratégica y con dotaciones perfectamente entrenadas, puede decidir el curso de las operaciones navales en la guerra en el mar.

    Durante la Segunda Guerra Mundial, el arma de submarinos de la Marina de Guerra de Alemania (Kriegsmarine), conocidos en la jerga de la marina alemana como U-Boot (del alemán Unterseeboot), en plural U-Boote, y también llamados Lobos Grises, fue la espina dorsal de la Batalla del Atlántico, donde los submarinos alemanes llevaron a cabo la mayoría de sus operaciones, en un intento de cortar las comunicaciones marítimas del Reino Unido con América y las colonias del Imperio Británico.

    Los U-Boote operaron en todos los océanos del mundo. Desde el Mar del Norte, hasta el Atlántico, la costa este norteamericana, el mar Caribe, el Ártico e incluso el Océano Índico y el Pacífico.

    Después del gran éxito en los primeros años de la guerra, los U-Boote pagaron un precio terrible por ello. Aproximadamente el 80% de todos los submarinos fueron destruidos, 28.000 de los 40.000 tripulantes murieron durante la guerra y 8.000 fueron capturados.

    Hoy, los U-Boote son recordados sobre todo por su contribución bélica a la causa de Alemania durante la Segunda Guerra Mundial, ya fuera actuando en solitario o utilizando la táctica de la “Manada de lobos”, lo que les permitió hundir a miles de buques de las fuerzas aliadas. Su éxito fue tal, sobre todo a partir de la ocupación de Noruega y Francia en 1940, que Sir Winston Churchill, Primer Ministro del Reino Unido, llegó a escribir: “La única cosa que realmente me asustó durante la guerra fue el peligro representado por los submarinos”.

     

    Desarrollo

    Esta monografía solo pretende compilar información referente los submarinos alemanes en la Segunda Guerra Mundial y en especial en la Batalla del Atlántico por el dominio de las comunicaciones marítimas.

    Para ello, hemos contemplado los siguientes Capítulos:

    ·       Capítulo I: Antecedentes.

    ·       Capítulo II: Inicio de la Guerra Naval.

    ·       Capítulo III: La Batalla del Atlántico (Primera Fase septiembre 1939 a diciembre 1941).

    a.  Inicios de Septiembre 1939 a Marzo 1940.

    b.  Inicios de 1940 a mediados de 1940.

    c.   La Operación León Marino y la Batalla de Inglaterra (Mediados 1940 a finales de 1941).

    ·       Capítulo IV: La Batalla del Atlántico (Segunda Fase diciembre 1941 a junio 1943).

    a.  La entrada de Estados Unidos en la guerra y la ampliación de la zona de operaciones (Diciembre 1941 a Julio 1942).

    b.  Inclinación de la balanza a favor de los Aliados (Julio 1942 a Junio 1943).

    ·       Capítulo V: La Batalla del Atlántico (Tercera Fase junio 1943 a mayo 1945).

    ·       Capítulo VI: La Manada de Lobos.

    ·       Capítulo VII: Los submarinos alemanes en el mar Caribe 1942 y 1943.

    ·       Capítulo VIII: Los submarinos alemanes en las costas de Brasil.

    ·       Capítulo IX: Los submarinos alemanes en el Océano Ártico.

    ·       Capítulo X: Los submarinos alemanes en el Estrecho de Gibraltar y Mar Mediterráneo.

    ·       Capítulo XI: Los submarinos alemanes en el Océano Indico.

    a.  El primer reconocimiento.

    b.  El Eisbar Gruppe (Primera Ola).

    c.   El Seehund Gruppe (Segunda Ola).

    d.  El Grupo Monzón.

    ·       Capítulo XII: El destino de los submarinos alemanes al finalizar la Segunda Guerra Mundial. La Operación Rengenbogen.

    ·       Capítulo XIII: El proceso de rendición de los submarinos alemanes al finalizar la Segunda Guerra Mundial. La Operación Deadlight.

    a.  El proceso de rendición.

    b.  La Operación Pledge.

    c.   La Conferencia Potsdam.

    d.  La Comisión Tripartita.

    e.  La Operación Deadlight.

    f.    Lista detallada de los 156 U-Boote rendidos a los Aliados y su destino.

    ·       Capítulo XIV: Enseñanzas de la guerra de submarinos alemanes en la Segunda Guerra Mundial.

    ·       Capítulo XV: Balance final de la guerra de submarinos alemanes en la Segunda Guerra Mundial.

    a.  Pérdidas de U-Boote durante la guerra.

    b.  Pérdidas de U-Boote en los diferentes Tetaros de Operaciones.

    c.   Pérdida total de U-Boote por motivos.

    d.  Las pérdidas de tripulaciones de los U-Boote.

    e.  U-Boote perdidos en acción.

    f.    U-Boote capturados.

    g.  U-Boote no comisionados.

    h.  Buques mercantes perdidos por los Aliados.

    i.    Buques de guerra perdidos por los Aliados.

    ·       Capítulo XVI: Cantidad de submarinos alemanes construidos durante la Segunda Guerra Mundial.

    a.  Cantidad de U-Boote en servicio de la Kriegsmarine durante la Segunda Guerra Mundial.

    b.  Cantidad de U-Boote construidos por años.

    c.   Cantidad de U-Boote construidos por astilleros.

    d.  Tipos de U-Boote construidos.

    e.  Cantidad de U-Boote construidos por Tipo.

    f.    Descripción de los Tipos de U-Boote construidos.

    g.  U-Boote capturados al enemigo y comisionados en la Kriegsmarine.

    ·       Capítulo XVII: Las Flotillas de submarinos alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.

    ·       Capítulo XVIII: Las tripulaciones de los submarinos alemanes. Reclutamiento, formación, capacitación y adiestramiento.

    a.  Reclutamiento.

    b.  Formación, capacitación y adiestramiento de los Suboficiales.

    c.   Formación, capacitación y adiestramiento de los Oficiales.

    d.  Capacitación y adiestramiento de las tripulaciones de los U-Boote.

    e.  Baubelehrung.

    ·       Capítulo XIX: Rangos y grados en la Kriegsmarine.

    a.  Rango de Oficiales.

    b.  Rango de Suboficiales.

    c.   Rango de Tropa Alistada (Marinería).

    ·       Capítulo XX: Dotaciones de los submarinos alemanes.

    a.  Dotación de un U-Boot.

    b.  Algo más sobre las tripulaciones de los U-Boote.

    ·       Capítulo XXI: Los Comandantes de los submarinos alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.

    a.  ¿Cómo se convertían los Oficiales en Comandantes de U-Boote?

    b.  Cantidad de Comandantes de U-Boot.

    c.   La edad de los Comandantes de U-Boote.

    d.  Los Comandantes de U-Boote más exitosos.

    ·       Capítulo XXII: Las patrullas de Combate.

     

     

     

     

     

     

    Capítulo I: Antecedentes.       

     

    Es necesario remontarnos al final de la Primera Guerra Mundial[1] para entender la importancia de la Marina de Guerra alemana, antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial.

    En este sentido, podemos indicar que el Armisticio del 11 de noviembre de 1918, también conocido como el Armisticio de Compiègne, mediante el cual se puso fin a las hostilidades de la Primera Guerra Mundial, incluía unas duras condiciones para los perdedores que contemplaba: La desmilitarización de Alemania, supresión del servicio militar obligatorio, prohibición de fabricar material de guerra y la compensación por los daños causados durante la guerra, entre otros.

    Asimismo, el citado Armisticio decidió que la mayor parte de los navíos de la Flota Imperial denominada Reichsmarine[2] (10 acorazados, 14 cruceros, 50 destructores y todos los submarinos) debía ser desmantelada y entregada a los vencedores. Se optó como lugar de reclusión de estas unidades a la gran Base Naval Británica Scapa Flow[3], en las islas Orcadas[4], a donde fueron conducidas dichas naves mientras se negociaba sobre el futuro de estas. No obstante, el 21 de junio de 1919, el Almirante alemán Ludwig von Reuter, temiendo que los buques fueran repartidos entre las potencias aliadas, dio la orden secreta a sus hombres de hundir sus propias unidades. De un total de 74 navíos que se hallaban en la Base Naval Scapa Flow, 52 se fueron a pique a manos de sus tripulantes, lo que fue el suicidio colectivo de la Marina de Guerra Reichsmarine.

    El posterior Tratado de Versalles del 28 de junio de 1919, que entró en vigor el 10 de enero de 1920, de las muchas disposiciones de este, una de las más importantes y controvertidas estipulaba que Alemania y sus aliados aceptasen toda la responsabilidad moral y material de haber causado la guerra y deberían desarmarse, realizar importantes concesiones territoriales a los vencedores y pagar enormes indemnizaciones económicas a los estados victoriosos. A causa del mencionado tratado, Alemania redujo considerablemente su territorio europeo de 540.766 km² en 1910 a 468.787 km² en 1925, además fue obligada a ceder todo su imperio colonial, que fue repartido entre las naciones vencedoras, principalmente entre el Reino Unido[5] y Francia.

    Podemos concluir que la guerra en el mar durante la Primera Guerra Mundial terminó en una contienda pareja pues ninguno de los dos bandos ganó. La flota alemana no fue derrotada, sino que tuvo que rendirse casi intacta y fueron sus propias tripulaciones las que finalmente la enviaron al fondo del mar.

    La obligación al pago de las reparaciones de guerra impidió a Alemania consolidar su economía. Ante un panorama salpicado de huelgas, disturbios, paro e inflación, la desengañada población germana giraría su vista hacia los que le proponían soluciones radicales para poner así fin a ese estado de inestabilidad política permanente: los comunistas y los nacionalistas.

    El Tratado de Versalles fue socavado tempranamente por acontecimientos a partir de 1922 cuando la Marina de Guerra alemana Reichsmarine, para eludir las limitaciones establecidas en el mismo, desarrolló en secreto hasta mediados de la década de 1930 un programa de construcción de submarinos a través de la empresa holandesa NV Ingenieurskantoor voor Scheepsbouw, conocida como Ivs y establecida en La Haya, con el fin de mantener y desarrollar el conocimiento de los submarinos alemanes. La compañía Ivs diseñó varios tipos de submarinos, incluido el submarino prototipo CV-707 para la Marina de Guerra de Finlandia, llamado posteriormente Vessikko, dos submarinos Tipo UB III para Turquía y los prototipos de los submarinos alemanes Tipo II y Tipo VII.

    Debemos destacar que la historia de la U-Bootswaffe (en castellano Arma submarina) está íntimamente ligada al Almirante Karl Dönitz[6], el creador de la fuerza de submarinos de la Alemania de la posguerra en 1919. 

    El Alto Mando de la Marina de Guerra alemana Reichsmarine ya había completado los planes en 1932 para reanudar la construcción de submarinos, de hecho, las piezas de ensamblaje de los nueve primeros submarinos se produjeron en Holanda, España y Finlandia, a los que se les denominó, como sus antecesores, clase "U". El U-1 fue botado el 18 de junio de 1935, y las siguientes unidades a partir de septiembre de ese mismo año.

    A mediados de la década de 1930, en los altos mandos alemanes se discutió sobre el Zielplan[7] (en castellano Plan Z) que era un proyecto muy ambicioso centrado casi exclusivamente en dotar de armamento al Ejército alemán y a la Fuerza Aérea alemana en detrimento de la Marina de Guerra. El mismo contemplaba el programa de construcciones navales, el cual se enfocaba en la construcción de una gran flota submarina de 250 unidades y una pequeña flota de buques de superficie para la protección de la costa.

    Cuando Adolf Hitler asumió el poder el 30 de enero de 1933, la Wehrmacht[8] alemana se encontró en una posición de impotencia. La fuerza del Ejército alemán era de 100.000 hombres. No había ninguna Fuerza Aérea alemana. La Armada aún no había alcanzado ni siquiera la fuerza permitida en el Tratado de Versalles, teniendo solo una fuerza total de 15.000 hombres. Hitler tras tomar el poder, retiró a Alemania de la Sociedad de Naciones[9] y de la Conferencia de Desarme[10].

    En enero de 1935, la Sociedad de Naciones celebró un plebiscito en el Sarre, que era un territorio que había pertenecido a Alemania y que ahora era administrado por este organismo internacional, sobre su posible reincorporación al país germano. En medio de una intensa agitación, el 13 de enero de 1935, con un voto favorable del 90,73%, el Sarre fue reincorporado a Alemania el 17 de ese mismo mes.

    En marzo de 1935, Adolf Hitler, rechazó las cláusulas del Tratado de Versalles las cuales pretendían mantener a Alemania desmilitarizada y violó ampliamente el mismo, restaurando abiertamente el Ejército alemán y la Marina de Guerra alemana Reichsmarine, la cual a partir de ese año se denominó Kriegsmarine.

    El 14 de abril de 1935 se firmó el Frente de Stresa[11] el cual acordó la oposición a cualquier intento de Alemania para tratar de cambiar las condiciones del Tratado de Versalles. El acuerdo no tuvo éxito en la práctica pues dos meses después, en junio de 1935, el Reino Unido y la Alemania nazi firmaban el Acuerdo Naval Anglo-Alemán, que violaba implícitamente el Tratado de Versalles, permitiendo a Alemania el incremento de su fuerza naval hasta el 35 % de la Marina Real Británica,[12] y la posibilidad de construir submarinos. El Reino Unido no consultó ni a la Sociedad de Naciones ni a sus asociados en el acuerdo, Francia e Italia, lo que causó gran consternación en París y Roma, y debilitó el recién creado Frente de Stresa.

    El 27 de septiembre de 1935 fue creada la primera unidad de U-Boote o Unterseebootsflotille, conocida como la U-flotilla Weddigen, bajo el mando del entonces Fregkpt Karl Dönitz. Esta flotilla adoptó el nombre en memoria del Kplt. Otto Weddigen, Comandante del U-9, quien, durante la Primera Guerra Mundial, en septiembre de 1914 hundió los cruceros británicos[13] HMS Aboukir, HMS Cressy y el HMS Hoque.

    Ese mismo mes, los primeros U-Boote de la Schulverband (en castellano Unidad de Entrenamiento), asignados a la Unterseebootsschule (en castellano Escuela de Submarinos), y a la Unterseebootsflotille (en castellano Flotilla Submarina) Weddigen, fueron organizados dentro de una estructura operacional bajo el mando del Kapt.z.S. Karl Dönitz, nombrado Führer der Unterseeboote (F.d.U) (en castellano Jefe de los Submarinos), quien más tarde llegaría a ser el Comandante de la Kriegsmarine.

    En 1936, se enviaron 2 submarinos de la Marina de Guerra de Alemania al Mediterráneo en la Operación Úrsula[14] tanto para apoyar a las tropas sublevadas en la guerra civil española, como para el propio entrenamiento de las dotaciones, hundiendo el U-Boot U-34 al submarino republicano C-3 frente a Málaga el 12 de diciembre de 1936.

    Alemania, creía firmemente en la Teoría del Lebensraum[15] (en castellano "espacio vital") creada por el geógrafo alemán Friedrich Ratzel, y que consistía en la anexión de territorios con el propósito final de alcanzar el desarrollo de un país, en este caso, de territorios de habla alemana situados en otros países. La conquista de este espacio vital encaminó los esfuerzos del Führer para dar su particular sentido a la guerra que se desataría en septiembre de 1939.

    El 7 de marzo de 1936, unos 30.000 soldados alemanes ocuparon Renania (en alemán, Rheinland), que era un territorio desmilitarizado ubicado en la orilla oeste del Rin que perteneció a la Alemania Imperial y ocupado por los Aliados después de la Primera Guerra Mundial. La tibia respuesta de los antiguos Aliados tomó por sorpresa a los mandos alemanes que esperaban una reacción más contundente. La figura del Führer salió fortalecida ante la opinión pública alemana y anticiparía las futuras acciones expansionistas. A la larga, este evento sería uno de los factores que contribuyó a la remilitarización de Alemania y a la consiguiente escalada expansionista que coadyuvaron al estallido de la Segunda Guerra Mundial.

    En 1937, Hitler exigió para Alemania la anexión de la ciudad libre de Danzig (Gdansk en polaco), que el Tratado de Versalles había puesto bajo protección de la Sociedad de Naciones, y también el acceso ferroviario extraterritorial por el "corredor polaco", la frontera de Polonia con Prusia Oriental. 

    El 12 de marzo de 1938, fuerzas alemanas entraron en Austriaconsumándose la unión política de Alemania y Austria, el llamado Anschluss

    En octubre de 1938, Alemania ocupó la región de los Sudetes[16], restándole con ello cerca de 30.000 km² a Checoslovaquia, sin que las potencias europeas reaccionaran y tomaran acciones concretas que revirtieran la situación, como establecía específicamente el Tratado de Versalles.

    La ocupación de los Sudetes por parte de Alemania y la solicitud de auxilio por parte del Gobierno de Checoeslovaquia a Francia y Reino Unido, provocaron la celebración en septiembre de 1938 de la Conferencia de Múnich, conocida como los Acuerdos de Munich[17], para decidir no sólo la suerte de Checoslovaquia, sino también la de toda Europa. Se reunieron Chamberlain, Daladier, Mussolini y Hitler, y se aceptó la ocupación alemana de Checoslovaquia tan sólo en las zonas de habla germana. Ingenuamente creyeron que Hitler cumpliría su compromiso y no invadiría otros países. 

    El 15 de marzo de 1939, Alemania ocupó Checoslovaquia.

    La crisis de Danzig fue la última reivindicación que Adolf Hitler, la cual comenzó en abril de 1939, momento elegido por el Führer para lanzar un discurso al Reichstag en que se exige la restitución de la soberanía alemana sobre Danzig, así como un ferrocarril y una carretera extraterritoriales que cruzaran el corredor polaco (que separaba Prusia oriental del resto del territorio alemán desde el final de la Primera Guerra Mundial como consecuencia del Tratado de Versalles).

    En la madrugada del 1º de septiembre de 1939, tras la negativa del gobierno polaco a atender las demandas de Alemania y de la población alemana de Danzig, el acorazado alemán SMS Schleswig-Holstein bombardeó el fuerte polaco de Westerplatte en la costa del Mar Báltico[18], dando inició a la Segunda Guerra Mundial.

     

     

     

     

     

     

     

     

    Capítulo II: Inicios de la Guerra Naval.

     

    La mañana del 1º de septiembre de 1939, y con la justificación de los hechos acaecidos el día anterior, soldados alemanes avanzaron hacia Polonia a través de distintos puntos fronterizos. Esta invasión conllevó a la declaración de guerra de Francia y el Reino Unido, la cual llevó a la rápida intervención de países con cierta autonomía como Canadá, India, Nueva Zelanda y Australia.

    Una vez caída Polonia, los planes de la Alemania nazi[19] se centraron en el oeste de Europa. Para vergüenza de los Aliados[20], durante este período tanto británicos como franceses permanecieron pasivos lo que se conoció como la drôle de guerre o guerra de broma[21].

    Con el ataque alemán a Polonia, el Alto Mando de Guerra Naval Seekriegsleitung (Skl)[22] era consciente que la Kriegsmarine estaba en manifiesta inferioridad ya que, pese a haber eludido todas las restricciones del Tratado de Versalles de 1919, la flota alemana era pequeña en comparación con las flotas británica o francesa. De igual manera, la desproporción era aún más acentuada que durante la Primera Guerra Mundial y daban por imposible la destrucción de la flota enemiga. Igualmente, sabían que la única manera de asfixiar al Reino Unido era por el dominio negativo[23] del mar, pero para que fuese efectivo, era necesario aplicar desde el primer momento una serie de medidas que suponían dedicar la totalidad de la Kriegsmarine a la guerra de corso[24]. Esto implicaba un plan de construcciones navales que les permitiese disponer de un mínimo número de unidades antes de empezar las hostilidades y contar con bases establecidas en puntos lejanos que proporcionasen apoyo logístico para el empleo de esta fuerza.

    Cabe destacar, que antes de iniciarse las hostilidades los acorazados de bolsillo alemanes Deutschland  y Graf Spee  ya se encontraban en determinados puntos del océano Atlántico, es decir, al este de  Groenlandia  el  uno  y  entre  Santa Elena y Brasil el otro, con el fin de atacar el comercio enemigo tan pronto estallase la guerra. Alemania en 1939 no tenía realmente prevista la utilización de buques  mercantes  armados  actuando como corsarios.

    Al estallar la guerra la Kriegsmarine estaba conformada por 2 cruceros de combate Scharnhorst y Gneisenau, de 26.000 toneladas, 3 acorazados de bolsillo Deutschland, Admiral Sheer y Graf Spee, de 10.000 toneladas, 3 cruceros pesados Admiral Hipper, Blücher y Prinz Eugen, 5 cruceros ligeros Königsberg, Nürnberg, Leipzig, Köln y Karlsrhue, sin contar con 26 buques mercantes dispuestos a ser armados para la guerra de corso, 50 destructores y 57 U-Boote. Una carencia significativa de la Kriegsmarine era la de Aviación Naval, pues a pesar de la insistencia del Almirante Reader, Göring había convencido a Hitler de que todo lo que volase debía estar bajo su mando y, en consecuencia, todos los hidroaviones Heinkel en los que se habían adiestrado oficiales de la Marina de Guerra alemana pasaron a depender de la Luftwaffe. Otro de los errores que se cometieron en esta guerra lo cual se puso de manifiesto posteriormente, fue la falta de aviones torpederos. Se había convencido a Hitler de que no eran necesarios y cuando se construyeron ya era demasiado tarde.

    Los alemanes tenían muy claro que su situación marítima no les favorecía para salir al Atlántico con su flota, salvo para los submarinos. Su costa no tiene acceso directo al Océano y los buques para alcanzarlo tenían que hacerlo por el controlado Canal de la Mancha o por el norte de las islas Británicas, ruta cuyos accesos son susceptibles de ser controlados al tratarse de pasos entre islas no muy distantes que permiten su vigilancia por las fuerzas navales y aéreas británicas.

    Otra de las grandes dificultades de Alemania era la división de su litoral en dos zonas que solo tienen acceso a dos mares interiores, el Mar del Norte, y el Mar Báltico, aunque el canal de Kiel permite a las unidades navales atravesar la península de Jutlandia, su paso requiere largas horas de navegación. La salida por el Mar Báltico estaba dominada por los países escandinavos, por lo que además de garantizar la neutralidad de dichos países, era imprescindible el dominio de dicho espacio ya que era la zona que disponían los alemanes para el adiestramiento de sus unidades navales. El Mar del Norte, quedaban dentro del radio de acción de los aviones enemigos.

    Por otro lado, la pequeña Armada alemana tenía que enfrentarse con la Marina de Guerra británica o Royal Navy británica, que en ese entonces era la Marina de Guerra más poderosa del mundo, cuya flota estaba conformada por 15 buques de línea, 7 portaviones, 39 cruceros, 107 destructores y 47 submarinos, a los que había que agregar 2 portaviones, 23 cruceros, 73 destructores y 10 submarinos que ya habían pasado la edad de reemplazo. Asimismo, había muchos buques menores, tales como minadores, dragaminas, logísticos y cruceros auxiliares, entre otros. Asimismo, estaban en construcción 6 acorazados de 35.000 toneladas y 6 portaviones de 20.000 toneladas. En lo que se refiere a Aviación Naval, los británicos llevaban también una ventaja considerable sobre los alemanes pues contaban con la Fleet Air Arm[25] (aviación embarcada), tanto en portaviones como en otros buques de superficie, de unos 300 aparatos entre aviones e hidroaviones. Sin embargo, se disponía de pocos aviones de caza. El conjunto de las fuerzas navales británicas era muy superior a la Kriegsmarine, pero no suficiente para las necesidades que tenía que cubrir en el Imperio Británico[26] alrededor del mundo. Además, los británicos controlaban las salidas del Mar del Norte y el Canal de la Mancha. Por ello, no resulta extraño que el Almirantazgo británico pensara que tenía todo bajo su control.

    En septiembre de 1939 Francia, aliada del Reino Unido, disponía de 7 acorazados, 2 portaaeronaves, 19 cruceros, 70 destructores y 77 submarinos, que Comandaba el Almirante Darlan, Jefe de Estado Mayor General, del que dependían directamente los Jefes de los Teatros Marítimos de Operaciones, los Comandantes de las Fuerzas Navales destacadas y los Prefectos Marítimos.

    Para los Aliados, los métodos para obtener el control del mar era el bloqueo militar a través de embarcaciones de superficie apoyadas por aviones. Los británicos controlaban las salidas del mar del Norte y el Canal de la Mancha, los tenían prácticamente bloqueados. Asimismo, los británicos tenían asignada la defensa del mar del Norte para interceptar al enemigo si intentaba salir al Atlántico y Francia la del Golfo de Vizcaya. Tan solo el Báltico escapaba al control ya que era casi imposible forzar los canales de acceso.

    Ante el panorama arriba descrito, es así como el Almirante Erich Raeder[27], Comandante de la Kriegsmarine, en la reunión del 3 de septiembre de 1939 con el Alto Mando de Guerra Naval Seekriegsleitung (Skl), concluyó con las siguientes palabras:

    "No podemos soñar con presentar batalla a la flota británica para aniquilarla. Nuestra única oportunidad reside en el ataque de las comunicaciones comerciales del enemigo, para lo cual los submarinos constituyen nuestra arma más eficaz. En consecuencia, tenemos necesidad de submarinos y más submarinos"[28]

    De igual manera, el Almirante Karl Dönitz, un firme defensor de la vigencia del submarino como arma de guerra, sostenía que, gracias a las mejoras técnicas como potencia, autonomía y comunicaciones, así como a la utilización de nuevas tácticas de combate, los submarinos seguían siendo el arma ideal para realizar ataques sorpresa contra buques enemigos y para destruir su tráfico marítimo. ​

    Cabe destacar que la realización del Plan Z comenzó el 29 de enero de 1939, con la construcción de dos acorazados de la clase H. Pero, en septiembre de ese año se paralizaron todos los trabajos como consecuencia de la guerra. En los siguientes meses, todas las naves incompletas del Plan Z se abandonaron y el material fue usado para la construcción masiva de U-Boote.

    Alemania, cuya construcción naval disponía de unas cualidades excelentes, comenzó un rearme a gran velocidad sin tener en cuenta ninguna restricción que pudiera limitar el ritmo, siendo la única vía para conseguir cierto equilibrio, es decir, la producción masiva de submarinos.

    La fuerza submarina alemana debía hundir más buques de los que los Aliados podían reemplazar, por lo que el tamaño y el número de buques hundidos era el factor más importante para determinar el éxito de los U-Boote.

    Hitler asumió personalmente el mando de las Fuerzas Armadas a través de un organismo llamado Oberkommando der Wermacht (OKW)[29], traducible al castellano como Alto Mando de las Fuerzas Armadas Wehrmacht de la Alemania nazi, que coordinaba los Estados Mayores de los tres Ejércitos. Lo que no sentó nada bien a los mandos de estos, salvo a Göring que, al poseer un gran ascendiente sobre Hitler, pensaba que su control sobre la Aviación sería absoluto, independientemente de la organización.

    Se debe destacar que el arma submarina de alemana estuvo en crisis en 1939 debido a dos incidentes que marcaron la desconfianza del OKW, en el Almirante Karl Dönitz, Comandante de la Fuerza Submarina de la Kriegsmarine.

    Dichos incidentes fueron los siguientes:

    ·      El primer buque hundido por un submarino alemán, recién declarada la guerra entre el Reino Unido y la Alemania nazi, fue el vapor de la línea Cunard, el “SS Athenia” de 13.465 toneladas, que había sido alquilado por la "Línea Anchor Donaldson” para un viaje chárter. La noche del 3 al 4 de septiembre de 1939, navegando a unas 200 millas náuticas de las costas de Irlanda el U-Boot U-30 del Tipo VIIA, al mando del Korvettenkapitän Fritz Julius Lemp, quien pensó que era un buque de guerra, lo torpedeó. El SS Athenia había embarcado el día anterior en Glasgow más de 1.400 pasajeros y tripulantes con destino a Estados Unidos, muriendo 112 pasajeros entre ellos 28 estadounidenses. Tal acción hizo recordar el caso del transatlántico "SS Lusitania" cuando el 7 de mayo de 1915 regresaba de Nueva York a Liverpool y el impacto de un torpedo del submarino alemán U-20 puso fin a la singladura muy cerca de las costas irlandesas, ocasionando el hundimiento de este buuqe y la muerte de 112 pasajeros (84 británicos y 28 estadounidenses) y la pérdida de 13.465 toneladas. La magnitud de la tragedia conmocionó enormemente el Reino Unido y a los Estados Unidos, de donde procedía la mayoría de los pasajeros fallecidos. Aquella fue la primera ocasión en la que se habló de "crimen de guerra" y fue un acontecimiento determinante para que Estados Unidos decidiera participar en la Primera Guerra Mundial. Hitler después del hundimiento del SS Athenia cursó una orden mediante la cual se prohibía, que bajo cualquier circunstancia se atacara a buques de pasajeros.  Como represalia por el hundimiento del SS Athenia, al día siguiente, el 4 de Septiembre de 1939, un total de 29 bombarderos de la Fuerza Aérea Real Británica (Royal Air Force o RAF) realizaron el primer ataque aéreo del conflicto sobre Alemania atacando la base naval de Wilhelmshaven. Sin embargo, el almirante Erich Raeder que había previsto el movimiento, retiró a sus buques con horas de antelación hacia la seguridad del Mar Báltico y tendió una emboscada a los aviones británicos con las piezas de artillería antiaérea del puerto que derribaron un total de 7 aparatos.

    ·      El 14 de septiembre de 1939, solo 27 días después de que comenzara su primera patrulla, el U-39 del Tipo IXA, al mando del Korvettenkapitän Gerhard Glattes, intentó hundir el portaaviones británico HMS Ark Royal, al Oeste de las Islas Hébridas[30], disparándole dos torpedos, pero debido a un defecto técnico explotaron antes de alcanzar su objetivo. El U-39 fue inmediatamente perseguido por tres destructores británicos HMS Faulknor, HMS Foxhound y HMS Lung que eran escolta del portaaviones y se vio obligado a sumergirse a 100 metros (328 pies) para escapar del ataque. Posteriormente, fue localizado por los citados destructores, que fueron en su caza, lanzándole cargas de profundidad y obligando al submarino a emerger. Toda la tripulación del submarino fue capturada durante la evacuación. El U-39 fue el primer submarino alemán hundido en la Segunda Guerra Mundial. El Almirante Karl Dönitz presentó la dimisión a su cargo, pero le fue rechazada. Como curiosidad, indicamos que el Alto Mando de Guerra Naval Seekriegsleitung (Skl), la máxima estructura de mando de la Armada alemana Kriegsmarine, se enteró del hundimiento del U-39, cuando logró interceptar una comunicación británica advirtiendo de la llegada a Inglaterra de prisioneros alemanes procedentes del U-39.

    No obstante, ocurrieron dos eventos con los cuales Adolf Hitler dio su total respaldo al arma submarina y al Almirante Karl Dönitz, lo que conllevó al cambio en las operaciones navales. Ellos fueron:

    ·      El 17 de septiembre de 1939, el portaviones HMS Courageous de 22.500 toneladas partió a una misión de patrullaje hacia las costas al suroeste de Irlanda. Al anochecer de ese día, el HMS Courageous detectó la presencia del U-29 del Tipo VIIA, al mando del Kapitänleutnant Otto Schuhart, pero ya era demasiado tarde para escapar. El U-29 a las 19:40 horas disparó dos torpedos contra el HMS Courageous, alcanzando la banda de babor del portaviones, justo bajo el puente de mando. Las detonaciones y la posterior inundación tuvieron las siguientes consecuencias: La destrucción del generador de potencia, matando a todos los tripulantes que estaban en esta zona, dejó sin electricidad la nave y la misma se escoró 20 grados a babor.  Pasados diez minutos, la escora ya rozaba los 45 grados, el Capitán Makeig-Jones Comandante del HMS Courageous a regañadientes, reconocería que ya se había hecho todo lo posible para salvar el portaaviones. Solo 19 minutos después del ataque, el HMS Courageous tenía hundida la proa y estaba a punto de ser engullido por el mar. De una tripulación de 1.216 hombres solo sobrevivieron 518. El portaviones HMS se convirtió en el primer buque de guerra británico en ser hundido durante el conflicto y el primer portaaviones en ser hundido en una guerra.

    ·      El 13 de octubre de 1939 el U-47 al mando del Korvettenkapitän Günther Prien penetró sigilosamente en la Base Naval inglesa de Scapa Flow, en las Islas Orcadas (Escocia), en el marco de la Operación Baldur, disparando una salva de torpedos G7e T2 de propulsión eléctrica, de los cuales uno impactó en el HMS Royal Oak, un buque de guerra británico de unas 30.000 toneladas. Incapaces de concebir un ataque enemigo a la base, y creyendo que se trataba de una explosión interna, los británicos no dieron muestras de sorpresa a pesar de escuchar las explosiones. Prien, ordenó disparar tres torpedos más que impactaron de lleno en el Royal Oak, que pocos minutos después del ataque se hundió con toda su tripulación, incluido el Contralmirante H. E. C. Blagrove. De los 1.253 tripulantes, fallecieron 833 y sobrevivieron 420. En el mismo ataque, Prien logró también averiar al HMS Pegasus, un buque auxiliar de hidroaviones de 6.900 toneladas.

    En los 6 años siguientes la Kriegsmarine desarrolló la flota de submarinos más grande de la Segunda Guerra Mundial, construyendo 1.099 unidades, que fueron una amenaza constante para los Aliados en todo el transcurso de la guerra.

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    Capítulo III: La Batalla del Atlántico (Primera Fase Septiembre 1939 a Diciembre 1941).

     

    Entendemos por Batalla del Atlántico al conjunto de operaciones submarinas y antisubmarinas relacionadas con el tráfico marítimo en el océano Atlántico durante la Segunda Guerra Mundial, en las que los ataques de los U-Boote, así como las medidas antisubmarinas de los Aliados, imprimieron una dinámica terrorífica e implicó el enfrentamiento marítimo más complejo y sangriento protagonizado por las superpotencias en la Historia Naval.

    Se destaca el esfuerzo de los beligerantes en cuanto a la construcción de los U-Boote por parte de Alemania, que alcanzó la cifra unos 1.099 durante toda la guerra, así como la construcción de destructores, corbetas, patrulleros antisubmarinos y aviación de patrulla marítima por pate de los Aliados.

    Alemania estuvo a punto conseguir el colapso de Inglaterra ante las fuertes pérdidas de buques mercantes que proporcionaban su logística de supervivencia. La entrada de Estados Unidos en el conflicto evitó la derrota británica gracias al extraordinario esfuerzo de construcción masiva de buques mercantes clase Liberty y Victory, cuyas pérdidas fueron inferiores al ritmo de construcción. Esto unido a los avances tecnológicos antisubmarinos de los Aliados, que consiguieron nuevos sensores, como el sonar[31] y el radar[32], unido a la exploración aérea, fueron las principales causas de la capitulación germana.

    La Batalla del Atlántico se divide en tres fases:

    ·         Primera fase: desde el comienzo de la Segunda Guerra Mundial hasta la entrada de Estados Unidos en la guerra en 11 de diciembre de 1941. La lucha se desarrolló entre Alemania y el Reino Unido.

     

    ·         Segunda fase: desde la entrada de Estados Unidos en la guerra diciembre de 1941 hasta junio de 1943. Predominio germano.

     

    ·         Tercera fase: desde junio de 1943 hasta la finalización de la guerra en mayo de 1945. Manifiesta superioridad aliada.

    a.  Inicios de Septiembre 1939 a Marzo de 1940.

    Desde la perspectiva alemana y conscientes de que la Kriegsmarine no podía derrotar a la Marina Real Británica, el primer objetivo de los alemanes era atacar la base industrial y logística del Imperio Británico, a fin de vencer su resistencia. Para ello debería bloquear al Reino Unido cortando las líneas marítimas de comunicación con América y sus colonias, atacando los buques mercantes que trasladaban suministros de guerra y alimentos para la supervivencia.

    Dada la ausencia de una poderosa flota de superficie alemana, los U-Boote iban a ser la espina dorsal de la guerra en el Atlántico desde el mismo comienzo del conflicto. El Alto Mando de Guerra Naval Seekriegsleitung (Skl), estimaba que para derrotar al Reino Unido era necesario hundir una media de 700.000 toneladas mensuales de buques mercantes aliados durante un lapso de doce meses.

    Alemania al inicio de la guerra tenía una fuerza submarina de tan solo 57 U-Boote, de los cuales, 30 eran del Tipo II, 18 del Tipo VII y 9 del Tipo IX. Los U-Boote Tipo II, motivado a sus limitadas características, no podían operar en el Atlántico, por lo que su campo de operaciones estaba reducido al Mar del Norte[33], dedicándose una gran parte de ellos al adiestramiento de las tripulaciones de submarinos del tipo más avanzado.

    La idea del Almirante Dönitz, Comandante de la Flota Submarina, para asfixiar a las islas británicas, era mantener simultáneamente en el Atlántico Norte al menos 90 submarinos, pero eso requería un mínimo de 300 operativos, lo que exigía la construcción de 675 submarinos a un ritmo de 30 al mes. Esta propuesta encontró enseguida la oposición de Hermann Göring[34], quien priorizaba la construcción de los bombarderos Stukas y los aviones polivalentes Junkers 88, pues sostenía la eficacia de la Luftwaffe en un apoyo directo al avance de la Wehrmacht. Naturalmente los miembros del Oberkommando der Wermacht (OKW) dieron su respaldo a Göring, quedando limitado el plan de construcción de submarinos a 372 unidades que deberían estar construidas el 1º de julio de 1942, a razón de cuatro unidades al mes en 1940 y diez en 1941.

    Por otro lado, el Almirantazgo[35] británico, desde el principio de las hostilidades en septiembre de 1939, asumió el control del tráfico marítimo para los tres mil buques mercantes con que contaba el Reino Unido y planificó la formación de convoyes en las rutas de navegación, basándose en las experiencias de la Primera Guerra Mundial o Gran Guerra. Ello obligó a agilizar la construcción de buques escoltas[36] y a la preparación para la guerra antisubmarina utilizando el nuevo equipo de detección submarina por ondas ultra sonoras denominado ASDIC[37].  Igualmente, los británicos se obligaron a limitar la derrota[38] de los convoyes a dos grandes rutas, una de ellas de la costa occidental inglesa hasta Canadá, con derivaciones a Estados Unidos, Panamá y Argentina, y la otra por el Cabo de Buena Esperanza en África del Sur hacia el Oriente Próximo y Lejano Oriente. El Mediterráneo solo se utilizaba para excepcionales convoyes militares.

    La guerra submarina se inició el 4 de septiembre de 1939, con el hundimiento del SS Athenia. Como consecuencia de este evento, los Comandantes de los U-Boote recibieron órdenes de cumplir las normas del Derecho Marítimo Internacional y se ordenó respetar la prohibición de atacar a los buques de pasajeros, aunque fuesen con escolta.

    El 7 de septiembre de 1939 se ampliaron las restricciones de ataque a los buques franceses y se restringió también minar sus aguas, esto con el fin de evitar que Francia entrara en la guerra. Esto supuso la protesta del Gran Almirante de la Kriegsmarine Erich Johann Albert Raeder a Hitler. También Raeder solicitó ayuda de la Luftwaffe para localizar a los buques mercantes enemigos e indicar su posición a los submarinos y lo único que consiguió fue una mejora en el ritmo de construcción de los U-Boote.

    Al principio gran parte del tránsito los buques mercantes navegaban en conserva[39] y sin escolta.

    El día 7 de septiembre de 1939 se inició el tránsito por derrotas trasatlánticas desde Londres y Liverpool.

    El 14 de septiembre de 1939 el U-Boot U-39 torpedeó al portaviones HMS Ark Royal al Oeste de las Hébridas sin éxito, resultando hundido dicho U-Boot. Ese mismo día, partía el primer convoy de Freetown[40] (Sierra Leona) para Inglaterra y otro desde Halifax en Canadá con el mismo destino. Como no se contaba con suficientes buques escoltas para garantizar la protección de los convoyes durante todo su recorrido, en aquellos que partían de Liverpool hacia Halifax, los escoltas llegaban hasta las 200 millas de Islandia y a partir de este punto daban protección a un convoy de regreso a Inglaterra, que se hacía coincidir para aprovechar el retorno de los escoltas.

    El 17 de septiembre de 1939, los británicos sufrieron un fuerte revés al ser hundido el portaviones HMS Courageous por el U-29 a 200 millas al suroeste de Irlanda. Los destructores británicos persiguieron al U-Boot durante cuatro horas, hasta que se quedaron sin cargas de profundidad, escapando el U-29 con daños menores.

    Debido a la falta de la aviación naval costera en los primeros tiempos de la guerra, la Marina británica había optado por proteger los Accesos Occidentales (Western Aproches) con los portaviones HMS Corageous y HMS Ark Royal, protegidos por destructores antisubmarinos dotados de ASDIC. Este riesgo se asumió con la idea de emprender la ofensiva contra los U-Boote, pues todavía eran muchos los antiguos mandos de la Royal Navy que creían que era preferible buscar a los submarinos enemigos en sus zonas de ataque que dedicar la fuerza antisubmarina a la escolta de convoyes. Evidentemente la guerra demostró que estaban equivocados y tan solo cuando los convoyes navegaron bien protegidos y la escolta de convoyes fue suficiente, se pudieron dedicar fuerzas a buscar a los submarinos en los espacios oceánicos, no antes.

    Hacia fines de septiembre de 1939, el Oberkommando der Wermacht (OKW) autorizó la "incautación o hundimiento sin excepción" de los buques mercantes que intentaran pedir ayuda por radio cuando se les ordenara detenerse. Una semana después, los U-Boote recibieron la orden de hundirse sin previo aviso a cualquier buque que navegara sin luces, y los comandantes recibieron instrucciones de ingresar una nota en el diario de navegación que indicara que el hundimiento se debió "a una posible confusión con un buque de guerra o crucero auxiliar".

    Por otra parte, los acorazados de bolsillo Deutchsland y Graf Spee comenzaron a atacar al tráfico aliado a partir del 26 de septiembre de ese año.

    El día 13 de octubre de 1939, el U-47 al mando del Korvettenkapitän Günther Prien penetró sigilosamente en la Base Naval inglesa de Scapa Flow, en las Islas Orcadas (Escocia), en el marco de la Operación Baldur, disparando una salva de torpedos, de los cuales uno impactó en el HMS Royal Oak, un buque de guerra británico de unas 30.000 toneladas. Con el mismo murieron más de 800 hombres. Hitler, sorprendido por la eficacia del Arma Submarina, decidió acceder a las peticiones del Gran Almirante Erich Reader Comandante de la Kriegsmarine y autorizó la guerra sin restricciones contra el tráfico marítimo aliado

    En esta primera etapa de la Batalla Naval del Atlántico, los U-Boote generalmente operaban individualmente y fueron muy exitosos en la destrucción de la navegación aliada debido a la gran brecha en la cobertura aérea del Atlántico medio. Estas rutas de navegación eran vitales para el consumo y la industria de los británicos al comienzo de la guerra, así como para trasladar a Europa el armamento y los pertrechos estadounidenses meses después.

    Se debe resaltar que los U-Boote estaban severamente limitados en cuanto a la velocidad y el alcance ya que debían pasar la mayor parte del tiempo en la superficie funcionando con motores diésel o sumergidos funcionaban con la energía de las baterías, solo cuando eran atacados o para los escasos ataques de torpedos durante el día. Los U-Boote sumergidos únicamente podía detectar al enemigo a través del sonar pasivo o hidrófono[41], denominado por los alemanes Grupennhorchgërate y abreviado GHG, lo que provocaba que el submarino estuviese casi ciego. Además, sumergidos sólo podían navegar a 8 ó 9 nudos como máximo.

    El ataque de los U-Boote más común durante los primeros años de la guerra se llevó a cabo en la superficie y de noche. Este período, antes que las fuerzas aliadas desarrollaran tácticas de guerra antisubmarinas verdaderamente efectivas, que incluían convoyes escoltados, fue denominado por los submarinistas alemanes como "Die glückliche Zeit" (en castellano: Temporada afortunada o Días Felices).

    Desde el principio de la guerra el bloqueo marítimo[42] ejercido por los Aliados contra Alemania fue muy estrecho y eficaz, lo que obligó a los alemanes a aprovisionarse por tierra a través de los Balcanes y por la frontera con Italia. Asimismo, los cargamentos dirigidos a Alemania en buques neutrales se impedían mediante la interceptación de los buques en mar abierto y enviándolos a las bases más próximas, que se habían establecido, para llevar a cabo el control tanto en las Orcadas, Isla de Malta, Haifa (Gobierno británico de Palestina), Adén (Colonia británica en la península arábiga), Gibraltar (Colonia británica en la entrada del Mediterráneo) y otros puertos, lo que hizo que fueran muchas las protestas de los países que abanderaban a los citados buques.

    El Reino Unido comenzó a atacar los U-Boote en la medida en la que se lo permitían los aviones del Coastal Command[43], de limitado radio de acción en los comienzos de la guerra. De igual manera, los británicos habían fondeado en el Canal de la Mancha más de 3.000 minas en barreras sucesivas que causó la destrucción de 3 U-Boote, lo que conllevó que Alemania desistiera de navegar por dicho canal.

    Desde octubre de 1939 los alemanes tuvieron nuevas innovaciones como la implantación de minas submarinas que discretamente los destructores, dragaminas, torpederos e hidroaviones de la Kriegsmarine dejaban caer en varios puntos claves del Mar del Norte.

    Ante esta situación, los Estados Unidos declararon una zona neutral, que se extendía desde las costas americanas hasta 300 millas hacia afuera, la cual sería patrullada por buques de vigilancia estadounidenses. Para la efectividad de dicha zona, establecida en la Declaración de Panamá[44] de la Primera Reunión de Consulta de Ministros de Asuntos Exteriores de fecha 3 de octubre de 1939, los Estados Unidos ayudaban a los convoyes que partiendo de Terranova se dirigían a las costas británicas. Hitler, que quería evitar la guerra con los Estados Unidos, había ordenado que los U-Boote no atacaran en la mencionada zona, que cubría gran parte de las derrotas de los convoyes que se aproximaban a Inglaterra.

    Un nuevo evento alteró la tranquilidad de los países Aliados en el norte de Europa cuando el 30 de noviembre de 1939 los rusos invadieron al Finlandia en lo que se denominó la Guerra de Invierno[45].

    Fue entonces cuando los Aliados se plantearon apoyar a este pequeño país, aunque ello podría arrastrar a la guerra a los países escandinavos. Ante este escenario, el Reino Unido a principios de 1940 propuso la ocupación de Noruega, que era un país neutral pero un territorio clave para Alemania, ya que el hierro con el que se fabricaban las armas alemanas procedía esencialmente del yacimiento sueco de Kiruna y desde allí se transportaba por ferrocarril al puerto noruego de Narvik, en el norte del país, desde donde buques costeros llevaban el mineral a Alemania. No obstante, era necesario buscar un argumento razonable para desembarcar tropas aliadas en Noruega que impidiesen que el flujo de hierro llegase a Alemania. La excusa para preparar la ocupación de Noruega fue una operación de ayuda de los Aliados a Finlandia, acosada entonces por el Ejército Rojo. Las tropas encargadas de esa operación desembarcarían en territorio noruego, y mantendrían instalaciones y reservas allí, precisamente en Narvik. Sin embargo, Finlandia capituló ante los soviéticos el 12 de marzo de 1940, mucho antes de que la fuerza aliada estuviese preparada.

    Uno de los sucesos más memorables de los inicios de la Batalla del Atlántico ocurrió a finales del año 1939 cuando el acorazado alemán Graf Spee fue enviado al Atlántico Sur en las semanas previas al estallido de la Segunda Guerra Mundial para poder interceptar las líneas de los buques mercantes cuando estallara el conflicto. A partir de septiembre de 1939 y en dos meses y medio, el acorazado alemán había hundido 9 buques mercantes que totalizaban 50.089 toneladas. Sin embargo, el 13 de diciembre se enfrentó a 3 cruceros británicos en lo que se denominó la Batalla del Río de la Plata, un duelo que terminó con el crucero pesado británico HMS Exeter fuera de combate y con el Graf Spee refugiándose en el puerto de Montevideo, capital de la neutral Uruguay. Las reparaciones que necesitaba el buque llevarían un par de semanas, pero los servicios británicos de inteligencia se pusieron en marcha para convencer al Comandante del acorazado, Kapitän Hans Langsdorff, que estaba rodeado por numerosas fuerzas enemigas las cuales se estaban concentrando para acabar con su nave si intentaba salir del puerto de la capital uruguaya. Para ello el Almirantazgo británico emitió una serie de mensajes en radiofrecuencias que sabían que serían interceptadas por la inteligencia alemana. Convencido por falsos informes, Langsdorff no estaba dispuesto a arriesgar la vida de su tripulación y optó por hundir el Admiral Graf Spee el 17 de diciembre de 1939. 

    En los últimos meses de 1939, el esfuerzo principal de los U-Boote se concentró en una campaña de lanzamiento de minas utilizando tanto las de contacto como un nuevo tipo de mina magnética, siendo estas últimas difíciles de dragar. El total de pérdidas mensuales de tonelaje de buques Aliados debido a las minas era de unas 100.000 toneladas, superando la media conseguida por el ataque de torpedos con los U-Boote. Las pérdidas producidas por las minas se redujeron a principios de 1940 como consecuencia de nuevos métodos más perfeccionados de barrer las minas magnéticas y el “desmagnetizado” de muchos buques mercantes, proceso en el cual se invertía el campo magnético del buque para protegerlo contra el efecto de las citadas minas.

    En términos generales, durante los primeros meses de guerra los Aliados entre septiembre y diciembre de 1939 se perdieron por el impacto de los U-Boote 165 buques mercantes a un promedio de algo más de 150.000 toneladas mensuales, totalizando ese año unas 600.000 toneladas.

    La pérdida de buques mercantes para los Aliados generó un impacto muy negativo sobre la economía de los británicos, que obligó al Gobierno del Primer Ministro Neville Chamberlain a reducir las raciones de alimentos y materias primas, causando hambre y miseria entre la población civil.

    Por otro lado, los U-Boote perdidos entre septiembre y diciembre de 1939 fueron 9 unidades.

    La construcción de nuevos U-Boote se entregaban a un ritmo lento, pues Hitler no había dado a estas partidas la elevada prioridad, por lo que los 11 construidos en este período no superaban las pérdidas y aunque los británicos desconocían el ritmo de construcción, la realidad era que los hundimientos de U-Boote en esta época superaban a la entrega de nuevas unidades.

    Se debe subrayar que, al estallar las hostilidades, los alemanes utilizaban dos tipos de torpedos: el llamado Torpedo Tipo G7a T1[46] impulsado por aire comprimido y que se utilizó principalmente para grandes alcances y en ataques nocturnos y el Torpedo Tipo G7e T2[47] impulsado electrónicamente, que no dejaba estela. Al principio, ambos torpedos estaban dotados con una espoleta de proximidad magnética preparada para que su cabeza de combate explotase en las inmediaciones de la quilla del blanco. Sin embargo, este detonador no resultó eficaz en plena acción, por lo que se reemplazó por otro de contacto. No fue hasta 1942 cuando se consiguió tener disponibilidades cuantiosas de un detonador magnético eficaz, el “Pi2”.

    b.  Inicios de 1940 a mediados de 1940.

    Después de la capitulación de Finlandia en marzo de 1940, Alemania preparó una rápida ocupación de Noruega con el empleo de pocas tropas. El resultado del trabajo del OKW fue la Operación Wesserübung[48] (en castellano “Ejercicio en el Wesser”), uno de los primeros ejemplos de operación verdaderamente conjunta con participación del Ejército, Luftwaffe y la Kriegsmarine.

    La invasión de Noruega por las tropas alemanas estaba basada en una ocupación simultánea de Dinamarca y los campos de aviación de Oslo, Arendal, Kristiansand, Egersund, Bergen, Trondheim y Narvik. Para el traslado de las fuerzas ocupantes se utilizaron los buques más rápidos de la Kriegsmarine, aun cuando la garantía del resto del territorio quedaba supeditada a la rapidez de la maniobra de ocupación.

    Es así como el 9 de abril de 1940, paracaidistas alemanes saltaron y ocuparon aeródromos y puentes en Dinamarca que aseguraban las pistas de aterrizaje para la invasión de Noruega. Simultáneamente se produjeron varios desembarcos con medios navales ocupando los principales puertos daneses, mientras que una fuerza terrestre compuesta de una División de Infantería y dos Brigadas Motorizadas penetraba por la frontera sur del país sin encontrar resistencia. Dinamarca capituló en cuatro horas.

    Ese mismo día 9 de abril, buques de guerra alemanes desembarcaban tropas terrestres en Narvik, Trondheim, Oslo y en los puertos de Bergen Kristiansand y Egersund. Paracaidistas alemanes saltaron en Stavanger, para ocupar el aeródromo de Sola, y Oslo, para tomar el aeródromo de Fornebu. Al mismo tiempo, la Luftwaffe bombardeaba las fortalezas costeras que protegían los fiordos, y a las unidades noruegas que intentaron resistir. No obstante, la operación tuvo contratiempos ya que el crucero alemán pesado Blücher, el cual transportaba más de mil hombres destinados a ocupar Oslo, fue hundido en el fiordo por la Artillería de Costa noruega, entre otros reveses, que no impidieron el éxito de la operación.

    La conquista de Noruega fue un éxito estratégico importantísimo para Alemania ya que obtuvieron una importante red de bases navales a lo largo de la costa noruega, multiplicando las bases aéreas a lo largo del litoral. Ahora las bases navales de la Flota británica de las Orcadas y de Escocia estaban mucho más expuestas a los ataques de la aviación alemana basada en Noruega. Además, los alemanes controlaban los accesos al Báltico y disponían de buenos puntos de partida para atacar los convoyes que atravesaban el Atlántico y los que más adelante se establecerían para el apoyo a Rusia.

    Uno de los puntos importantes de esta operación fue que la Kriegsmarine pudo disponer de los fiordos de la costa noruega como base para sus submarinos con el fin de mejorar su capacidad de impedir un bloqueo naval como el que había experimentado la Alemania Imperial en la Primera Guerra Mundial cuando el Mar del Norte había estado vedado al tráfico marítimo alemán, asfixiando a su economía. De igual manera, esta operación demostró claramente la potencial y decisiva influencia de la Luftwaffe en el combate terrestre ya que para poder llevar a cabo la misma fue necesaria la superioridad aérea y los británicos no disponían de ella.

    El 10 de mayo de 1940, los alemanes invadieron Holanda, Bélgica y Luxemburgo sin previa declaración de guerra. Los Aliados enviaron tropas a Bélgica, pero el avance alemán fue arrollador. Una serie de contraataques aliados no logró cortar el avance alemán que llegó a la costa el 20 de mayo, separando a la Fuerza Expedicionaria Británica (BEF) cerca de Armentières, al Primer Ejército francés y al Ejército belga. Rodeados por el demoledor avance nazi más de 330.000 tropas francesas y británicas fueron evacuadas entre el 29 de mayo y el 4 de junio de 1940 de las playas cercanas a Dunkerque a través del Canal de la Mancha hacia Gran Bretaña mediante la Operación Dinamo[49], en una retirada que marcó el devenir de la Segunda Guerra Mundial.

    El 10 de junio de 1940 Italia entró en la guerra tras su alianza con Alemania en un acuerdo político-militar, conocido como Pacto de Acero[50], el cual fue firmado el 22 de mayo de 1939 en Berlín.

    El 14 de junio de 1940, como consecuencia de la ineficacia del ejército francés, unida a la dramática evacuación del ejército británico en Dunkerque, las tropas de Alemania entraban a París a pocos días de iniciada la “Batalla de Francia”, bajo la Guerra Relámpago o Blitzkrieg[51], lo que precipitó la posterior firma del armisticio con Francia el 22 de junio de 1940. Como parte del referido acuerdo de armisticio, Alemania ocupó el norte de Francia en toda su costa atlántica hasta la frontera con España. Igualmente, se estableció un nuevo gobierno francés en la ciudad de Vichy, que se encontraba en la parte no ocupada del sur de Francia. El gobierno de Vichy, al mando del mariscal Henri Petain, declaró la neutralidad en la guerra entre Alemania y el Reino Unido, pero en virtud de las disposiciones del armisticio, estaba obligado a cooperar con Alemania.

    Es así como Alemania tenía al continente europeo bajo control y la única potencia que se le resistía era el Reino Unido.

    A partir de mediados del mes de junio de 1940, Alemania estaba en posesión de toda la costa desde el Cabo Norte[52] en Noruega hasta la desembocadura del rio Bidasoa[53] al norte de España, teniendo una situación estratégica mucho más ventajosa por cuanto disponían de puertos desde donde podían actuar sus unidades navales pesadas y los U-Boote. Estos últimos se instalaron en los puertos de Burdeos, Lorient y Saint Nazaire. Igualmente, los buques mercantes alemanes denominados corsarios[54], tanto en su modalidad de mercantes disfrazados como de grandes buques de guerra, podían disponer de bases tanto en Noruega como en el litoral francés. A partir de entonces sería mucho más fácil para los alemanes el ataque a las comunicaciones marítimas de los Aliados.

    Se debe destacar que fueron 9 los buques mercantes alemanes transformados en cruceros auxiliares disfrazados. Su armamento promedio era de seis cañones de 152 mm, un número variable de ametralladoras de 37 mm, cuatro tubos lanzatorpedos de 533 mm y un hidroavión para reconocimiento, además de varias minas para fondearlas en puntos estratégicos. Estos buques llegaron a permanecer en la mar durante períodos superiores a un año, siempre preparados para cambiar de disfraz, ya que modificaban su silueta quitando o poniendo chimeneas falsas, alterando las superestructuras y cambiando el color de las pinturas. Operaban en zonas muy extensas, a criterio del Comandante, sin apenas recibir órdenes.

    Los cruceros auxiliares disfrazados hundieron un total de 127 buques para 888.000 toneladas, que fue superior a lo echado a pique por los grandes buques de guerra de la Kriegsmarine que habían hundido 59 buques con 332.000 toneladas. Si sumamos estas cantidades resulta un total de 186 hundimientos con un total de 1.220.000 toneladas, cifra que solo supone un 5 % del tonelaje total aliado hundido en la guerra. Sin embargo, no debe medirse el resultado en términos absolutos, sino por los efectos que ocasionó al enemigo, que tuvo que distraer de otras operaciones un gran número de unidades pesadas, que hubieran hecho mucho daño en otras misiones. Con esta mentalidad debe entenderse la guerra de corso

    Por otro lado, para los primeros meses de 1940 se incrementó el número de U-Boote disponibles en la Fuerza Submarina de la Kriegsmarine que permitió mejorar la estrategia de ataque contra los mercantes británicos creando las denominadas “Manadas de Lobos” que contemplaba el ataque nocturno de convoyes desde una posición casi a flote, utilizando luego su gran velocidad en navegación de superficie para escapar. Por la noche, medio hundido en la superficie, un U-Boot era difícil de ver, como también de detectar por el ASDIC.

    Asimismo, se dio un paso importante en la guerra submarina como consecuencia de la toma de Noruega y Francia, donde se construyeron bases acorazadas, denominados búnkeres, lo cual dio una mayor autonomía a los U-Boote.

    Ante la ocupación alemana de la costa francesa durante el mes de junio de 1940, para los Aliados era urgente reorganizar el sistema de convoyes para que los buques procedentes del Atlántico pudiesen llegar a sus destinos. De este modo, aumentó considerablemente la importancia de los puertos del Clyde[55] y el Mersey[56] en la costa oeste de la Gran Bretaña.

    Entre el 12 y el 17 de junio de 1940 operó al sur de Irlanda la primera Manada de Lobos denominada “Prien” al mando del Korvettenkapitän Günther Prien con 7 U-Boote hundiendo 5 buques mercantes con un total de 40.494 toneladas.

    La campaña submarina durante la primera parte de la guerra se desarrolló de forma parecida a lo que ocurrió en la Primera Guerra Mundial, en la que los submarinos tenían que salir al Atlántico adyacentes a las costas noruegas para esquivar el bloqueo del mar del Norte. Asimismo, desde el principio.

    Al principio de la guerra, los buques mercantes navegaron en convoy y se agrupaban por similitud de características. Asimismo, la protección quedaba limitada a las proximidades de las islas británicas. Sin embargo, no había suficientes buques para escolta y la coordinación de estas era mínima. A menudo, antes de encontrarse en el océano, los buques de escolta ni siquiera se habían comunicado entre sí, y mucho menos se habían entrenado juntos.

    Entre enero y junio de 1940 se perdieron 16 U-Boote. A su vez los Aliados perdieron en ese lapso 232 buques mercantes. Se debe resaltar que el mes de junio de 1940, en el que se retiraron los buques escoltas para hacer frente a la posible invasión de Alemania a Gran Bretaña, los U-Boote impactaron 66 buques mercantes de los Aliados, siendo el peor mes para los Aliados desde el comienzo de la guerra a efectos de pérdidas en tonelaje.

     

     

    c.   La Operación León Marino y la Batalla de Inglaterra (Mediados de 1940 a finales de 1941).

    Una vez derrotada Francia, Alemania controlaban casi toda Europa y solo faltaba por caer Reino Unido.

    Para Adolf Hitler la total derrota de los cuerpos expedicionarios anglo-franceses en Europa, la política de neutralidad de Estados Unidos y el ya muy deteriorado ejército Soviético iban a obligar a los británicos a buscar una paz con Alemania. Por tal motivo, en repetidas ocasiones Adolf Hitler hizo proposiciones de paz a los británicos encabezados por Winston Churchill, pero estas siempre fueron rechazadas de plano.

    Para fines de junio de 1940 y ante la negativa británica a las proposiciones de paz, Alemania planificó la invasión de Gran Bretaña, designando a esta operación con el código de Unternehmen Seelöwe[57] (en castellano Operación León Marino). El Mariscal del Reich Hermann Göring prometió a Hitler una aplastante victoria en contra de la Fuerza Aérea Real Británica (Royal Air Force o RAF), para aquellos momentos la Luftwaffe sólo había conocido victorias y tenía una ventaja numérica abrumadora.

    La citada invasión nunca llegó a ejecutarse, si bien sus preparativos fueron muy intensos y la amenaza de invasión se mantuvo durante bastante tiempo, primero para mantener una presión psicológica sobre el pueblo y el gobierno británicos, y posteriormente para encubrir los planes alemanes de ataque contra la Unión Soviética.

    Como parte de la Operación León Marino, a principios del mes de julio de 1940 se inició lo que se denominó La Batalla de Inglaterra[58], cuando la Luftwaffe se dedicó a atacar convoyes británicos en el canal de la Mancha, así como instalaciones industriales cerca de Londres, aeródromos militares y estaciones de radar, sin atacar a la población civil. A pesar de la supuesta superioridad numérica de la aviación alemana, el Reino Unido contaba con la tecnología del radar, lo que le permitía una mayor rapidez de acción para detectar a los aviones enemigos y concentrar sus cazas allí donde más se necesitaban. También se fabricaron en masa los míticos cazas británicos Hurricane y Supermarine Spitfire, que marcarían un antes y un después en la historia de la aviación.

    El mes de julio fue parecido, aunque las pérdidas disminuyeron algo. Durante el mes de agosto, las pérdidas de tonelaje hundido fueron elevadas, pero se notó mejoría a medida que se incorporaron los escoltas que esperaban la invasión, que ahora parecía más alejada.

    El 15 agosto de 1940, Göring decidió cambiar de táctica y combatir directamente en suelo británico, en lo que se denominó Unternehmen Adlerangriff[59] (en castellano Operación Ataque de Águila). En este episodio de la Batalla de Inglaterra, la Luftwaffe contaba con más de 1.000 bombardeos y unos 700 cazas para la operación. Por otro lado, los británicos contaban con superioridad en el aire, no en número sino en rapidez de acción, gracias a la utilización del radar y en combinación con los puestos de observación visual apostados en la costa. El radar supuso una notable ventaja táctica para la Real Fuerza Aérea británica (RAF, por sus siglas en inglés), pues permitía detectar a la aviación enemiga para así coordinar y enviar los cazas en el momento y número preciso para combatir las incursiones alemanas. También, la producción masiva del caza británico Supermarine Spitfire dio esperanza a la RAF, aunque tras la primera jornada de ataques alemanes, se vio seriamente afectada y hacía cada vez más probable una invasión alemana.

    El 17 de agosto de 1940, Hitler declaró formalmente un bloqueo total de las Islas Británicas, el cual contemplaba hundir por los U-Boote y con independencia de la nacionalidad, a cualquier buque neutral que navegase dentro de una zona que comprendía el canal de la Mancha y el Mar del Norte, que se extendía hasta 300 millas al oeste de Gran Bretaña e Irlanda.

    La operación "Ataque del Águila" continuaba su curso con excelentes resultados para Alemania hasta que el 24 de agosto de 1940 el puerto de Londres fue bombardeado, según los alemanes por error. Hitler había dejado claro a la Luftwaffe que Londres sólo debía de ser bombardeada si él daba su permiso para ello. Aquella fue la primera vez que se atacaba a una población civil británica desde el aire. En respuesta al bombardeo, los británicos realizaron los días siguientes ataques aéreos sobre Berlín y otras ciudades de Alemania, lo cual incentivó el espíritu de resistencia y elevó la moral de los británicos.  Hitler, herido en su orgullo, ordenó a la Luftwaffe abandonar la estrategia de bombardeos a aeródromos británicos para concentrarse en las ciudades, principalmente sobre Londres. Fue entonces cuando empezó el bombardeo sostenido de la aviación alemana sobre objetivos industriales y centros civiles, que tuvo lugar entre el 7 de septiembre de 1940 y el 16 de mayo de 1941, y cuyo objetivo fue aterrorizar a la población civil.

    Entre septiembre y noviembre de 1940 la ciudad de Londres fue diariamente bombardeada por aviones alemanes, de día y de noche. Aunque este cambio de táctica en la guerra aérea implicaba casi la destrucción total de Londres, el Primer Ministro Churchill estaba dispuesto a afrontar el sacrificio a cambio que la RAF tuviera el tiempo necesario para rearmarse. Este objetivo se consiguió y los británicos superaron a los alemanes en producción de aviones, si bien no poseían tantos pilotos, lo cual se estaba convirtiendo en un grave problema. No obstante, la RAF fue reforzada durante la batalla por voluntarios extranjeros y pilotos recién formados.

    Tras muchos encuentros en el aire, parecía que Alemania estaba doblegando al Reino Unido. Sin embargo, se puede afirmar razonablemente que la Batalla de Inglaterra no fue realmente ganada por los británicos, fue más bien que la Luftwaffe no consiguió obtener la victoria. Esto representó una victoria estratégica para los británicos ya que dicha batalla se disputó para impedir una invasión de las fuerzas alemanas, aun cuando no hubiera un momento claro en que se pudiese lograr la victoria táctica. Desde el punto de vista numérico, los británicos perdieron 915 aparatos, los alemanes casi doblaron esa cantidad con 1.733 aviones derribados, que era una cifra superior a los que habían construido desde que empezó la guerra, lo cual quiere decir que el saldo era negativo y de continuar por ese camino el fracaso sería todavía más grande.

    Se debe resaltar, el hecho que la moral británica jamás se quebró, más bien se mantuvo sólida detrás de la figura de Churchill. Los bombardeos indiscriminados continuaron día y noche, pero con la llegada de pilotos voluntarios de muchos países entre ellos, polacos, franceses y escandinavos, además de neozelandeses, sudafricanos, canadienses e incluso ciudadanos estadounidenses que habían venido a luchar, aunque su nación no estaba todavía en guerra con Alemania, los británicos continuaron luchando con fuerzas renovadas. Una frase famosa de Winston Churchill en ese entonces, para referirse a los heroicos pilotos que estaba combatiendo día tras día, fue: “Nunca tantos debieron tanto a tan pocos.

    En esa coyuntura crítica, Estados Unidos, aunque técnicamente todavía no era beligerante y poniendo en peligro su neutralidad, asumió un papel más activo en la guerra del Atlántico. Es así como a través del acuerdo “Destructores por Bases” firmado el 2 de septiembre de 1940 por los Estados Unidos y Reino Unido, en virtud del cual la Armada de Estados Unidos transfería a la Marina Real Británica y a la Marina Real Canadiense 50 destructores de la Primera Guerra Mundial  a cambio de la instalación de bases norteamericanas orientadas a la defensa aérea en Terranova, Nueva Escocia, las islas Bermudas y en territorios bajo dominio británico ubicados en el Caribe (Bahamas, Antigua, Santa Lucia, Trinidad y la Guyana Británica), lo que ayudó a compensar las pérdidas navales del Reino Unido. También se desplegaron unidades estadounidenses en Islandia y Groenlandia. Además, Canadá construyó bases navales y aéreas en Terranova.

    En el primer año de la guerra (septiembre 1939 a septiembre 1940), los buques de guerra Aliados equipados con ASDIC y las cargas de profundidad, resultaron los enemigos más eficaces de los U-Boote. Durante los primeros diez meses, por lo menos 15 U-Boote fueron hundidos por ellos, de un total de los 25 que estaban entonces en alta mar, mientras que los aviones solo pudieron atribuirse la pérdida de un U-Boot.

    Es importante destacar que Befehlshaber der Unterseeboote[60], abreviado como B.d.U., dirigía las operaciones de los U-Boote por radio de largo alcance. Los alemanes asumieron que los Aliados interceptarían dichas comunicaciones, pero no les importó, ya que los mensajes eran codificados. Sin embargo, incluso las intersecciones codificadas fueron útiles pues los Aliados pudieron identificar muchos U-Boot por su firma de radio única. Incluso si un avión o buque de los Aliado no pudiera establecer la posición firme de un submarino, un analista podría determinar cuándo un U-Boot estaría cerca del final de una misión y, por lo tanto, se dirigirá a su base a lo largo de una de las varias rutas razonablemente predecibles.

    Podemos resaltar que el segundo semestre de 1940 se perdieron 8 U-Boote, pero fueron impactados en ese lapso 331 buques mercantes de los Aliados.

    El total de tonelaje hundido por los U-Boote totalizó durante el año de 1940, de unas 2.300.000 toneladas con la pérdida de 563 buques mercantes. De igual manera, la pérdida de U-Boote durante el año 1940 fue un total de 24 unidades.

    A inicios de 1941 los aviones antisubmarinos Aliados empezaron a ser dotados de radares capaces de detectar a un submarino a distancias de hasta 12.000 metros, lo que significaba para los aviones la posibilidad de operar tanto de día como de noche.

    En los primeros meses de 1941, los continuos hundimientos de los buques mercantes Aliados por parte de la U-Boote y de los aviones alemanes continuaron a ritmo mayor que el reemplazo de tonelaje. A su vez, los alemanes, estaban consiguiendo que la producción de U-Boote fuera superior a las pérdidas sufridas y esto, unido a la falta de buques escolta por parte de los Aliados, hacía que la situación de los convoyes fuera cada vez más crítica.

    Con la llegada de la primavera de 1941, la ofensiva submarina se volvió más fuerte todavía y así fueron hundidos durante el mes de marzo de ese año 41 buques mercantes con 243.000 toneladas, que era una cifra superior a la de los dos primeros meses del año.

    Para mejorar un poco la situación, en abril de 1.941 los británicos comenzaron a reabastecerse en Islandia. Asimismo, las bases canadienses de Labrador y Terranova se pudieron utilizar, pudiéndose de este modo cerrar el llamado “Agujero del Atlántico”. De igual manera, los británicos establecieron instalaciones de entrenamiento dedicadas exclusivamente a la lucha antisubmarina dando prioridad al empleo de nuevas armas y tácticas, entre las que se encontraban las mejoras del ASDIC y la entrada en funcionamiento del HF-DF[61].

    Por otro lado, a partir de mayo de 1941, con la ayuda de las florecientes fuerzas navales y aéreas canadienses, con armas antisubmarinos para protección de los buques mercantes, se activó un sistema de convoyes transatlánticos totalmente escoltado que llevaban los suministros al Reino Unido.

    A finales de mayo de 1941 cesaron los ataques en gran escala de la Luftwaffe sobre el Reino Unido. El Gobierno británico no solo no iba a capitular ante Hitler, sino que por el contrario el afán de resistencia había aumentado con el único objetivo de vencer a Alemania. La RAF mantenía su fuerza y la producción de aviones por parte británica aumentaba.

    Se puede concluir que la victoria británica en la Batalla de Inglaterra fue posible porque a los puertos ingleses llegaban los convoyes que traían aviones, materiales, víveres, pilotos, y armas, entre otros. El cordón umbilical con Estados Unidos fundamentalmente permanecía abierto gracias a las comunicaciones marítimas.

    Durante el verano de 1941, motivado a la invasión de Alemania a la Unión Soviética (URSS) hubo una relativa calma en la Batalla del Atlántico, lo que dio a los británicos un cierto respiro para desarrollar sus defensas antisubmarinas. Mientras tanto, los U-Boote se trasladaron al Mediterráneo y al Ártico en apoyo de la nueva guerra de Alemania con Rusia, alejados así de las vitales rutas de abastecimiento de los aliados en el Atlántico.

    Para poder atacar los Aliados a los U-Boote durante el tránsito a sus bases era necesario contar con el mayor número posible de aviones y cuanto mayor fuese el radio de acción, mejor, por eso el Comando Costero de la RAF[62] se reforzó en cuanto se pudo con los aviones Catalina y Liberator proporcionados por los Estados Unidos, llegando a contar con unos 500 aviones en agosto de 1941. Además, los aviones de dicho Comando Costero se instalaron en Reikiavik, después de ser ocupada Islandia, con el pretexto de la protección de la neutralidad de este territorio perteneciente a Dinamarca. Poco antes de la entrada en guerra de los Estados Unidos también firmaron un acuerdo con el gobierno danés en el exilio, pues Dinamarca había sido invadida por los alemanes, y de este modo los norteamericanos se establecieron en Groenlandia e Islandia.

    Si se considera una distancia de 600 millas para las operaciones de la patrulla aérea antisubmarina de los Aliados que operaba desde las bases de Terranova, Groenlandia, Islandia y Escocia, vemos que el peligroso “Agujero del Atlántico” cada vez se iba haciendo más pequeño. Estas bases serían sobre todo de una gran utilidad cuando más adelante operaran los convoyes a Rusia.

    De momento, las patrullas aéreas antisubmarinas de los Aliados que operaba desde Islandia y Escocia lograron reducir la eficacia de los U-Boote que, aunque normalmente navegaban en superficie, tenían que estar muy alertas para no verse sorprendidos, y, ciertamente, en varias ocasiones lo eran y se exponían a ser alcanzados por las cargas de profundidad. Además, si lograban hacer inmersión sin ser tocados, tenían que continuar sumergidos hasta que después de la puesta del sol los aviones perdieran su eficacia.

    El esfuerzo de descifrar el código denominado Ultra[63] utilizado por la Armada alemana dio sus frutos y a partir de junio de 1941 los Aliados pudieron leer gran parte del tráfico de radio de los U-Boote de forma intermitente durante el resto de la guerra, dependiendo de si los alemanes habían implementado nuevos códigos.

    El 2 de junio de 1941 los representantes de países Aliados y de gobiernos en el exilio firmaron la Declaración de Londres o Declaración del Palacio de St. James[64], que incluye una contundente afirmación: “La única base para la paz duradera es la colaboración de los pueblos libres en el mundo en el que, liberados de la amenaza de la agresión, puedan disfrutar de la seguridad económica y social”.

    El 14 de agosto de 1941, el Presidente Roosevelt de Estados Unidos y el Primer Ministro Churchill del Reino Unido se reunieron "en algún lugar en el mar” y emitieron una declaración conjunta destinada a ser conocida por la historia como la Carta del Atlántico[65].

    Uno de los acontecimientos relevantes de la guerra antisubmarina fue la captura por las fuerzas británicas del U-570 el 27 de agosto de 1941 en el Atlántico norte al sur de Islandia, después de ser dañado por un avión británico Hudson (269 Sqn RAF/S). El U-570 después de ser reparado fue puesto en servicio en la Marina de Guerra británica con el nombre de HMS Graph el 5 de octubre de 1941, resultando además una fuente extremadamente valiosa de información sobre las características de los submarinos alemanes. Fue retirado del servicio activo el 21 de junio de 1943.

    El papel de Estados Unidos como "neutral" fue algo confuso ya que existía un flujo constante de suministros en convoyes a través del Atlántico, protegido durante gran parte de la ruta con recursos de la U.S. Navy. Después de que los U-Boote hundieran un mercante estadounidense en mayo de 1941 y un destructor estadounidense el 30 de octubre de 1941, con la pérdida de 115 marineros, la opinión pública, que había estado alrededor del 70 por ciento a favor de la neutralidad, comenzó a cambiar.

    Para el otoño de 1941, los estadounidenses estaban completamente comprometidos en escoltar el transporte marítimo en el Atlántico noroeste junto con los canadienses y los británicos.

    A finales del año 1941 empezó a fabricarse en serie una nueva arma antisubmarina para navíos de superficie de los Aliados denominada Hedgehog[66], en castellano Erizo”, que era esencialmente un mortero múltiple que lanzaba por la proa del buque 24 proyectiles dotados con espoletas de contacto para producir una explosión anular. Cada proyectil llevaba una carga mucho menor que la normal de 300 libras de las cargas de profundidad, pero el efecto reiterativo aumentaba las oportunidades de hundir un U-Boot.

    Por otro lado, los frutos del programa intensificado de construcción de U-Boote que se inició a fines de 1939, se hizo evidente cuando el número medio mensual de los mismos en acción en el mar ascendió de unos 12 al principio del año 1941 a unos 36 a fines del mismo año. Esto permitió a los convoyes de los Aliados. Mientras tanto, el número de escoltas de convoyes iba incrementándose continuamente.

    En resumen, podemos señalar que el año 1941 los U-Boote impactaron 501 buques mercantes de los Aliados y hundieron un total de 2.200.000 toneladas, lo que da un promedio mensual de 180.000 toneladas. Por otro lado, durante el año 1941 se perdieron 35 U-Boote. Se esperaba construir en el año 1942, unos 20 U-Boote al mes y conseguir mayor tonelaje hundido.

     

     

     

     

    Capítulo IV: La Batalla del Atlántico (Segunda Fase Diciembre 1941-Junio 1943).

     

    La entrada formal de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial fue un cambio total a la evolución de la guerra, entrando una nación con una gran tecnología y un gran número de combatientes. También abrió una vasta área para las operaciones de los U-Boote en aguas estadounidenses justo cuando las fuerzas de dicho país se retiraron para la nueva guerra contra Japón en el teatro del Pacífico.

    a.  La entrada de Estados Unidos en la guerra y ampliación de la zona de operaciones (Diciembre 1941 a Julio 1942).

    El 8 de diciembre de 1941, un día después del ataque aéreo masivo de los japoneses contra Pearl Harbor, los Estados Unidos declararon la guerra a Alemania, Japón e Italia que conformaban las “Potencias del Eje”.

    El 9 de diciembre de 1941 el Alto Mando de Guerra Naval Seekriegsleitung (Skl), levantó las restricciones existentes hasta entonces en cuanto al uso de los U-Boote frente a la costa este norteamericana y el centro de gravedad de la campaña submarina se trasladó al Atlántico Occidental, en donde los buques mercantes aliados navegaban con pocas defensas.

     El Almirante Karl Dönitz inmediatamente comenzó a elaborar planes para asestar un golpe devastador contra el tráfico de buques mercantes que transportaban petróleo y otras materias primas rumbo a las zonas industriales de la costa nororiental de los Estados Unidos y Canadá. Los U-Boote tenían ante sí un nuevo campo de operaciones para probar su mortífera eficacia. 

    Asimismo, mediante una gradual penetración dentro del Golfo de México, Dönitz pretendía debilitar los convoyes aliados hasta el punto del colapso, debido a lo poco protegidas que eran las rutas de navegación en el Atlántico Occidental.

    Alemania se sentía fuerte, pues su producción de submarinos alcanzaba las 20 unidades al mes. Se trataba de naves mejor equipadas con nuevas armas y óptimos métodos de defensa.

    Para esta operación la cual se denominó Operación “Paukenschlag", en castellano "Operación golpe de tambor", el Almirante Dönitz quería atacar con 12 U-Boote Tipo IX, las únicas embarcaciones de largo alcance. Pero se vio obligado a reducir ese número a 6 U-Boote debido a otros compromisos en el área de Gibraltar. Uno de los U-Boote seleccionados para esta operación, el U-128 requería reparaciones urgentes y no pudo estar disponible en el tiempo requerido. Por lo tanto, solo pudo disponer inicialmente de 5 U-Boote de la flota de 93 existentes.

    Cinco U-Boote no era una cantidad suficiente, pero la experiencia de los comandantes multiplicaba el daño que podían causar de manera considerable.

    Los U-Boote seleccionados fueron los siguientes:

    ·       U-66 del Tipo IXC. Al mando del Korvettenkapitän Richard Zapp.

    ·       U-109 del Tipo IXB. Al mando del Kptlt. Heinrich Bleichrodt.

    ·       U-123 del Tipo IXB. Al mando del Kapitänleutnant Reinhard Hardegen.

    ·       U-125 del Tipo IXC. Al mando del Kptlt. Ulrich Folkers.

    ·       U-130 del Tipo IXC. Al mando del Kapitän zur See Ernst Kals.

    La preparación de la operación fue escasa, ya que no contaban con cartas adecuadas, pero los U-Boote se hicieron a la mar hacia una costa por explorar y con todas las dificultades que ello conllevaba. Los U-Boote partieron entre el 18 y 28 de diciembre de 1941 de la Base Naval de Lorient (Francia), manteniendo silencio total de radio para evitar la defensa aliada. Igualmente, tenían órdenes estrictas de no atacar ningún buque durante la navegación a menos que se localizara un objetivo especialmente atractivo que tuviera un porte mayor a 10.000 toneladas.

    El U-125 fue el primero en navegar el 18 de diciembre de 1941, seguido del U-123 el 23 y el U-66 el 24, finalmente los dos últimos de los U-Boote, el U- 130 y el U-109 navegaron juntos el día 27. En ese momento, tardaría poco más de 2 semanas en llegar a aguas estadounidenses.

    El 12 de enero de 1942 se produjo la ofensiva alemana en la costa este de los Estados Unidos con los 5 U-Boote en el sector comprendido entre el río San. Lorenzo en Canadá y el Cabo Hatteras en Carolina del Norte. Allí los Comandantes de U-Boote encontraron que el transporte marítimo estaba completamente desguarnecido.

    Todos los U-Boote debían estar en posición el 13 de enero de 1942 y comenzar sus ataques a la misma hora en esa fecha. Sin embargo, el U-123 hundió el primer buque, el SS Cyclops el 11 de enero y el U-130 hundió dos buques los dos días siguientes y después de eso cayeron más de uno por día.

    El 6 de febrero de 1942 los U-Boote de la Operación “Paukenschlag” finalizaron sus ataques y se dirigieron a sus bases en Francia. En este lapso desde el 11 de enero al 6 de febrero de 1942 hundieron 25 buques para un total de 156.939 toneladas. El U-123 hundió 9 buques por un total de 53.173 toneladas. Para los experimentados "Lobos Grises", era como un juego de niños el atacar buques petroleros sin escolta. El líder de la Operación “Paukenschlag" fue el U-123, comandado por el Kptlt. Reinhard Hardegen, que hundió 53.000 toneladas.

    Posteriormente, hubo varias otras "olas" de U-Boote que se adentraron en aguas estadounidenses, pero que en realidad no cuentan como parte de la Operación Paukenschlag.

    Para cuando los primeros U-Boote de la Operación Paukenschlag regresaban a sus bases francesas en febrero, la siguiente ola de U-Boote ya había golpeado con fuerza la costa este de Estados Unidos. En las siguientes olas llegaron muchos de los Comandantes más experimentados de los U-Boote como KrvKpt. Erich Topp en el U-552, Kptlt. Reinhard Hardegen en el U-123, KrvKpt. Hans-Ludwig Witt en el U-129, Kptlt. Horst Degen en el U-701, Oblt. Adalbert Schnee en el U-201, KrvKpt. Johann Mohr en el U-124 y Oblt. Georg Lassen en el U-160, por nombrar algunos.

    Cabe destacar, que las grandes exigencias de la guerra en el Pacífico, así como la falta de experiencia operativa, contribuyeron a la falta de preparación de los Estados Unidos ante la ofensiva lanzada en escalada por los U-Boote sobre la costa este. Durante algunos meses la defensa estadounidense se limitaba a patrullar con regularidad con dotaciones no experimentadas y con buques débilmente armados. Asimismo, la aviación americana de exploración carecía de experiencia y tuvo gran actividad, pero no pudo evitar la intrusión de los U-Boote, que permanecían en inmersión posados en el fondo durante el día para ahorro de combustible y descanso de la dotación. Al crepúsculo vespertino emergían navegando por las proximidades de la costa.

    El primer hundimiento de un submarino por las fuerzas de los Estados Unidos fue el U-656 el 1º de marzo de 1942 al sur de Cape Race en Canadá por cargas de profundidad de un avión Hudson de la Marina estadounidense (VP-82 USN / P-8), ocasionando 45 muertos y o sobrevivientes de la tripulación.

    El 15 de marzo de 1942 el U-503 fue hundido al sureste de Terranova por cargas de profundidad de un avión Hudson de la Marina estadounidense (VP-82 USN), ocasionando 51 muertos y o sobrevivientes de la tripulación.

    En abril de 1942, cerca de 200 aviones de la Marina y del Ejército de los Estados Unidos, volaban en patrullas ASW desde los aeródromos situados a lo largo de la costa este.

    En los primeros meses de 1942, Dönitz cambió el enfoque de las operaciones de los U-Boote y comenzó a desplazarlos hacia el Golfo de México y el mar Caribe, en donde aún no se implementaba el sistema de convoyes, hundiendo a 41 buques con un total de 219.867 toneladas. Casi la mitad de éstos eran buques tanqueros que fueron torpedeados frente a la desembocadura del Río Mississippi. Estos ataques se redujeron posteriormente al establecer los estadounidenses el sistema entrelazado de convoyes, que permitía que estos fueran entregados en el mar de una escolta a otra. Asimismo, el mando estadounidense vio la urgencia de extender el citado sistema de convoyes al sureste de Trinidad.

    El 4 de mayo de 1942 el U-507, al mando del Korvkpt. Harro Schacht hundió el primer buque en el Golfo de México cuando torpedeó el buque Norlindo de 2.686 toneladas al noroeste de Key West. Durante el resto del ese mes de mayo, un buque mercante se perdía todos los días. El último buque hundido en el Golfo de México fue el 4 de septiembre de 1942.

    A principios del mes de mayo de 1942, el U-Boot U-459 “Vaca Lechera” reabasteció de combustible a 15 U-Boote al noroeste de las Bermudas y, por lo tanto, extendió en gran medida el alcance y el tiempo de patrullaje. Para los U-Boote Tipo IX en 8 semanas y los U-Boote Tipo VII en 4 semanas. Esto también le dio a Dönitz la opción de atacar mucho más al sur de lo que era posible anteriormente.

    A mediados de mayo de 1942, Estados Unidos finalmente comenzó a dirigir convoyes en la costa este que demostraron ser efectivos desde el principio.

    En junio de 1942 se formó en el Aeródromo de Langley (Virginia) la Unidad de Búsqueda, Reconocimiento y Ataque en el Mar (Sea Search Attack Development Unit -SADU-), con una misión combinada: desarrollar las tácticas y técnicas convenientes para el empleo de medios antisubmarinos y realizar el reconocimiento general en el mar. Por otro lado, ese mismo mes el Comando Costero de la RAF incrementó la acción ofensiva en el Golfo de Vizcaya con la introducción de los aviones Wellington, dotados con reflectores de gran potencia conocidos como Foco Leigh[67] y aparatos de radar Mark II[68] ASV. Aunque su empleo resultaba muy difícil por los ecos radar de los barcos pesqueros franceses, estos aviones resultaron extremadamente eficaces para localizar por la noche a los U-Boote navegando en superficie y poder bombardearlos.

    El 7 de julio de 1942 el U-701 fue hundido frente al Cabo Hatteras, por cargas de profundidad de un avión del Ejército estadounidense A-29 Hudson (396th Bomb Sqn USAAF) ocasionando 39 muertos y 7 sobrevivientes de la tripulación.

    Como resultado de los ataques de los U-Boote, las pérdidas de los buques mercantes Aliados se dispararon entre enero y junio de 1942. Mientras tanto, la construcción de buques mercantes sin precedentes, especialmente en los Estados Unidos, había comenzado a adelantarse a las pérdidas en el otoño de ese año.

    A mediados de 1942 los hundimientos de los U-Boote fueron menos frecuentes porque estos empezaron a usar el receptor de advertencia de radar de alta frecuencia (RWR) R600A Metox[69], el cual era un dispositivo que permitía captar las señales del radar de búsqueda aerotransportado ASV MkII, que daba tiempo suficiente al U-Boot para poder sumergirse. 

    Durante los primeros 6 meses de la ofensiva de los U-Boote en las costas de los Estados Unidos, se hundieron unos 397 buques para un total de más de 2 millones de toneladas, lo que costó aproximadamente 5.000 vidas. Sin embargo, ese balance estaba lejos de las 700.000 toneladas mensuales requeridas por el Alto Mando de Guerra Naval Seekriegsleitung (Skl). En el proceso solo se perdieron 7 U-Boote: U-85, U-352, U-157, U-158, U-701, U-153 y U-576. Solo hubo 33 sobrevivientes del U-352 y 7 sobrevivientes del U-701, el resto de los 302 tripulantes murieron.

    En resumen, podemos indicar que entre enero a junio de 1942 los U-Boote impactaron 628 buques mercantes de los Aliados y fueron hundidos 21 U-Boote.

    b.    Inclinación de la balanza a favor de los Aliados (Julio 1942 a Junio 1943).

    La situación vulnerable del transporte marítimo del Reino Unido existió hasta mediados del año 1942 cuando las fuerzas navales y aéreas canadienses, con más y mejores equipos, fortaleció y amplió el sistema de convoyes para llenar el vacío dejado en el Atlántico Norte por la salida de las fuerzas estadounidenses hacia el Pacífico y el Caribe.

    En junio de 1942, el Comando Costero de la RAF incrementó la acción ofensiva en el Golfo de Vizcaya con la introducción de aviones Wellington, dotados con reflectores de gran potencia Leigh y aparatos de radar Mark II ASV. Aunque su empleo resultaba muy difícil, estos aviones resultaron extremadamente eficaces para localizar por la noche a los U-Boote navegando en superficie y bombardearlos. De manera que, los U-Boote cambiaron su táctica, prefiriendo correr los riesgos de salir a la superficie durante el día que cruzar de noche el citado golfo. Al mismo tiempo intentaron contrarrestar los ataques aéreos mediante el empleo de armamento antiaéreo reforzado. Posteriormente, los alemanes emplearon, como interceptores para proteger a los U-Boote aviones Junkers Ju-88 y Arado Ar-196, a lo cual el Comando Costero de la RAF respondió enviando cazas de gran radio de acción Bristol Beaufighter, para interceptar a su vez a los interceptadores.

    En julio de 1942 se iniciaron los sistemas de convoyes en el Caribe el cual era más complejo que el establecido en el litoral estadounidense, pero aún requería la ayuda de corbetas británicas y canadienses.

    Meses más tarde, la marina mercante y la Marina de Guerra de los Estados Unidos aumentaron drásticamente la cantidad de tonelaje de suministros enviados a través del Atlántico. La combinación de un mayor tonelaje y una mayor protección naval de los convoyes marítimos hizo mucho más difícil que los U-Boote hicieran una mella significativa en el transporte marítimo británico.

    El 8 de agosto de 1942, casi 3 años después de que comenzara la guerra, el número de U-Boote en el mar alcanzó a 100 por primera vez. El Almirante Dönitz finalmente tuvo gran parte del poder de ataque en el que había estado insistiendo. Durante los siguientes 11 meses, el número rara vez bajó de 100, llegando a 159 el 29 de abril de 1943. De manera que, con un promedio de 100 U-Boote en alta mar, ocho veces superior al empleado en las operaciones del Atlántico durante el primer año de la guerra, Alemania estaba en una excelente posición para llevar a cabo una intensa campaña submarina. De igual manera, con una pérdida de buques mercantes Aliados que excedían la producción de los astilleros, resultaba evidente que, aunque la derrota de los submarinos alemanes no suponía por sí misma el fin de la guerra, los Aliados no podrían alcanzar la victoria sin derrotar primeramente a los U-Boote.

    Durante la mayor parte de 1942, los Aliados no pudieron penetrar los códigos Enigma[70] y la ruptura anterior debería haber sido obvia para los alemanes, ya que de repente encontrarían convoyes en mayor número. Esto fue contrarrestado en gran medida por las operaciones alemanas en aguas estadounidenses y el Caribe, retirando U-Boote de las líneas de convoyes del Atlántico Norte.

    A finales de 1942, la expansión progresiva del sistema de convoyes en el hemisferio occidental había obligado a los U-Boote regresar al Atlántico medio. Asimismo, el total de buques mercantes de los Aliados impactados durante ese año por los U-Boote totalizó 1.322 con la pérdida de 5.800.000 toneladas. Por otro lado, se perdieron un total de 86 U-Boote.

    Un desarrollo tecnológico de los alemanes a fines de 1942 fue un nuevo sistema de control de dirección para los torpedos, denominado FAT (Federapparat Torpedo). Este sistema habilitaba la posibilidad de establecer el curso del torpedo antes de lanzar el sistema, permitiendo “programar” un patrón de dirección. Por ejemplo, se podía establecer que, tras un recorrido inicial de 1.200 metros, el torpedo tomara otra dirección durante unos 400 metros más y volviera a su dirección original, creando de este modo un patrón de búsqueda. En el caso de no producirse ningún impacto en el recorrido inicial, el torpedo daba la vuelta una y otra vez hasta que se producía el impacto o llegaba a su máxima distancia operativa. Lo ideal era lanzarlos por delante de un convoy. Los torpedos FAT resultaron muy efectivos, ya que no eran necesarios cálculos muy complejos para lanzarlos. Uno de los peligros de este torpedo era la posibilidad de que, en el caso de un ataque de varios U-Boote a un convoy, uno de estos torpedos terminara impactando con algún U-Boot. A pesar de este peligro nunca se produjo un incidente de este tipo.

    El 31 de enero de 1943 Dönitz fue ascendido al grado de Gran Almirante (Großadmiral), ascenso que le otorgó a su vez el cargo de Oberbefehlshaber der Kriegsmarine o Jefe Supremo de la Kriegsmarine, el máximo puesto en el Oberkommando der Marine, sustituyendo al también Gran Almirante Erich Raeder en el cargo. Esto no fue impedimento para que Dönitz continuase al mando de las unidades de guerra submarina.

    A partir de 1943 como consecuencia de la introducción de la tecnología para detectar los U-Boote a tiempo con los radares Type 271[71], así como las nuevas rupturas en los códigos navales alemanes de la máquina Enigma, la creación de los escuadrones cazasubmarinos que tenían el único objetivo de hundir submarinos y la táctica de cobertura aérea continua a los convoyes Aliados, inclinaron la balanza de la Batalla del Atlántico decididamente a favor de los Aliados pasando los U-Boote de ser cazadores a víctimas de la caza. Esta situación se mantuvo hasta el final de la guerra, aun cuando los alemanes introdujeron en el teatro de operaciones nuevos submarinos, como los del Tipo XXI, que llegaron tarde como para revertir los resultados.

    Se debe resaltar, que para febrero de 1943 los Aliados tenían 34 los escuadrones antisubmarinos bajo el mando operativo del Comando Costero de la RAF, con una fuerza total de 430 aviones. De estos, 8 Escuadrones eran de los hidroaviones Short S.25 Sunderland[72] y 4 Escuadrones de los hidroaviones PBY Catalina[73]. De los aviones con base en tierra solo había 2 Escuadrones de aviones bombarderos B-24 Liberator[74]. Los restantes Escuadrones ASW eran aviones Liberator de corto alcance, Beaufighter de ataque con torpedos, Halifax, Hudson y Wellington.

    El mayor desastre para la Kriegsmarine ocurrió en entre el 28 de abril y el 6 de mayo de 1943 cuando el convoy aliado ONS-5 fue atacado por cuatro Manadas de Lobos (Star con 16 U-Boote, Amsel I con 6 U-Boote, Amsel II con 7 U-Boote y Fink con 28 U-Boote), sumando 57 U-Boote en total, que libraron una lucha brutal en el Atlántico. Sin embargo, solo 12 buques del convoy fueron hundidos. En contraparte, de los 57 U-Boote fueron hundidos 8, incluyendo 2 que colisionaron (U-710 y el U-209) mientras perseguían a un convoy que se dirigía al sur y 7 tuvieron que abortar la misión pues fueron severamente dañados. Esta batalla a menudo se ve como el punto de inflexión en la Batalla del Atlántico. De hecho, en las 3 semanas posteriores a este desastre, los alemanes no pudieron hacer un ataque contra ningún otro convoy, pero continuaron sufriendo graves pérdidas. Esto haría que el Almirante Karl Dönitz reconociera su derrota y el 23 de mayo detuvo todas las operaciones de convoyes y retiró sus U-Boote al Atlántico Norte.

    Una de las principales causas del fracaso de los U-Boote durante el de mes de mayo de 1943 fue que los aviones bombarderos aliados B-24 Liberator con la configuración antisubmarina y patrullaje marítimo, apodado "VLR" por "Very Long Range", habían conseguido prácticamente cubrir la “Brecha del Atlántico Medio”[75], denominada también "Pozo Negro", y el Golfo de Vizcaya, atacando a los U-Boote o forzándolos a sumergirse antes de alcanzar al convoy, e incluso hostigándolos durante su tránsito. Los aviones VLR estuvieron involucrados en 72 hundimientos de U-Boote.

    El mes de mayo de 1943, en los teatros Atlántico, Mediterráneo e Índico, los U-Boote habían hundido 49 buques mercantes y 237.182 toneladas, pero sus pérdidas habían ascendido a 41 submarinos alemanes. Esta era la primera vez, desde abril de 1940, en que el número de U-Boote hundidos era superior a los entregados. A finales de ese mes el fracaso era tan evidente que en el propio BdU se referían a aquel fatídico mayo como Schwarzer Mai (en castellano Mayo Negro).

    Las mencionadas pérdidas de U-Boote del mes de mayo de 1943, obligaron al BdU a plantearse la necesidad de cambiar temporalmente la estrategia de la guerra submarina, por lo que el 24 de mayo de ese año Dönitz dio la orden de retirar los submarinos del Atlántico Norte hasta que las nuevas armas que se estaban desarrollando en Alemania estuviesen listas, principalmente los montajes antiaéreos (A/A) cuádruples y, sobre todo, el nuevo torpedo acústico TV (G7es) Zaunköning[76], que era atraído por la cavitación de las hélices de los escoltas de la misma forma que el Mark-24 Fido[77] de los Aliados se dirigía hacia la cavitación de la propulsión de los submarinos alemanes. Mientras tanto, los U-Boote operarían en el Atlántico central, el Mediterráneo, Brasil, el Caribe, África del oeste, Sudáfrica y el Índico.

    En resumen, podemos indicar que entre enero a junio de 1943 fueron impactados por los U-Boote 401 buques mercantes y fueron hundidos 115 U-Boote.

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    Capítulo V: La Batalla del Atlántico (Tercera Fase Junio 1943-Mayo 1945).

     

    El Atlántico Central se había vuelto un escenario peligroso para los U-Boote como resultado de la propuesta formulada por el Almirante Ernest King[78] a principios de 1943, mediante la cual los británicos y canadienses serían responsables del control de los convoyes en el Atlántico ya que en una se había adoptado la fórmula propuesta Norte, mientras que los estadounidenses asumirían la responsabilidad de estos en el Atlántico Central. Esta propuesta se puso en vigor el 1º de marzo, por lo que en verano de 1943 ya estaban operando los Hunter-Killer Groups[79] estadounidenses en el Atlántico central.

    El mes de junio de 1943 los Aliados suspendieron los convoyes a la URSS para emplear a todos los escoltas en la lucha contra los U-Boote en el Atlántico, lo cual produjo una ofensiva contra los U-Boote que transitaban en el golfo de Vizcaya. La respuesta de Dönitz fue que transitaran en grupos y en superficie para que una respuesta antiaérea pudiera disuadir a los ataques aéreos de los Aliados. No obstante, de 16 U-Boote hundidos en este mes, 11 fueron debidos a la gran cantidad de aviones británicos que operaban en el Golfo de Vizcaya.

    A partir del mes de julio de 1943 los británicos empezaron a utilizar los mercantes transformados en portaviones de escolta, que habían comprado por el sistema de Préstamo y Arriendo[80] a los Estados Unidos. Las pérdidas de este mes fueron de 45 buques mercantes hundidos que totalizaron unas 224.000 toneladas, pero solo en este mes se botaron 200 buques tipo Liberty. Para finales de este mes fueron hundidos un total de 38 U-Boote. Los U-Boot Tipo XIV se dirigieron al Índico y los de ataque se alejaron, llegando al mar Rojo, aprovisionándose en Madagascar.

    Durante el mes de agosto de 1943 mes fueron hundidos 25 U-Boote y se perdieron 16 buques mercantes Aliados con 86.000 toneladas. El almirante Dönitz revocó la orden de atacar a los aviones en superficie, una vez que se descubrió que contaban con un radar centimétrico[81] capaz de sorprenderlos sin tiempo de reacción.

    En septiembre de 1943 el almirante Dönitz volvió a intentar reanudar las Manadas de Lobos en el Atlántico, pero esta vez las instrucciones a los submarinos eran de atacar primero a los escoltas. Dönitz concentró sus manadas para atacar la conjunción del convoy lento ONS-18 con el convoy rápido ON-202. Sin embargo, por el descifrado de los mensajes de la máquina Enigma se detectó la concentración submarina y se libró una feroz batalla en la que los nuevos torpedos autoguiados G7es (T5) Zaunkönig lograron hundir a un destructor canadiense. Los U-Boote atacaron desde el día 20 al 23, fecha en que Dönitz tuvo que retirar sus Manadas de Lobos ante ataques de los aviones Liberator de los Aliados, siendo hundidos un total 3 U-Boote de los 19 atacantes, perdiendo los Aliados 3 buques escoltas y 6 buques mercantes. Dos semanas después la contramedida de los británicos al torpedo acústico Zaunkönig estaba lograda: un productor de ruidos denominado Foxer. Este mismo mes, el acorazado alemán Tirpitz fue neutralizado en Noruega y Alemania perdió un total de 10 U-Boote. De igual manera, este mes capituló Italia, lo que abrió a los Aliados la ruta marítima Gibraltar-Canal de Suez.

    El mes de octubre de 1943 en la conjunción de los convoyes Aliados ONS-206 y ON-20 tuvo lugar una batalla de cinco días de duración en el “Agujero del Atlántico”, en la que solo se perdió un buque mercante, resultando destruidos 6 U-Boote. Ante tales perdidas, los U-Boot dejaron de atacar en Manada de Lobos. Asimismo, este mes se reanudaron los convoyes Aliados a la URSS.

    Durante el mes de noviembre de 1943 los británicos perfeccionaron el sistema Erizo y lo reemplazaron por el sistema Squid[82] (en castellano calamar) de ataque por la proa, que desde entonces fue mucho más preciso y dotado de una carga capaz de destruir a los U-Boote, sin los inconvenientes del ataque con cargas de profundidad. Por otro lado, los U-Boote se concentraron en los convoyes Aliados entre Inglaterra y Gibraltar. El Almirante Dönitz tenía la esperanza de que con la entrada en servicio de los nuevos tipos de U-Boote Tipo XXIII se pudiera volver a los ataques en Manada de Lobos.

    A finales de 1943, se produjo un cambio fundamental en la táctica de los U-Boote, pues estos se vieron obligados a adoptar un sistema que favoreciese su supervivencia, aunque disminuyese la eficacia de su empleo contra la navegación. Los U-Boote permanecían completamente sumergidos durante el día para evitar las patrullas aéreas aliadas y emergían de noche para cargar las baterías, perseguir y atacar cualquier convoy que se encontrase a su alcance. Hasta cierto punto, la consiguiente falta de movilidad de los U-Boote la compensaron los alemanes mediante el empleo de aviones de reconocimiento de largo alcance para localizar los convoyes.

    Entre julio a diciembre de 1943 fueron impactados por los U-Boote 181 buques mercantes y se perdieron 126 U-Boote.

    En resumen, durante el año 1943 el total de buques mercantes impactados por los U-Boote fue 582 con un tonelaje hundido de 2.300.000 toneladas. De igual manera, se perdieron 241 U-Boote siendo el peor año para Alemania en toda la Segunda Guerra Mundial y por primera vez este resultado se debió más a la intervención de la aviación aliada que a la de buques de superficie.

    Para enero de 1944 Alemania disponía aún de 419 U-Boote, lo que le permitía tener 161 operativos, 168 en mantenimiento y 90 en adiestramiento. Las pérdidas aliadas de este mes fueron de 20 buques mercantes con 92.000 toneladas y en contraparte la pérdida de 14 U-Boote.

    En febrero de 1944 los U-Boote continuaron operando al sudoeste de Irlanda. Las pérdidas de este mes fueron de 22 U-Boote, mientras 28 buques mercantes fueron impactados que totalizaron unas 93.000 toneladas hundidas. El día 5 de febrero de ese año salió de Saint Nazaire (Francia) el U-264 con el Snorkel[83] (en alemán Schnorchel), que fue el primer submarino que utilizó este nuevo dispositivo en la Segunda Guerra Mundial, lo que permitía navegar sumergido en forma prolongada y reducía en gran medida la eficacia del radar de los Aliados.

    Por otro lado, un desarrollo técnico de los alemanes utilizado a partir del mes de marzo de 1944 fue el Torpedo  LuT I (Lagemmabhängiger Torpedo), que se desarrolló a partir del FaT, que permitía ajustar por anticipado la velocidad y la dirección de un torpedo zigzagueante. El Lut se instaló en el G7a (TI LuT G7a) y en la versión “eléctrica” del mismo (TI LuT G7e) en la que fue mejorada la autonomía. También tenían en ensayo un nuevo tipo de torpedo, el Geier[84], que emitía señales supersónicas y se dirigía automáticamente hacia el eco reflejado por el buscador de blancos. De igual manera, como contramedida al uso de los Aliados del HF/DF, los alemanes desarrollaron un método de comunicación de ultra alta velocidad mediante el cual los mensajes se registraban previamente en cinta magnética que después se hacía girar a gran velocidad al ser transmitidos.

    Este mismo mes de marzo, las pérdidas fueron de 21 buques mercantes con 143.000 toneladas. Alemania perdió 24 U-Boote. En esta época los Aliados contaban en el Atlántico con 11 portaviones de escolta y 17 portaviones procedentes de la transformación de buques mercantes, todos ellos empleados en convoyes y Grupos de Apoyo.

    El único caso en el que hay constancia de que se disparase sobre los náufragos por parte de un U-Boot fue la noche del día 13 de marzo de 1944, cuando el U-852, al mando del Kptlt. Heinz Eck hundió a un carguero griego Peleus al suroeste de Freetown e hizo ametrallar a los sobrevivientes. El Comandante y dos miembros de su tripulación fueron juzgados y ejecutados después de la guerra. Fue el único Comandante de un submarino alemán acusado de crímenes de guerra.

    En abril de 1944 las pérdidas de este mes fueron de 12 buques mercantes con 62.000 toneladas, las más bajas hasta entonces. Asimismo, fueron hundidos 21 U-Boote.

    El mes de mayo de 1944 solo quedaban cinco U-Boote en el Atlántico Norte, que pronto fueron hundidos por los escoltas. Desde principios de 1944, los nuevos sensores instalados en los U-Boote lograban detectar a los emisores radar centimétrico de los aviones, por eso en el período que va desde este mes al de agosto se perdieron 350 aviones del Comando Costero de la RAF cuando el almirante Dönitz dio la orden de emerger durante el día y atacar a la aviación. Las pérdidas de este mes fueron de 17 buques mercantes y resultaron destruidos 24 U-Boote.

    El mes de junio de 1944 los U-Boote fueron enviados a las costas de Inglaterra para oponerse al desembarco en Normandía. Algunos lograron pasar el Canal de la Mancha, pero solo lograron hundir una fragata y 5 buques mercantes en la zona del desembarco. Después, y durante el verano, el almirante Dönitz no tuvo más remedio que alejar los U-Boote al Océano Índico. En total este mes los Aliados perdieron 22 buques mercantes y Alemania 24 U-Boote.

    Después de la invasión Aliada al continente europeo en junio de 1944, y la consiguiente pérdida de las bases de submarinos alemanas en el Golfo de Vizcaya durante ese año, la mayor parte de las actividades de los U-Boote se concentraron en las aguas que rodeaban a Inglaterra. El Comando Costero de la RAF, que ahora contaba con un millar de aviones, pudo concentrar sus fuerzas contra los U-Boote, aunque el uso creciente de los Snorkels disminuyó de manera importante los efectos de esta ventaja numérica. Pero, por otra parte, el empleo del Snorkel también reducía grandemente lo potencia ofensiva de los U-Boote, ya que, mientras el submarino mantenía una velocidad de inmersión de unos 6 nudos que permitía la profundidad para el uso del periscopio, su movilidad, comparada con la alcanzada en las operaciones de superficie, se veía notablemente reducida.

    En julio de 1944 las pérdidas de los Aliados fueron de 25 buques mercantes y en contraparte 23 U-Boote.

    En agosto de 1944 los Aliados perdieron 37 buques mercantes y los alemanes 32 U-Boote.

    El mes de septiembre de 1944 las perdidas alcanzaron 15 buques mercantes con 59.000 toneladas y resultaron hundidos 20 U-Boote.

    Para octubre de 1944, la situación bélica en todos los teatros y en todos los frentes tenía un aspecto sumamente grave apara Alemania, pues había perdido la mayor parte de los territorios anteriormente ocupados con la excepción de Noruega, Dinamarca y Holanda. Para finales de este mes, prácticamente casi todos los U-Boote disponibles en patrullas de combate habían sido equipados con Schnorkel.

    En noviembre de 1944 se perdieron 10 buques mercantes para un total de unas 30.000 toneladas. Se produjo un punto de inflexión con relación al mes anterior, por haber detectado a los U-Boote en el uso del snorkel hundiendo los Aliados 9 submarinos. El hundimiento de los U-Boote por aviones continuó hasta el final de la guerra. La búsqueda de estos visualmente fue muy efectiva ya que el humo expelido o la estela que acompañaba algunas veces la presencia del Snorkel resultó relativamente más productiva que la búsqueda por radar. El Snorkel estaba cubierto con una capa antirradar de características similares a la goma que reducía eficazmente los contactos de las microondas del radar.

    En diciembre de 1944 se perdieron 9 buques mercantes con 59 000 toneladas, cantidad superior a la del mes anterior.

    Podemos concluir que durante el año 1944 continuó la superioridad de los Aliados sobre los U-Boote con una pérdida de estos de 234 unidades. El promedio de U-Boote que operaban en el Atlántico descendió y las pérdidas de buques mercantes permanecieron en un nivel bajo alcanzando solo 243 buques mercantes impactados.

    Finalmente, las victorias de los Aliados en tierra privaron a los submarinos alemanes de sus bases e instalaciones costeras en Francia. Sin embargo, los U-Boote continuaron operando, aunque sufriendo graves pérdidas. Su oportunidad para recuperar el dominio del mar se basaba en el desarrollo o perfeccionamiento de nuevos U-Boote Tipo XXIII llamados Elektroboot con velocidad de inmersión muy elevada, pero, debido a las dificultades de fabricación y al colapso general de Alemania, ninguno de estos submarinos consiguió accionar contra los Aliados.

    En enero de 1945 los U-Boote que se encontraban operativos actuaron en el Ártico, Irlanda y en las costas de Gran Bretaña, perdiéndose 14 de ellos y los Aliados perdieron 24 buques mercantes.

    En febrero de 1945 los U-Boote operaron en las costas británicas, perdiéndose 21 de ellos, teniendo mucho que ver en estas destrucciones las nuevas armas de proyección por la proa. Asimismo, se perdieron 24 buques mercantes de los Aliados.

    En marzo de 1945 los U-Boote operaron en las costas británicas, perdiéndose 29 U-Boote- Los Aliados perdieron 21 buques mercantes.

     El mes de abril de 1945 salió el último convoy de los Aliados para el Ártico y se perdieron 23 buques mercantes. Alemania perdió 23 U-Boote. Durante todo el mes no se consiguió hundir a ninguno del Tipo XXIII, que ya estaban operativos.

    El 4 de mayo de 1945 finalizó la guerra submarina cuando el almirante Dönitz ordenó a los U-Boot cesar en los ataques y regresar a sus bases.

    De gran importancia es mencionar que en marzo de 1945 se enviaron por primera vez varios U-Boote Elektroboot Tipo XXIII para patrullar en la costa este inglesa, confirmando las esperanzas abrigadas. En virtud de su alta velocidad sumergidos, arribaron fácilmente al área de ataque y luego se retiraron a gran velocidad sin ser localizados por las contramedidas de los Aliados. El Alto Mando de la Kriegsmarine tenía gran confianza en este nuevo tipo de U-Boot. Esto se aplica igualmente al Tipo XXI. Un número cada vez mayor de ambos tipos deberían operar contra los Aliados en los próximos meses. Al final de la guerra el 7 de mayo, del Tipo XXII 6 estaban en servicio, 53 habían sido botados y 900 en construcción o bajo pedido.  Asimismo, del Tipo XXI 30 estaban en proceso de formación y entrenamiento, 121 habían sido botados y otros 1.000 estaban en construcción o bajo pedido.

    Capítulo VI: La Manada de Lobos.

     

    En 1940, para neutralizar la técnica del uso de convoyes escoltados de los Aliados, el Almirante Dönitz propuso una táctica de ataques sincronizados y simultáneos bautizada por él mismo como Rudeltaktik, traducida al castellano como "La Manada de Lobos", mediante el cual se daba el control táctico dado al oficial superior del grupo.

    Los primeros resultados no fueron demasiado alentadores, pero la situación mejoró en la medida que aumentaba el número y las tácticas de la Manada de Lobos se volvían más efectivas, hasta que los Aliados corrieron el peligro de que las rutas de suministro del Atlántico se cortaran de forma permanente.

    Dicha técnica, que estuvo vigente hasta mayo de 1945, consistía en dispersar a todos los U-Boote por las rutas de navegación utilizadas por los convoyes aliados y cuando uno de ellos en patrulla contactara un convoy, perseguiría al mismo e informaría su rumbo y velocidad al Befehlshaber der Unterseeboote[85], abreviado como B.d.U.

    A continuación, el B.d.U, que conocía las posiciones diarias de los U-Boote, coordinaba la operación contra el convoy detectado, ordenando a los más cercanos que se formaran alrededor del mismo y atacaran los buques en la noche, lo que hacía más fácil hundir un objetivo específico. 

    La táctica consistía en que si el ataque de los U-Boote se producía en grupo, por la noche, en superficie y de forma coordinada, se podría saturar la escolta de los convoyes, hundiendo así los buques mercantes Aliados. Una vez finalizado el ataque y aprovechando la confusión, los U-Boote podrían esquivar el contraataque de los buques escolta y evadirse. Así, mediante la interrupción del tráfico marítimo mercante y aún sin disputar el dominio del mar a los británicos, Alemania podría ganar la guerra. por lo tanto, el empleo del submarino de forma tácticamente novedosa posibilitaría a los alemanes transformar una desventaja, como era su inferioridad naval, en una gran oportunidad.

    El Almirante Dönitz, conocedor de los principios de la guerra, estimó que los submarinos serían más eficaces cuanto mayor fuese su número, el problema era que su velocidad debía ser superior a la del convoy para poder llevar a cabo la concentración, lo que hacía que esta táctica fuera mucho más eficaz en convoyes lentos. En el momento del ataque cada U-Boot actuaba libremente y no había un mando táctico local.

    Al inicio de la guerra, los U-Boote tuvieron poca capacidad operativa motivado al escaso número de unidades por lo que no eran suficientes para llevar a cabo los ataques a los convoyes, por ello únicamente atacaban cuando sabían que podían enviar su presa al fondo del mar.

    Las primeras batallas de convoyes se libraron principalmente por grupos ad-hoc en que los Comandantes de los U-Boote experimentados como Prien, Schepke y Kretschmer actuaron libremente.

    A principios de 1941, al incrementarse el número de U-Boote en operaciones, las "Manadas de Lobos" entraron en acción, aunque en forma incipiente.

    La táctica de la manada de Dönitz preveía una línea de patrulla de 6 a 10 U-Boote (más tarde, de 20 a 30 o más) a través de la ruta de un convoy aliado para buscar objetivos.

    En 1942, las operaciones de los convoyes en el Atlántico Norte se detuvieron con la que la introducción de un sistema de escoltas, lo que hizo que los U-Boote fueran dirigidos a cotos de caza más fáciles frente a la costa este de los Estados Unidos y el Caribe, en donde actuaron en patrulla individual. Mientras tanto, las operaciones de las Manadas de Lobos en el Océano Ártico contra los convoyes en la ruta de Múrmansk recién comenzaban y continuaron hasta casi el último día de la guerra.

    En el Atlántico Sur y el Océano Índico, un pequeño número de U-Boote activos vieron nuevamente el empleo del enfoque del lobo solitario en las rutas individuales de los Aliados.

    A mediados de 1942, las operaciones de la Manada de Lobos en el Atlántico se iniciaron de nuevo y fueron cada vez más exitosas, culminando en las mayores batallas de convoyes en marzo de 1943.

    Aunque las Manadas de Lobos demostraron ser una seria amenaza para la navegación para los Aliados, estos desarrollaron contramedidas como los grupos de escolta bien entrenados y organizados, que conllevaron a más éxitos en la medida que avanzaba la campaña. Una y otra vez, los grupos de escolta pudieron luchar contra manadas numéricamente superiores y destruir a los atacantes, hasta que la tasa de cambio se volvió ruinosa. Además, una cobertura aérea efectiva, tanto aviones de largo alcance con radar, como portadores de escolta y dirigibles, permitió que los U-Boote fueran vistos mientras seguían a un convoy.

    Las operaciones contra los convoyes tuvieron que ser detenidas por el BdU después de numerosas bajas en mayo de 1943.

    Posteriormente, las operaciones de la Manada de Lobos se reanudaron con los U-Boote equipados con torpedos autoguiados G7es (T5) Zaunkönig, armamento antiaéreo más pesado y dispositivos de detección de radar, pero las pérdidas seguían siendo altas y las operaciones en el Atlántico Norte tuvieron que cesar en marzo de 1944 hasta que nuevos submarinos Tipo XXI estuvieron disponibles.

    En esta última fase de la guerra entre 1944 y 1945, las Manadas de Lobos a menudo tenían huecos en sus líneas de patrulla porque los U-Boote habían sido hundidos por los Aliados y el BdU no estaba al tanto de ello, debido al silencio de radio utilizado y muchas veces se enviaban órdenes a aquellos que se habían perdido hace semanas.

    Ahora bien, la Manada de Lobos tuvo varios inconvenientes siendo el más importante que requería radio comunicación para coordinar los ataques. Esto dejó a los U-Boote vulnerables a un dispositivo de los Aliados llamado Buscador de dirección de alta frecuencia HF-DF, conocido como “Huff-Duff”, lo que permitió a las fuerzas navales de los Aliados determinar la ubicación de los U-Boote que transmitían y atacarlos.

    Por otro lado, la táctica de la Manada de Lobos generaba una concentración de fuerza contra un convoy, pero ninguna táctica para desarrollar ataques coordinados ya que cada comandante de U-Boot presente se debería desplazar contra el convoy como mejor le pareciera. Esto significó que los buques escoltas del convoy Aliado que desarrollaron tácticas de grupo contra el ataque de los U-Boote obtuvieron una ventaja.

    De igual manera, en la medida que el número de Manadas de Lobos se incrementaron, aumentaron los riesgos por la mencionada falta de coordinación, como ataques superpuestos, colisiones o incidentes de fuego amigo. Como ejemplo podemos reseñar que el 4 de mayo de 1943 dos U-Boote acechando un convoy de Gibraltar, el U-439 y el U-659 colisionaron al oeste de Cabo Finisterre[86], en la posición 43º 19´ 12” N, 13º 12´ 00” W, con el hundimiento de ambos y la muerte de casi toda la tripulación.

    Referente a los nombres asignados a las Manadas de Lobos podemos señalar que fue a partir del verano de 1941 que hubo múltiples grupos de patrullas, siendo necesario diferenciarlos entre ellos. Al principio esto fue por ubicación (Oeste, Centro, Sur, Groenlandia, etc.) pero en agosto de ese año el BdU comenzó a asignar nombres en clave, elegidos por su valor histórico o cultural. Esto continuó hasta el final de la campaña. De los grupos que formaban líneas de patrulla, no todos encontraron convoyes o pudieron formar manadas si lo hacían.

    Cuando un grupo con nombre se conformó y realizó un ataque de manada a un determinado convoy, es apropiado referirse a él por su nombre como Manada de Lobos.

    Durante la guerra se conformaron 248 Mandas de Lobos, algunos duraron solo pocos días y otros hasta unas pocas semanas.

    El número de U-Boote en cada Manada de Lobos osciló entre 3 y 4, alrededor de 20 en los grupos más grandes y 34 los más numerosos.

    “West” fue la Manada de Lobos más exitosa de la Segunda Guerra Mundial, la cual entre el 8 de mayo de 1941y el 20 de junio de 1941 con 23 U-Boote, fue responsable de hundir 33 buques mercantes para un total de 191.414 toneladas y dañar otros 4 buques para un total de 33.448 toneladas.

    Entre las Manadas de Lobos más numerosas podemos destacar a “Phanter” con 34 U-Boote del 6 de octubre al 20 de octubre de 1942 que hundió 3 buques mercantes (2 británicos y 1 estadounidense), para un total de 16.081 toneladas y el “Meise” con 34 U-Boote del 11 de abril de 1943 al 27 de abril de 1943 que hundió 5 buques (3 británicos, 1 noruego y 1 estadounidense) para un total de 30.822 toneladas y daño severamente 2 buques mercantes británicos para un total de 10.799 toneladas.

    A continuación, se indican el número de Manadas de Lobos conformadas por años:

    Año

    Manadas de Lobos

    Fecha de Inicio

    Fecha de Finalización

    1940

      2

    12-Junio-1940

    15-Junio-1940

    1941

    26

    4-Mayo-1941

    16-Enero-1942

    1942

    64

    6-Enero-1942

    19-Enero-1943

    1943

    116

    10-Enero-1943

    2-Enero-1944

    1944

    36

    1-Enero-1944

    8-Enero-1945

    1945

      4

    6-Febrero-1945

    1-May-1945

    Total…

    248

     

     

    Por otro lado, las acciones o batallas llevadas a cabo por las Manadas de Lobos, que podían durar varios días, se realizaban contra convoyes Aliados conformados entre 60 y 80 buques, algunos miles de hombres luchando por el transporte marítimo y los bienes por valor de varios cientos de millones de dólares, de hecho, había mucho en juego.

    Cabe destacar que existieron más de 200 rutas de convoyes de los Aliados en la Segunda Guerra Mundial. Cada convoy se conocía por dos o más letras, lo que generalmente significa los puertos de salida y destino, es decir, los convoyes AB navegaban de Adén a Bombay y los convoyes BA regresaban de Bombay a Adén. Pero también se usaron la H para el hogar y la O para el exterior, es decir, HX significaba “Hogar de Halifax”. Las letras también se utilizaron para indicar la velocidad del convoy. Los convoyes HX eran siempre rápidos y los SC lentos.

    Después del mes de mayo de 1943, cuando se perdieron 41 U-Boote debido a la mejora constante de la guerra antisubmarina (ASW) por parte de los Aliados, las Manadas de Lobos eran realmente una cosa del pasado y la mayoría de los U-Boote se enfrentaron a los convoyes por su cuenta y tuvieron que lidiar con los buques escoltas en solitario.

    Las batallas más importantes en las que participaron las “Manadas de Lobos” contra convoyes Aliados entre 1940 y 1944 fueron las siguientes:

    Convoy

    Fecha

    U-Boote

    Pérdidas

    Año 1940

    HX-65

    24 Ago 1940  

    5 U-Boote

    ·  1 Buque hundido con un total de 6.665 toneladas

    HX-65A

    24 Ago 1940  

    4 U-Boote

    ·  4 Buques hundidos con un total de 23.151 toneladas

    HX-65B

    24 Ago 1940  

    1 U-Boot

    ·  1 Buque hundido con un total de 7.468 toneladas

    HX-72

    20 Sep 1940  

    9 U-Boote

    ·  11 Buques hundidos con un total de 72.727 toneladas

    SC-7

    16 Oct 1940  

    7 U-Boote

    ·  20 Buques hundidos con un total de 79.592 toneladas

    HX-79

    19 Oct 1940  

    5 U-Boote

    ·  12 Buques hundidos con un total de 75.069 toneladas

    HX-90

    1 Dic 1940  

    7 U-Boote

    ·  11 Buques hundidos con un total de 73.958 toneladas

    Año 1941

    HX-112

    15 Mar 1941  

    5 U-Boote

    ·  5 Buques hundidos con un total de 34.505 toneladas

    HX-115

    29 Mar 1941  

    1 U-Boot

    ·  3 Buques hundidos con un total de 13.032 toneladas

    SC-26

    1 Abr 1941  

    8 U-Boote

    ·  10 Buques hundidos con un total de 51.969 toneladas

    OB-318

    7 May 1941  

    4 U-Boote

    ·  9 Buques hundidos con un total de 50.985 toneladas

    HX-126

    19 May 1941

    11 U-Boote

    ·  9 Buques hundidos con un total de 51.862 toneladas

    OG-69

    24 Jul 1941  

    8 U-Boote

    ·  7 Buques hundidos con un total de 11.303 toneladas

    OG-71

    17 Ago 1941  

    8 U-Boote

    ·  10 Buques hundidos con un total de 15.185 toneladas

    SC-42

    9 Sep 1941  

    19 U-Boote

    ·  16 Buques hundidos con un total de 68.259 toneladas

    HG-73

    19 Sep 1941  

    5 U-Boote

    ·  10 Buques hundidos con un total de 25.818 toneladas

    SC-48

    15 Oct 1941  

    9 U-Boote

    ·  11 Buques hundidos con un total de 49.835 toneladas

    HG-76

    16 Dic 1941  

    10 U-Boote

    ·  4 Buques hundidos con un total de 18.383 toneladas

    Año 1942

    NA-2

    31 Ene 1942  

    4 U-Boote

    · 1 Buque hundido con un total de 1.190 toneladas

    ONS-67

    21 Feb 1942  

    6 U-Boote

    · 8 Buques hundidos con un total de 54.750 toneladas

    PQ-13

    28 Mar 1942  

    9 U-Boote

    · 2 Buques hundidos con un total de 11.507 toneladas

    ONS-92

    11 May 1942

    6 U-Boote

    · 7 Buques hundidos con un total de 36.284 toneladas

    AT-46

    20 May 1942

    1 U-Boot

    · 1 Buque hundido con un total de 4.216 toneladas

    ONS-100

    8 Jun 1942  

    6 U-Boote

    · 5 Buques hundidos con un total de 20.478 toneladas

    PQ-17

    1 Jul 1942  

    9 U-Boote

    · 16 Buques hundidos con un total de 102.311 toneladas

    ON-115

    29 Jul 1942  

    12 U-Boote

    · 3 Buques hundidos con un total de 21.456 toneladas

    SC-94

    5 Ago 1942  

    17 U-Boote

    · 11 Buques hundidos con un total de 53.421 toneladas

    WAT-13

    13 Ago 1942  

    1 U-Boot

    · 1 Buque hundido con un total de 1.311 toneladas

    ONS-122

    22 Ago 1942  

    14 U-Boote

    · 4 Buques hundidos con un total de 17.235 toneladas

    ON-127

    9 Sep 1942  

    12 U-Boote

    · 8 Buques hundidos con un total de 51.619 toneladas

    PQ-18

    12 Sep 1942  

    5 U-Boote

    · 3 Buques hundidos con un total de 19.689 toneladas

    SC-100

    18 Sep 1942  

    17 U-Boote

    · 5 Buques hundidos con un total de 26.331 toneladas

    QP-14

    20 Sep 1942  

    7 U-Boote

    · 6 Buques hundidos con un total de 23.474 toneladas

    SC-104

    12 Oct 1942  

    17 U-Boote

    · 8 Buques hundidos con un total de 43.970 toneladas

    HX-212

    26 Oct 1942  

    13 U-Boote

    · 6 Buques hundidos con un total de 51.918 toneladas

    SL-125

    27 Oct 1942  

    10 U-Boote

    · 12 Buques hundidos con un total de 80.005 toneladas

    SC-107

    30 Oct 1942  

    16 U-Boote

    · 15 Buques hundidos con un total de 82.817 toneladas

    ONS-144

    15 Nov 1942  

    13 U-Boote

    · 6 Buques hundidos con un total de 26.321 toneladas

    ON-153

    15 Dic 1942  

    13 U-Boote

    · 4 Buques hundidos con un total de 19.551 toneladas

    ONS-154

    26 Dic 1942  

    19 U-Boote

    · 14 Buques hundidos con un total de 69.893 toneladas

    Año 1943

    TM-1

    3 Ene 1943  

    14 U-Boote

    ·   7 Buques hundidos con un total de 56.453 toneladas

    SC-118

    4 Feb 1943  

    20 U-Boote

    ·   11 Buques hundidos con un total de 59.765 toneladas

    ON-166

    21 Feb 1943  

    19 U-Boote

    ·   14 Buques hundidos con un total de 88.001 toneladas

    UC-1

    22 Feb 1943  

    11 U-Boote

    ·   3 Buques hundidos con un total de 26.682 toneladas

    SC-121

    6 Mar 1943  

    26 U-Boote

    ·   12 Buques hundidos con un total de 55.661 toneladas

    HX-228

    10 Mar 1943  

    19 U-Boote

    ·   5 Buques hundidos con un total de 25.515 toneladas

    UGS-6

    12 Mar 1943  

    17 U-Boote

    ·   4 Buques hundidos con un total de 28.018 toneladas

    HX-229

    16 Mar 1943  

    43 U-Boote

    ·   13 Buques hundidos con un total de 93.502 toneladas

    SC-122

    17 Mar 1943  

    43 U-Boote

    ·   9 Buques hundidos con un total de 53.094 toneladas

    RS-3

    27 Mar 1943  

    7 U-Boote

    ·   3 Buques hundidos con un total de 15.389 toneladas

    HX-231

    4 Abr 1943  

    11 U-Boote

    ·   6 Buques hundidos con un total de 41.494 toneladas

    ONS-5

    28 Abr 1943  

    55 U-Boote

    ·   13 Buques hundidos con un total de 61.958 toneladas

    TS-37

    30 Abr 1943  

    1 U-Boot

    ·   7 Buques hundidos con un total de 43.255 toneladas

    Año 1944

    JW-56A

    25 Ene1944  

    4 U-Boote

    ·  4 Buques hundidos con un total de 21.584 toneladas

    Los ataques más exitosos realizados por un solo U-Boot, integrante de una Manada de Lobos, a un convoy Aliado fueron los siguientes:

    Convoy

    U-Boot

    Comandante

    Buques Hundidos

    Toneladas

    Fecha de la Batalla

    1

    OB-188

    U-34

    Kptlt. Wilhelm Rollmann

    4

    29.320

    26-27 Jul 1940

    2

    OB-216

    U-138

    Oblt. Wolfgang Lüth

    4

    34.644

    20-21 Sep 1940

    3

    HX-72

    U-100

    Kptlt. Joachim Schepke

    7

    50.340

    21-22 Sep 1940

    4

    SC-7

    U-99

    Kptlt. Otto Kretschmer

    6

    27.396

    18-19 Oct 1940

    5

    HX-90

    U-99

    Kptlt. Otto Kretschmer

    2

    24.778

    2-3 Dic 1940

    6

    HX-92

    U-96

    Kptlt. Heinrich Lehmann-Willenbrock

    4

    26.111

    11-12 Dic 1940

    7

    OB-293

    U-99

    KrvKpt. Otto Kretschmer

    2

    27.206

    7 Mar 1941

    8

    HX-112

    U-99

    KrvKpt. Otto Kretschmer

    5

    34.505

    16 Mar 1941

    9

    SL-68

    U-105

    Kptlt. Georg Schewe

    5

    27.890

    18-21 Mar 1941

    10

    HX-121

    U-96

    Kptlt. Heinrich Lehmann-Willenbrock

    3

    27.305

    28 Abr 1941

    11

    PQ-17

    U-255

    Kptlt. Reinhart Reche

    4

    25.544

    6-13 Jul 1942

    12

    SC-104

    U-221

    Oblt. Hans-Hartwig Trojer

    16

    30.492

    13-14 Oct 1942

    13

    HX-212

    U-624

    Oblt. Ulrich Graf von Soden-Fraunhofen

    5

    25.540

    29 Oct 1942

    14

    TAG-18

    U-160

    Kptlt. Georg Lassen

    4

    25.855

    3 Nov 1942

    15

    UGF-1

    U-130

    KrvKpt. Ernst Kals

    3

    34.407

    12 Nov 1942

    16

    MKF-1Y

    U-155

    Kptlt. Adolf Cornelius Piening

    2

    25.064

    15 Nov 1942

    17

    SC-118

    U-402

    Kptlt. Siegfried Freiherr von Forstner

    6

    32.446

    7-8 Feb 1943

    18

    DN-21

    U-160

    Kptlt. Georg Lassen

    4

    25.852

    3-4 Mar 1943

    19

    TS-37

    U-515

    Kptlt. Werner Henke

    7

    43.255

    30 Abr-1 May 1943

    20

    PA-69

    U-510

    Oblt. Alfred Eick

    3

    26.536

    22 Feb 1944

    El Kptlt. Otto Kretschmer con el U-99 aparece 4 veces en esta lista de los ataques más exitosos realizados por un solo submarino a los convoyes Aliados con un total de 15 buques hundidos. La mayoría de sus hundimientos fueron a convoyes, a diferencia de otros que principalmente cazaban buques que navegaban solos.

    Los ataques realizados a los convoyes Aliados por Oblt. Werner Henke con el U-515, Korvkpt. Ernst Kalss con el U-130, Oblt. Georg Lassen con el U-160 y Kptlt. Adolf Cornelius Piening con el U-155 con los submarinos Tipo IXC más grandes y menos ágiles a finales de 1942 y principios de 1943 son muy impresionantes.

    El Oblt. Hans-Hartwig Trojer con el U-221 tiene aparentemente una cifra increíblemente alta de 16 buques hundidos.

     

     

     

     

     

    Capítulo VII: Los submarinos alemanes en el mar Caribe los años 1942 y 1943.

     

    En diciembre de 1941 el almirante Karl Dönitz propuso a Adolf Hitler que destinase una parte de sus U-Boote a incursionar en el otro lado del Atlántico por cuanto muchos de los suministros que recibían los británicos por el Atlántico Norte tenían su origen en los Estados Unidos y Suramérica. Además, el mar Caribe, conocido también como el Mar de las Antillas, estaba desprotegido tanto en sus defensas aéreas como antisubmarinas, por lo tanto, era un área vulnerable que debía aprovecharse.

    Es así como meses después que los Estados Unidos entrara en las hostilidades de la Segunda Guerra Mundial, Alemania desplazó el centro de operaciones de los U-Boote más hacia el sur, hacia el Golfo de México y el mar Caribe.

    El mar Caribe fue una de las áreas más importantes en las que se combatió en toda la guerra de los U-Boote. En mayo de 1942, los submarinos alemanes comenzaron a hundir buques mercantes y tanqueros en estas aguas a un ritmo alarmante. Aquí vieron la oportunidad de estrangular literalmente el esfuerzo de guerra aliado cortando la línea de suministro vital de petróleo y bauxita.

    Dönitz obtuvo una ventaja para sus fuerzas al trasladarlas al Caribe que mejoraba de manera importante la capacidad de supervivencia de los U-Boote y es que las unidades de la Armada de los Estados Unidos recién desplegadas para combatir en el área no habían participado anteriormente en la guerra antisubmarina y carecían de organización y experiencia.

    Debemos resaltar, desde una perspectiva geográfica, el mar Caribe es un mar abierto en el océano Atlántico tropical, situado al este de América Central y al norte de América del Sur, cubriendo la superficie de la placa del Caribe. También es llamado mar de las Antillas por estar ubicado al sur y al oeste del arco antillano.

    El Caribe proporcionó algo más que una nueva área de operaciones, pues los alemanes identificaron una vulnerabilidad crítica para los aliados ya que el mismo estaba relacionada con el traslado del petróleo alrededor del Golfo de México y el estrecho de Florida. En consecuencia, la destrucción de los buques petroleros era una prioridad importante y tendría un impacto significativo en la industria estadounidense en general y en el programa de la construcción naval.

    La geografía del Caribe, a diferencia del Atlántico Norte, proporcionaba numerosos puntos de estrangulamiento naturales, solventando uno de los mayores problemas de los U-Boote como fue la adquisición de los objetivos. Estos puntos de estrangulamiento fueron muy bien patrullados por los U-Boote y la mayoría de los hundimientos se produjeran en las entradas de los principales puertos petroleros, los pasos de las islas y en la ruta hacia o desde el Canal de Panamá.

    La selección de los primeros oficiales al mando de submarinos alemanes enviados al Caribe fue de gran valor. La mayoría eran hombres que habían sido tripulantes en la Marina Mercante alemana y estaban familiarizados con muchos de los puertos y pasajes del Caribe que ahora patrullaban. Esto les dio la confianza para acercarse a las entradas de los puertos poco profundos y, en algunos casos, entrar en los mismos.

    Por otro lado, los submarinos nodrizas o de reabastecimiento Tipo XIV, conocidos como “Vacas Lecheras”, disponían de combustible, recambios mecánicos, torpedos y munición, para proveer a los U-Boote que cruzaban el Atlántico para dirigirse a lejanas zonas de patrullaje, jugaron un papel preponderante en esta contienda. Este tipo de submarinos con una capacidad logística innovadora, pudieron transitar hacia el Caribe lo cual permitió que incluso los U-Boote más pequeños del Tipo II, con alcance limitado pudieran realizar varias semanas de patrullaje en el Caribe, aumentando efectivamente el número total de unidades disponibles para las operaciones. Además, los U-Boote que habían agotado su suministro de torpedos al principio de sus patrullas, entregaron el exceso de combustible a otros submarinos antes de regresar a sus bases.

    Hay que subrayar que casi todo el petróleo proveniente del lago de Maracaibo en Venezuela llegaba a Aruba y Curazao para ser refinado. Cuando esto no era posible se refinaba en Trinidad. Una vez refinado, los derivados se transportaban a Estados Unidos, Canadá o Reino Unido. En promedio, unos 500.000 barriles llegaban a Aruba y Curazao cada cuatro días desde los terminales petroleros del Lago de Maracaibo.

    Para la época, en Aruba estaban ubicadas dos de las refinerías de petróleo más grandes del mundo durante la guerra, Arend Petroleum Maatschappij situada cerca del puerto de Oranjestad y Lago Oil and Transport Company en el puerto de San Nicolás. La refinería de petróleo Royal Dutch Shell en Curazao de propiedad holandesa, que procesaba once millones de barriles por mes, era la más grande del mundo y la refinería de Pointe-à-Pierre en Trinidad era la más grande del Imperio Británico.

    Ante este panorama se desarrolla una fase de la guerra marítima con los U-Boote en el mar Caribe la cual se denominó Operación “Neuland” (En castellano Operación Tierra Nueva), la cual se realizó del 16 de febrero al 16 de marzo de 1942. Dicha operación tenía como objetivo primordial hundir los buques tanqueros cargados con petróleo venezolano que llegaban a las refinerías ubicadas en las islas de Aruba, Curazao y Trinidad, para cortar el suministro de combustible y lubricantes a Estados Unidos, Canadá y Reino Unido. Asimismo, destruir los buques que trasladaban bauxita desde las Guyanas y Brasil hacia los centros de procesamiento en la costa este de Estados Unidos para obtener aluminio.

    El inicio de la Operación Neuland fue la noche del 15 al 16 de febrero de 1942 cuando tres U-Boote atacaron en el lapso de tres horas en el Golfo de Venezuela, en Aruba y en Curazao, hundiendo buques tanqueros y bombardeando las refinerías.

    El primer U-Boot en atacar con éxito la navegación en esta área fue el U-502, bajo el mando de Jürgen von Rosenstiel, hundiendo el buque tanquero de bandera británica “Tia Juana“, luego hundiendo el tanquero de bandera venezolana “Monagas” y finalmente hundiendo el tanquero de bandera británica “San Nicolas”. Los U-Boote U-156 y U-67 cañonearon a su vez las refinerías de Aruba y Curazao.

    El 16 de febrero de 1942 el U-156, bajo el mando de Werner Hartenstein, hundió el buque tanquero de bandera británica “Oranjestad” y el buque tanquero de bandera estadounidense “Arkansas”. Asimismo, dañó el buque tanquero de bandera británica “Pedernales”. Por otro lado, ese mismo día el U-67 bajo el mando de Günther Müller-Stöckheim, dañó el buque tanquero de bandera holandesa “Rafaela”.

    En la tarde del 18 de febrero otro submarino atacó la base de la Armada norteamericana de Chaguaramas en Trinidad. En los días siguientes entre el 21 y 23 de febrero de 1942 otros dos U-Boote hundieron buques al este de Trinidad y en el área ubicada entre Bahamas y Cuba.

    Los ataques de los U-Boote en los días sucesivos provocaron la interrupción inmediata del transporte marítimo hacia Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, así como el tránsito de los buques petroleros entre el Lago de Maracaibo y las refinerías en Aruba y Curazao.

    La Operación Neuland duró solo 28 días y conllevó a que los U-Boote impactaran a 39 buques de diferentes nacionalidades, además del bombardeo de refinerías de Aruba y Curazao. De ellos fueron hundidos 34 buques y 5 dañados.

    A continuación, se indica una relación de los buques impactados durante la Operación Neuland:

     

     

    Tipo de Buque

    Hundidos

    Dañados

    Buques Tanqueros.

    14

    04

    Buques de Pasajeros.

    01

    -

    Buques de Carga General.

    17

    01

    Buque-Factoría de pesca.

    01

    -

    Buque de la Guardia Costera de Estados Unidos.

    01

    -

    Total…

    34

    05

    De igual manera, la relación de buques hundidos y dañados en la Operación Neuland por cada U-Boot es la siguiente:

    U-Boot

    Comandante

    Hundidos

    Dañados

    U-67

    Günther Müller-Stöckheim

    2

    1

    U-126

    Ernst Bauer

    6

    2

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    7

    -

    U-156

    Werner Harstenstein

    5

    2

    U-161

    Albrecht Achilles

    8

    -

    U-502

    Jürgen von Rosenstiel

    5

    -

    U-504

    Hans-Georg Friedrich Poske

    1

    -

     

    Total…

    34

    05

    La relación de los buques impactados por los U-Boote durante la Operación Neuland en el área del Caribe es la siguiente:

    Fecha

    U-Boot

    Comandante

    Buque Impactado

    1

    16-2-1942

    U-502

    Jürgen von Rosenstiel

    El buque tanquero de bandera británica Tia Juana en la ruta Lago de Maracaibo (Venezuela)-Aruba con carga de crudo (2.395 TRB) hundido en posición aproximada 11° 50'N y 70° 30'W.

    17muertos y 9 sobrevivientes.

     

     

     

    2

    16-2-1942

    U-502

    Jürgen von Rosenstiel

    El buque tanquero de bandera venezolana Monagas con carga de derivados de petróleo (2.650 TRB) en la ruta Maracaibo (Venezuela)-Aruba hundido en posición aproximada 12° 03'N y 70° 25'W.

    5 muertos y 26 sobrevivientes

    3

    16-2-1942

    U-502

    Jürgen von Rosenstiel

    El buque de tanquero de bandera británica San Nicolás con carga de crudo (2.391 TRB en la ruta Lago de Maracaibo (Venezuela)-Aruba hundido en la posición aproximada 12° 01'N y 70° 30'W.

    7 muertos y 19 sobrevivientes.

    4

    16-2-1942

    U-156

    Werner Harstenstein

    El buque tanquero de bandera británica Pedernales en la ruta Maracaibo (Venezuela)-Aruba con carga de crudo (4.317 TRB) dañado en posición aproximada 12° 25'N y 69° 55'W.

    8 muertos y 18 sobrevivientes.

    5

    16-2-1942

    U-67

    Günther Müller-Stöckheim

    El buque tanquero de bandera holandesa Rafaela con carga de crudo (3.177 TRB) en la ruta Lago de Maracaibo (Venezuela)-Curazao dañado en posición aproximada 12° 06'N y 68° 58'W.

    Se desconoce la cantidad de muertos y sobrevivientes.

    6

    16-2-1942

    U-156

    Werner Hartenstein

    El buque tanquero de bandera británica Oranjestad con carga de crudo (2.396 TRB) en la ruta Maracaibo (Venezuela)-Aruba hundido en la posición aproximada 12° 25'N y 69° 55'W en la ruta Lago de Maracaibo (Venezuela)-Aruba.

    15 muertos y 10 sobrevivientes.

    7

    16-2-1942

    U-156

    Werner Hartenstein

    El buque tanquero de bandera estadounidense Arkansas el cual iba vacío (6.452 TRB) en la ruta Santos (Brasil)-Aruba dañado en posición aproximada 12° 30'N y 70° 00'W.

    0 muertos y 37 sobrevivientes.

    8

    19-2-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque tanquero de bandera británica British Consul con carga de fuel oil (6.940 TRB) hundido en Puerto España (Trinidad) en posición aproximada 10°37N y 61°34W.

    2 muertos y 40 sobrevivientes.

    9

    19-2-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque tanquero de bandera estadounidense Mokihana con 7.300 toneladas de material de guerra (7.460 TRB) hundido en Puerto España (Trinidad) en posición aproximada 10° 38’N y 60° 30’W.

    0 muertos y 45 sobrevivientes.

    10

    20-2-1942

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera noruega Nordvangen con carga de bauxita (2.400 TRB) hundido en la ruta Paramaribo (Guyana Holandesa)-Trinidad-New Orleans en la posición aproximada 10° 50'N y 60° 54'W.

    24 muertos y 0 sobrevivientes.

    11

    20-2-1942

    U-156

    Werner Hartenstein

    El buque mercante de bandera estadounidense Delplata con 6.100 toneladas de carga general (5.127 TRB) hundido en la ruta Rio de Janeiro (Brasil)-St. Thomas (Islas Vírgenes) en la posición aproximada 14° 55'N y 62° 10'W.

    0 muertos y 53 sobrevivientes.

    12

    20-2-1942

    U-67

    Günther Müller-Stöckheim

     

    El buque tanquero de bandera noruega Kongsgaard con 15.600 toneladas de crudo liviano (9.467 TRB) hundido en la ruta Puerto La Cruz (Venezuela)-Curazao-Aruba en la posición aproximada 12° 23'N y 69° 16'W.

    37 muertos y 9 sobrevivientes.

    13

    22-2-1942

    U-502

    Jürgen von Rosenstiel

    El buque tanquero de bandera estadounidense J.N. Pew con 104.270 barriles de fuel oil (9.033 TRB) hundido en la ruta Aruba-Canal de Panamá en la posición aproximada 12° 40'N y 74° 00'W.

    33 muertos y 3 sobrevivientes.

     

    14

    23-2-1942

     

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera canadiense George L. Torian con carga de bauxita (1.754 TRB) hundido en la ruta Paramaribo (Guyana Holandesa)-Trinidad en la posición aproximada 9° 13'N y 59° 04'W.

    15 muertos y 4 sobrevivientes.

    15

    23-2-1942

     

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera estadounidense West Zeda con carga parcial de mineral de cromo como lastre (5.658 TRB) hundido en la ruta Mombasa (Kenya)-Ciudad del Cabo (Sudáfrica)-Trinidad–Filadelfia (Estados Unidos) en la posición aproximada 9° 13'N y 59° 04'W.

    0 muertos y 35 sobrevivientes.

    16

    23-2-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque tanquero de bandera estadounidense Lihue con 5.000 toneladas de carga general y material de guerra (7.001 TRB) hundido en la ruta Nueva York (Estados Unidos)-Trinidad-Golfo Pérsico en la posición aproximada 14° 30'N y 64° 45'W.

    0 muertos y 45 sobrevivientes.

    17

    23-2-1942

    U-502

    Jürgen von Rosenstiel

    El buque tanquero de bandera panameña Thalia con carga de lastre (8.329 TRB) hundido en la ruta Nueva York (Estados Unidos-Hampton Roads (Estados Unidos)-Aruba en la posición aproximada 13° 00'N y 70° 45'W.

    1 muertos y 40 sobrevivientes.

    18

    23-2-1942

     

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera canadiense Lennox con carga de bauxita (1.904 TRB) hundido en la ruta Paramaribo (Guyana Holandesa)-Puerto España (Trinidad) en la posición 9° 15'N y 58° 30'W.

    2 muertos y 18 sobrevivientes.

    19

    25-2-1942

    U-156

    Werner Hartenstein

    El buque tanquero de bandera británica Le Carriere con lastre de agua (5.685 TRB) hundido en la ruta Nueva York (Estados Unidos)-Trinidad en la posición aproximada 16° 53'N y 67° 05'W.

    15 muertos y 26 sobrevivientes.

    20

    27-2-1942

    U-156

    Werner Hartenstein

    El buque mercante de bandera británica Macgregor con lastre de agua (2.498 TRB) hundido en la ruta Port Castries (St. Lucia)-Tampa (Estados Unidos) en la posición aproximada 19° 51'N y 69° 43'W.

    1 muertos y 30 sobrevivientes.

    21

    28-2-1942

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera panameña Bayou con carga de mineral de manganeso (2.605 TRB) hundido en la ruta Rio de Janeiro (Brasil)-Trinidad-Canadá en la posición 8° 08'N y 55° 14'W.

    24 muertos y 1 sobreviviente.

    22

    28-2-1942

    U-156

    Werner Hartenstein

    El buque tanquero de bandera estadounidense Oregon con 78.000 barriles de fuel oíl (7.017 TRB) hundido en la ruta Aruba-Melville (Estados Unidos) en la posición aproximada 20° 44'N y 67° 52'W.

    6 muertos y 36 sobrevivientes.

    23

    03-3-1942

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera estadounidense Mary con préstamo-arrendamiento de carga (5.104 TRB) hundido en la ruta Nueva York (Estados Unidos)-Puerto Rico-Suez en la posición 8° 25'N y 52° 50'W.

    1 muerto y 33 sobrevivientes.

    24

    05-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque mercante de bandera estadounidense Mariana con carga de azúcar (3.1104 TRB) hundido en la ruta Puerto Rico-Boston (Estados Unidos) en la posición 22° 14'N y 71° 23'W.

    36 muertos y 0 sobrevivientes.

    25

    07-3-1942

    U-129

    Asmus Nicolai Clausen

    El buque mercante de bandera estadounidense Steel Age con carga de mineral de manganeso (6.188 TRB) hundido en la ruta Calcuta (India)-Table Bay (Sudáfrica)-Trinidad-New Orleans (Estados Unidos) en la posición 6° 45'N y 53° 15'W.

    34 muertos y 1 sobreviviente.

     

    26

    07-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque mercante de bandera estadounidense Barbara con 4.015 toneladas de carga general (4.637 TRB) hundido en la ruta Baltimore (Estados Unidos)-Puerto Rico en la posición 20° 10'N y 73° 05'W.

    26 muertos y 59 sobrevivientes.

    27

    07-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque mercante de bandera estadounidense Cardonia con 81 toneladas de carga general (5.104 TRB) hundido en la ruta Ponce (Puerto Rico)-Guayabal (Cuba) en la posición 19° 53'N y 73° 27'W.

    1 muerto y 37 sobrevivientes.

    28

    07-3-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque-factoría de ballenas de bandera sudafricana Uniwaleco con 8.800 toneladas de fuel oil (9.755 TRB) hundido en la ruta Curazao-Trinidad-Freetown (Sierra Leona) en la posición aproximada 13° 23'N y 62° 04'W.

    18 muertos y 33 sobrevivientes.

    29

    08-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque tanquero de bandera panameña Esso Bolívar con 10.500 toneladas de agua dulce, 500 toneladas de carga general para comisariatos y carga en cubierta de cilindros de acetileno (10.339 TRB) dañado en la ruta New York (Estados Unidos)-Newport News (Estados Unidos)-Aruba en la posición 19° 38'N y 74° 38'W.

    8 muertos y 42 sobrevivientes.

    30

    09-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque tanquero de bandera panameña Hanseat con lastre de carga (8.241 TRB) hundido en la ruta New York (Estados Unidos)-Caripito (Venezuela) en la posición 20° 25'N y 74° 07'W.

    0 muertos y 38 sobrevivientes.

     

     

     

    31

    10-3-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque de pasajeros de bandera canadiense Lady Nelson con carga general y productos alimenticios (7.970 TRB) hundido en Port Castries (St. Lucia) cuando cumplía la ruta Port Castries-Georgetown (Guyana Británica) en la posición aproximada 14° 01'N y 61° 00'W.

    25 muertos y 210 sobrevivientes.

    32

    10-3-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque mercante de bandera británica Umtata con un cargamento de mineral de cromo, asbesto y carne (8.141 TRB) hundido en Port Castries (St. Lucia) cuando cumplía la ruta Durban (Sudáfrica)-Nueva York (Estados Unidos) en la posición aproximada 14° 01'N y 61° 00'W.

    37 muertos y 103 sobrevivientes

    33

    12-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque mercante de bandera estadounidense Olga con lastre de carga (2.496 TRB) hundido en la ruta New York (Estados Unidos)-Trinidad-Río de Janeiro (Brasil) en la posición 21° 34'N y 76° 28'W.

    10 muertos y 37 sobrevivientes.

    34

    12-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque mercante de bandera estadounidense Texan con 10.915 toneladas de carga general (7.005 TRB) hundido en la ruta Port Everglades (Estados Unidos)-Baracoa (Cuba) en la posición 21° 32'N y 76° 24'W.

    1 muerto y 33 sobrevivientes.

    35

    12-3-1942

    U-126

    Ernst Bauer

    El buque mercante de bandera estadounidense Colabee con 38,600 sacos de azúcar (5.518 TRB) dañado en la ruta Puerto Tarafa (Cuba)-Baltimore (Estados Unidos) en la posición 22° 10'N y 77° 30'W.

    24 muertos y 15 sobrevivientes.

     

     

    36

    14-3-1942

    U-67

    Günther Müller-Stöckheim

     

    El buque tanquero de bandera panameña Penélope con crudo liviano (8.436 TRB) hundido en la ruta Caripito (Venezuela)-Puerto España (Trinidad) en la posición aproximada 15° 00'N y 64° 20'W.

    2muertos y 47 sobrevivientes.

    37

    14-3-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque mercante de bandera canadiense Sarniadoc con un cargamento de bauxita (1.940 TRB) hundido en la ruta Georgetown (Guyana Británica)-Trinidad-St. Thomas (Islas Vírgenes) en la posición aproximada 15° 45'N y Y 65° 00'W.

    21 muertos y 0 sobrevivientes

    38

    15-3-1942

    U-161

    Albrecht Achilles

     

    El buque de la Guardia Costera de Estados Unidos para el mantenimiento de faros USCGC Acacia (WAGL 200) (1.130 TRB) hundido a 80 millas al suroeste de Saint Kitts and Nevis en la posición aproximada 16° 17'N y 63° 44'W.

    0 muertos y 35 sobrevivientes

    39

    16-3-1942

    U-504

    Hans-Georg Friedrich Poske

    El buque mercante de bandera británica Stangarth con carga general gubernamental (5.966 TRB) hundido en la ruta New York (Estados Unidos)-St. Thomas (Islas Vírgenes)-Ciudad del Cabo (Sudáfrica)-Bombay (India) en la posición aproximada 22° 40'N y 65° 20'W.

    46 muertos y 0 sobrevivientes

    Otra oleada de ataques en el mar Caribe fue realizada por la incursión de 5 submarinos italianos. Ellos fueron:

    ·      Luiggi Torelli, de la clase Marconi.

    ·      Da Vinci, de la clase Marconi.

    ·      Guiseppe Finzi, de la clase Calvi.

    ·      Enrico Tazzoli, de la clase Calvi.

    ·      Morsini, de la clase Marcello.

    El 25 de febrero de 1942 el submarino Luiggi Torelli hundió el tanquero de bandera panameña de 9.245 toneladas Esso Copenhagen en las costas de Florida y ese mismo día el submarino Da Vinci hundió al carguero de bandera brasileña de 3.557 toneladas Cabedelo, muriendo sus 57 tripulantes, lo que aceleró la entrada de la neutral Brasil en la guerra apenas seis meses después. El 28 de febrero el submarino Da Vinci hundió el Everasma, un carguero de bandera letona de 3.600 toneladas en el extremo oriental de Puerto Rico.

    Los U-Boote continuaron presentes en el Caribe y podemos destacar que el 19 de abril de 1942 el U-130, bajo el mando del Korvkpt. Ernst Kals, bombardeó con éxito la refinería de petróleo y el almacenamiento en la isla de Curazao con su cañón de cubierta de 105 mm.

    En la segunda mitad del año 1942, los U-Boote lanzaron otra ofensiva, esta vez contra el tráfico en las costas de Brasil.

    Se estima, de acuerdo con los historiadores, que hasta finales del año 1942 un 36% de todos los hundimientos de buques mercantes en el mundo se efectuaron en el Caribe.

    Ahora bien, tomando en consideración que, según el punto de vista alemán, el Golfo de México se consideró como parte del área de operación caribeña los U-Boote continuaron operando en dicha área durante el año 1943.

    A partir de junio de 1943 cambió la situación con el uso de nuevas técnicas de detección y el hundimiento de los submarinos nodriza alemanes Tipo XIV conocidos como Milchkuh“Vacas Lecheras”. Esto generó que los Aliados pudieron debilitar en forma decisiva las operaciones de los U-Boote en el espacio caribeño.

    Antes de que los U-Boote fueran expulsados del área del Caribe por patrullas antisubmarinas cada vez mayores, habían hundido entre los años 1942, 1943 y 1944 un total 319 buques por más de 1,500.000 de toneladas y dañado 46 más por 295,318 toneladas. El costo-beneficio de la operación fue favorable para Alemania pues únicamente perdió 15 U-Boote. Esto indica que la campaña caribeña entre los años 1942 y 1943 fue una de las más efectivas en términos de costos.

    La relación de los 15 U-Boote hundidos en el área del Caribe entre 1942 y 1943 es la siguiente:

     

     

     

    Año

    U-Boot

    Comandante

    Observación

    1

    1942

    U-157

    KrvKpt. Wolf Henne

    Tipo IXC. Hundido a las 21:50 horas del 13 de junio de 1942 en el Golfo de México al norte de La Habana (Cuba), en la posición 24º 07´48” N y 82º 01´48” W, por cargas de profundidad del UCGC Thetis de la Guardia Costera estadounidense.

    Sus 52 tripulantes fallecieron.

    2

    1942

    U-153

    FrgKpt. Wilfried Reichmann

    Tipo IXC. Hundido el 6 de julio de 1942 en el mar Caribe al noroeste de Aruba, en la posición 12º 30´ 00” N y 72 12 00.0 W, por cargas de profundidad de un avión estadounidense A-20 Havoc (59th BS USAAF/40-106).

    Sus 52 tripulantes fallecieron

    3

    1942

    U-166

    Oblt. Hans-Günther Kuhlmann

    Tipo IXC. Hundido el 30 de julio de 1942 en el Golfo de México al sureste de Nueva Orleans, en la posición 28º 23´ 60” N y 88º 17´ 60” 4W, por cargas de profundidad del patrullero estadounidense USS PC-566.

    Sus 52 tripulantes fallecieron.

    4

    1942

    U-654

    Oblt. Ludwig Forster

    Tipo VIIC. Hundido el 22 de agosto de 1942 en el al norte de Colón (Panamá), en el mar Caribe, posición 12º 00´ 00” N y 79º 33´ 36” W, por cargas de profundidad de un avión B-18 Bolo estadounidense (45th Bomb Sqn USAAF).

    Sus 44 tripulantes fallecieron.

    5

    1942

    U-94

    Oblt. Otto Ites

    Tipo VIIC. Hundido el 28 de agosto de 1942 en el mar Caribe al este de Jamaica, en la posición 17º 23´ 60” N y 74º 17´ 60” W, por cargas de profundidad de un avión Catalina estadounidense (VP-92 USN) y embestida por la corbeta canadiense HMCS Oakville.

    19 muertos y 26 sobrevivientes.

     

     

     

    6

    1942

    U-162

    FrgKpt. Jürgen Wattenberg

    Tipo IXC. Hundido el 3 de septiembre de 1942 en el Atlántico noreste de Trinidad, en la posición 12º 12´ 36” N y 59º 17´ 24” W, por cargas de profundidad de los destructores británicos HMS Vimy, HMS Pathfinder y HMS Quentin.

    2 muertos y 49 sobrevivientes.

    7

    1942

    U-512

    Kptlt. Wolfgang Schultze

    Tipo IXC. Hundido el 2 de octubre de 1942 en el Atlántico norte de Cayena, Guayana Francesa, en la posición 06º 30´ 00” N y 52º 15´ 00” W, por cargas de profundidad de un avión B-18 Bolo estadounidense (99th BS USAAF/71).

    51 muertos y 1 sobreviviente.

    8

    1943

    U-156

    Kptlt. Werner Hartenstein 

    Tipo IXC. Hundido a las 13.15 horas el 8 de marzo de 1943 en el Atlántico al este de Barbados, en la posición 12º 22´ 48” N y 54º 23´ 24” W, por cargas de profundidad de un avión Catalina estadounidense (VP-53 USN/P-1).

    Sus 53 tripulantes fallecieron.

    9

    1943

    U-176

    KrvKpt. Reiner Dierksen

    Tipo IXC. Hundido el 15 de mayo de 1943 en el Estrecho de Florida al noreste de La Habana, en la posición 23º 12´ 36” N y 80º 10´ 48” W, por cargas de profundidad del patrullero cubano CS 13.

    Sus 53 tripulantes fallecieron.

    10

    1943

    U-759

    Kptlt. Rudolf Friedrich

    Tipo VIIC. Hundido el 15 de julio de 1943 en el mar Caribe al sur de Haití, en la posición 15º 34´ 48” N y 73º 26´ 24” W, por cargas de profundidad de un avión Mariner de los Estados Unidos (VP-32 USN/P-10).

    Sus 47 tripulantes fallecieron.

    11

    1943

    U-359

    Oblt. Heinz Förster

    Tipo VIIC. Hundido el 26 de julio de 1943 en el mar Caribe al este de Jamaica, en la posición 18º 03´ 36” N y 75º 00´ 00” W, por cargas de profundidad de un avión Mariner de los Estados Unidos (VP-32 USN/P-12).

    Sus 47 tripulantes fallecieron.

     

    12

    1943

    U-159

    Oblt. Heinz Beckmann

    Tipo IXC. Hundido el 28 de julio de 1943 en el mar Caribe, al sureste de Haití, en la posición 15º 34´ 12” N y 68º 17´ 60” W, por cargas de profundidad de un avión Mariner de los Estados Unidos (VP-32 USN/P-1).

    Sus 53 tripulantes fallecieron.

    13

    1943

    U-572

    Kptlt. Heinz Hirsacker

    Tipo VIIC. Hundido el 3 de agosto de 1943 en el Atlántico norte al noreste de Trinidad, en la posición 11º 21´ 00” N y 54º.03´ 00” W, por cargas de profundidad de un avión Mariner de los Estados Unidos (VP-205 USN/P-6).

    14

    1943

    U-84

    Kptlt. Horst Uphoff

    Tipo VIIB. Hundido el 7 de agosto de 1943 en el Atlántico norte al suroeste de las Bermudas, en la posición 27º 33´ 00” N y 68º 17´ 60” W, por un torpedo autoguiado Fido de un avión US Liberator (VB-105 USN/B-4).

    Sus 46 tripulantes fallecieron.

    15

    1943

    U-615

    Kptlt. Ralph Kapitzky

    Tipo VIIC. Hundido el 7 de agosto de 1943 en el mar Caribe al noroeste de Granada, en la posición 12º 22´ 48” N y 64º 09´ 00” W, por cargas de profundidad de cinco US Mariner (VP-204 USN / P-6 & P-8, VP-205 USN / P -2, P-4 y P-11) y un avión Ventura estadounidense (VB-130 USN/B-5). Una batalla que duro una semana derribando un hidroavión Mariner y dañando a los otros.

    4  muertos y 43 sobrevivientes.

    Una de las pérdidas más dramáticas de los U-Boote aquí señaladas fue la del U-615, al mando del Kptlt. Ralph Kapitzky, que el 7 en agosto de 1943 después de combatir contra la aviación aliada durante 8 días, finalmente sucumbió a dichos ataques. Esa acción ayudó a muchos otros submarinos a escapar de la trampa en la que se había convertido el Caribe.

     

    Capítulo VIII: Los submarinos alemanes en las costas de Brasil.

     

    A partir del 15 de febrero de 1942, 21 U-Boote y 3 submarinos italianos comenzaron a torpedear buques de bandera brasileños en el océano Atlántico en represalia por la adhesión de Brasil a los compromisos de la Declaración de Panamá de fecha 3 de octubre de 1939 de la Primera Reunión de Consulta de los Ministros de Relaciones Exteriores de las Repúblicas Americanas, que preveía la alineación automática con cualquier nación del continente americano que fuera atacada por una potencia extracontinental, lo que hacía su neutralidad sólo teórica.

    Los mencionados ataques fueron responsables del hundimiento de 36 buques mercantes brasileños, provocando 1.074 muertos y fue el principal motivo que llevó a la declaración de guerra por parte del de Brasil a Alemania e Italia el 31 de agosto de 1942.

    Una vez que la guerra fue declarada, los buques de la Marina de Guerra de Brasil se sumaron a las fuerzas navales estadounidenses y británicas en la cacería de los submarinos alemanes e italianos en las costas de Brasil.  Numerosos aviones estadounidenses Hudson y Catalina despegaban desde bases en Brasil, para sumarse al patrullaje de las costas. 

    A fines de septiembre de 1942 Brasil puso a su Marina de Guerra bajo el Comando Operacional de la Marina de los Estados Unidos.

    A continuación, señalamos los primeros 20 buques mercantes atacados por submarinos alemanes e italianos:

    Fecha

    Nombre del buque

    Observación

    1

    15-2-1942

    Buarque

    Hundido por el U-432 al mando de Heinz Otto Schultze.

    2

    18-2-1942

    Olinda

    Hundido por el U-432 al mando de Heinz Otto Schultze.

    3

    25-2-1942

    Cabedelo

    Hundido posiblemente por el ataque del submarino italiano Da Vinci al mando de Gianfranco Gazzana-Priaroggia

    4

    7-3-1942

    Arabutã

    Hundido por el U-155 al mando de Adolf Cornelius Piening.

    5

    8-3-1942

    Cairu

    Hundido cerca Nueva York posiblemente por el U-94 al mando de Otto Ites.

    6

    01-5-1942

    Paranaíba

    Hundido por el U-163 al mando de Kurt-Eduard Engelmann.

    7

    18-5-1942

    Comandante Lira

    Atacado por el submarino italiano Barbarigo al mando de Enzo Grossi.

    8

    24-5-1942

    Gonçalves Dias

     Hundido en el Caribe por el U-502 al mando de Jürgen von Rosenstiel.

    10

    01-6-1942

    Alegrete

    Hundido por el U-156 al mando de Werner Hartenstein.

    11

    05-6-1942

    Paracuri

    Hundido por el U-159 al mando de Helmut Witte

    12

    26-6-1942

    Pedrinhas

    Hundido por el U-203 al mando de Rolf Mützelburg.

    13

    25-07-1942

    Tamandaré

     Hundido por el U-66 al mando de Friedrich Markworth.

    14

    28-7-1942

    Barbacena

    Torpedeado por el U-66 al mando de Friedrich Markworth.

    15

    15-8-1942

    Baependi

    Hundido por el U-507 al mando de Harro Schacht.

    16

    15-8-1942

    Araraquara

    Hundido por el U-507 al mando de Harro Schacht.

    17

    16-8-1942

    Anibal Benévolo

    Hundido por el U-507 al mando de Harro Schacht.

    18

    17-8-1942

    Itagiba

    Hundido por el U-507 al mando de Harro Schacht.

    19

    17-8-1942

    Arará

    Hundido por el U-507 al mando de Harro Schacht

    20

    19-8-1942

    Jacira

    Hundido por el U-507 al mando de Harro Schacht

    Por otro lado, en base a la Declaración de Panamá de la Primera Reunión de Consulta de Ministros de Asuntos Exteriores de fecha 3 de octubre de 1939, que consideraba al noreste de Brasil como un punto estratégico para la defensa del continente americano, Brasil y los Estados Unidos se comprometieron a fortalecer aún más las instalaciones militares, incluyendo el crucial Campo Parnamirim[87] de Natal, ubicado en el estado de Río Grande do Norte, en el noreste brasileño, que funcionaba como punto de apoyo a la línea de comunicación al sudeste del Atlántico.

    A lo largo de 1942, tanto la ruta de reabastecimiento transpacífica como la transatlántica nororiental en dirección al teatro de operaciones europeo, se vieron seriamente amenazadas por las interdicciones marítimas de los países del Eje. En consecuencia, el corredor transatlántico sudoriental que pasaba por el Campo Parnamirim, que el Presidente de los Estados Unido Franklin Roosevelt denominó “trampolín de la victoria”, se convirtió en la ruta principal y crítica de reabastecimiento para las campañas de los Aliados en el norte de África y el Mediterráneo, e incluso para el teatro de operaciones China-Birmania-India.

    El Ala Aérea Nº 16 de los Estados Unidos fue oficialmente designada para operar en las bases brasileras. 

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    Capítulo IX: Los Submarinos Alemanes en el Océano Ártico (Marzo 1942 a Julio 1942).

     

    El 21 de junio de 1941 con el ataque sorpresivo contra la Unión Soviética (URSS), Alemania esperaban conseguir una victoria rápida al estilo blitzkrieg o Guerra Relámpago, ocupando en poco tiempo los principales centros urbanos e industriales del país y aniquilando el potencial bélico soviético. No obstante, ante los espectaculares avances de Alemania durante las primeras semanas, la defensa de Leningrado, Moscú y demás sectores del frente impusieron una larga guerra.

    Las tropas alemanas cruzaron las fronteras de la Unión Soviética en la más grande y sangrienta campaña militar moderna que el mundo haya conocido, la cual se denominó “Operación Barbarroja”. Esta descomunal campaña llegaría hasta las mismas puertas de Moscú, pero jamás podrían avanzar más allá.

    La magnitud de esta Operación no tenía precedentes y se estima que por Alemania participaron entre 3.7 a 4.2 millones de soldados. Igualmente, 3.300 tanques, 600.000 vehículos de todo tipo, 7.000 piezas de artillería, 2.770 aviones y 625.000 caballos. Por las fuerzas de la Unión Soviética, se estima la participación entre 2.6 y 2.9 millones de soldados, 11.000 tanques, 35.000 piezas de artillería, cerca de 8.500 aviones.

    La Unión Soviética trasladó su industria militar a los Urales y pidió ayuda en armamento y suministros a sus aliados, Reino Unido y Estados Unidos.

    Para facilitar la ayuda necesaria a la Unión Soviética, se celebró en Moscú del 29 de septiembre al 10 de octubre de 1941 una Conferencia entre representantes de la URSS, Reino Unido y Estados Unidos, en la que se acordó la formación de convoyes marítimos para transportar suministros a los puertos soviéticos.

    Los únicos accesos marítimos para el apoyo a la URSS, todavía abiertos a fines de 1941, eran: La ruta del Océano Ártico, la ruta de Extremo Oriente por el Océano Pacifico y la ruta del Golfo Pérsico, por Irán.

    La ruta que registró el mayor volumen de tráfico fue la de Océano Ártico hacia los puertos soviéticos de Múrmansk, en el Mar de Barents y por el Mar Blanco hacia el puerto de Arkhangelsk.

    En los fiordos noruegos tenían sus bases los cruceros y submarinos alemanes además de campos de aviación de la Luftwaffe. El puerto finlandés de Petsamo, muy próximo a Múrmansk, servía de base a las naves y aviones alemanes. Por otro lado, la flota soviética del Ártico estaba en una notoria inferioridad numérica y técnica.

    Los largos días de verano, conocidos como Noches Blancas, eran un factor adverso ya que aumentaba la vulnerabilidad de los convoyes aliados. Por otro lado, las largas noches invernales ofrecían una relativa protección, pero el avance de la zona de hielos en invierno obligaba a una ruta más meridional y, por tanto, más próxima a las bases alemanas, lo que aumentaba la vulnerabilidad de los convoyes aliados.

    Los convoyes aliados se componían al principio de 6 a 10 cargueros y, a partir de marzo de 1942, de unos 25 buques, llegando en ocasiones a 40. Su velocidad media oscilaba entre 8 y 10 nudos.

    Durante el primer invierno, los convoyes, protegidos por la larga noche polar, no sufrieron pérdidas sensibles, pero con el verano la situación se agravó, perdiendo un promedio de un diez por ciento de sus unidades.

    La ruta de verano se iniciaba en Scapa Flow, en las islas Orcadas o en Loch Ewe, (Escocia), hacia Reikiavik, en Islandia, siguiendo por las islas Jan Mayen y del Oso y por el mar de Barents, hasta Múrmansk o Arjanguelsk. La ruta invernal era más corta, para eludir los hielos flotantes, y menos alejada de las bases aéreas enemigas. Una vez llegados a puerto, los convoyes seguían sufriendo violentos ataques de la aviación alemana.

    El puerto de Múrmansk, a pesar de estar en plena zona ártica, estaba libre de hielos todo el año debido a una rama de la Corriente del Golfo, aunque gruesos témpanos flotantes entorpecían su aproximación, por lo que era necesario el uso de rompehielos, especialmente en los casos en que, para eludir la amenaza alemana tenían que bordear Novaya Zemlya, por el mar de Kara.

    Los convoyes aliados iban protegidos por una escolta naval, en formación paralela, compuesta por torpederos, corbetas, fragatas, dragaminas y cazasubmarinos. A veces, la protección se dividía en dos partes, la de crucero, próxima al convoy, y otra más lejana, de cobertura operativa, formada por cruceros, acorazados y, en ocasiones, portaviones.

    A fines de junio de 1942 se retiró la fuerte protección que se había asignado al convoy PQ-17 conformado por 35 cargueros, cuando el Almirantazgo británico se enteró de que el acorazado alemán Tirpitz se dirigía a su encuentro. De las 34 unidades del convoy, 24 fueron hundidas por el ataque de los U-Boote y aviones alemanes. Los pocos Buques que pudieron escapar fueron escoltados por unidades soviéticas hasta Arjanguelsk. Este serio contratiempo motivó la interrupción del envió de convoyes hasta septiembre del mismo año, fecha en que partió de Islandia un convoy de 40 cargueros y 31 navíos de escolta, perdiéndose 15 cargueros, por lo que volvió a interrumpirse la formación de convoyes, reanudándose solamente en periodos de oscuridad invernal.

    En agosto de 1942, el Alto Mando alemán organizó la llamada Operación Wunderland[88] intentando cortar definitivamente el paso de convoyes aliados por el Ártico. Desde el mes de enero, los alemanes destacaron a la zona nuevas unidades navales, la 5a flota aérea de la Luftwaffe y minaron extensas zonas del Mar Blanco, pero no consiguieron su objetivo.

    En el curso de la contienda llegaron a Múrmansk y Arjanguelsk, 40 convoyes con un total de 725 cargueros y cuatro millones de toneladas de carga. Los alemanes hundieron 18 buques de guerra y 87 buques mercantes, de los cuales 11 eran soviéticos. Los tripulantes británicos muertos superaron los tres mil.

    La Operación Wunderland solo tuvo un éxito moderado. Debido a las malas condiciones meteorológicas y la abundancia de témpanos de hielo, los U-Boote que participaron en la Operación Wunderland no se aventuraron más allá del estrecho de Vilkitsky. Por lo tanto, la campaña de la Kriegsmarine solo afectó al mar de Barents y al mar de Kara.

    A mediados de septiembre de 1942, tuvo que detenerse la Operación Wunderland debido a la congelación de la superficie del mar con una gruesa capa de hielo, especialmente en el mar de Kara, que se congela mucho antes porque no se ve afectado por las corrientes más cálidas del Atlántico.

     

     

     

     

     

     

    Capítulo X: Los submarinos alemanes en el Estrecho de Gibraltar y el Mar Mediterráneo.

     

    Para ingresar al mar Mediterráneo los U-Boote debían hacerlo a través del estrecho de Gibraltar que es en donde se produce la unión natural de las dos masas de agua: el mar Mediterráneo y el océano Atlántico.

    De igual manera, el citado estrecho es la separación entre dos continentes: Europa y África. En su punto más estrecho, hay una separación de 14,4 kilómetros y tiene una profundidad de 300 metros aproximadamente.

    Hasta 1941 e incluso a inicios del 1942, los U-Boote podían transitar por el estrecho de Gibraltar en la superficie en la noche con neblina o lluvia, pero con el mejoramiento de los equipos de detección como el radar y el sonar, dicho tránsito se hizo más difícil. Además, la Marina Real británica tenía en el citado estrecho una base naval con buques de guerra y redes submarinas, así como un aeródromo y patrullas aéreas constantes. Los británicos tenían entre 2 a 4 grupos de guerra antisubmarina ASW conformado por varios destructores y dos portaaviones de escolta, que eran asignados uno en el lado del Atlántico y otro en el Mediterráneo.

    Otros de los inconvenientes para ingresar al mar Mediterráneo por el estrecho de Gibraltar es la corriente marina. Sobre la superficie corre una corriente marina desde el Atlántico hacia el Mediterráneo, pero a unos 100 metros de profundidad corre una corriente desde el Mediterráneo hacia el Atlántico, la cual dificultaba el paso para los U-Boote sumergidos, haciendo que el tránsito demore unas cinco horas.

    Por otro lado, el Mediterráneo era un Teatro de Guerra muy peligroso para la operación de los U-Boote, pues a su alrededor había decenas de bases aéreas de los Aliados desde las cuales cientos de aviones equipados con radar los cazaban.

    El Almirante Dönitz nunca se entusiasmó con misiones en esta área, ya que las consideraba un desperdicio del esfuerzo bélico. Asimismo, sabía que cualquier U-Boot que entrara en el Mediterráneo se perdería para siempre del Atlántico, ya que las patrullas ASW de los Aliados eran muy estrechas y escapar mientras está sumergido era casi imposible motivado a la fuerte corriente en el Estrecho de Gibraltar.

    En el Mediterránea operaron las siguientes Flotillas de Combate U-Boote:

    La 23ª Flotilla de Combate, fundada el 11 de septiembre de 1941 bajo el mando de Kptlt. Frauenheim, que operaba desde Salamina en Grecia. Posteriormente, en mayo de 1942 todos los U-Boote fueron incorporados a la 29ª Flotilla de Combate.

    La 29ª Flotilla de Combate, fundada en diciembre de 1941 bajo el mando de Korvkpt. Franz Becker, que operaba solo en el Mediterráneo, tuvo 52 submarinos asignados a esta durante su servicio. La flotilla se disolvió en septiembre de 1944, cuando fueron hundidos por los Aliados los 3 últimos U-Boote (U-407, U-565 y U-596).

    Desde septiembre de 1941 hasta mayo de 1944, Alemania logró el ingreso de 62 U-Boote al Mediterráneo, los cuales tuvieron que navegar por el temido estrecho de Gibraltar controlado por los británicos. Se debe resaltar que 9 U-Boote fueron hundidos por los Aliados mientras intentaban pasar por el mencionado estrecho y 10 más tuvieron que interrumpir su recorrido debido a graves daños ocasionados. Ningún U-Boote regresó al Atlántico y todos fueron hundidos en la batalla o hundidos al finalizar la guerra.

    Alemania perdió un total de 62 U-Boote en el Mediterráneo, los cuales se discriminan por años en la siguiente tabla:

    Año

    Cantidad de U-boote perdidos

    1941

      5

    1942

    14

    1943

    20

    1944

    23

    Total…

    62

    Se debe destacar que durante julio y agosto de 1944 por ataques aéreos Aliados se perdieron 10 U-Boote en Toulon (Francia) y ellos fueron:  U-380, U-410, U-421, U-466, U-471, U-586, U-642, U-952, U-967 y U-969.

    Los U-Boote hundieron 3 importantes buques de guerra Aliados en el Mediterráneo, 2 portaaviones y un acorazado siendo ellos:

    ·      El U-81 al mando del Kptlt. Friedrich Guggenberger, hundió el portaaviones británico HMS Ark Royal el 13 de noviembre de 1941 a 30 millas al este de Gibraltar. Todos los tripulantes menos uno, sobrevivieron.

    ·      El U-73 al mando del Kptlt. Helmut Rosenbaum, hundió el portaaviones británico el HMS Eagle el 11 de agosto de 1942. Murieron 230 tripulantes.

    ·      El U-331 al mando del Oblt. Freiherr Hans-Diedrich von Tiesenhausen hundió el el acorazado británico HMS Barham el 25 de noviembre de 1941. Murieron 862 tripulantes.

    En el Mediterráneo, los Aliados probaron con éxito una nueva táctica de ASW denominada “Swamp” (en castellano “Pantano”), la cual consistía que al detectarse un U-Boot conocido o sospechoso los buques escoltas y aviones de patrulla, buscarían sistemática y continuamente el área, obligando al U-Boot permanecer sumergido hasta que se agotaran las baterías o intentaran escapar por la noche en la superficie. Cualquiera de las dos opciones era fatal para el U-Boot.

    El U-371, comandado por el Oblt. Horst-Arno Fenski, tuvo la mala suerte de ser la primera víctima de la mencionada táctica “Swamp” por los Aliados en el Mar Mediterráneo. Fue detectado recargando sus baterías en la superficie cerca de Djidjelli, en la costa argelina, durante la noche del 2 al 3 de mayo de 1944 y de inmediato el área fue patrullada por 6 buques escoltas y 3 escuadrones de aviones Aliados, obligando al U-Boot a sumergirse. En la madrugada del 4 de mayo el U-371 tuvo que emerger para salvar a su tripulación, pero antes de rendirse dañó con sus torpedos al buque escolta estadounidense USS Menges y un destructor de escolta francés.

    A continuación, se indican los buques de guerra Aliados hundidos por los U-Boote en el Mediterráneo:

    Tipo de Buque

    Cantidad

    Portaaviones

      2

    Acorazado

      1

    Corbeta

      1

    Crucero siembra minas