03-14-2004, 04:18 PM
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[size=18:dea8074aac][color=red:dea8074aac]MarÃa José Quintanilla sigue siendo una promesa
Canta América: MarÃa José Quintanilla[/color:dea8074aac][/size:dea8074aac]
Viernes 12 de marzo de 2004 - Rommel Piña
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[img:dea8074aac]http://www.lun.com/imagenes/2004/03/11/SPF2065.jpg[/img:dea8074aac]
[b:dea8074aac]Con su primera entrega, ganó, gustó y goleó. Ahora la pequeña cantante de “Rojo†busca su propio perfil y trata de despercudirse de su imagen inocente. Pero no siempre lo logra[/b:dea8074aac].
Cuarenta mil copias vendidas en pocos dÃas. Seis apariciones en portada en casi una semana. Su rostro en todos los canales de televisión. ¿Qué asegura eso? A [b:dea8074aac]MarÃa José Quintanilla[/b:dea8074aac], lo necesario para cumplir su labor mediática de manera incólume y para que “Canta Américaâ€, su segundo disco, intente repetir el fenómeno de ventas que su antecesor, “México lindo y queridoâ€.
Se pueden homologar las dos cosas. Quizás. “[b:dea8074aac]Canta América[/b:dea8074aac]†la abre a un repertorio más complicado y menos uniforme que las rancheras, pero surte el mismo efecto medial que su antecesor. Y por eso vende. Sólo que ahora los tonos y la interpretación de este tipo de temas le exigen un mayor compromiso en la entrega vocal a la pequeña y la selección de canciones también hace necesario despercudirla de su imagen inocente.
[b:dea8074aac]MarÃa José Quintanilla[/b:dea8074aac] es dueña de una voz prometedora. Y eso le permite desenvolverse bien en temas como “De qué manera te olvido†o “La muerte del Palomoâ€, que rescatan su buen manejo con los mariachis y las baladas. Incluso la incursión de DJ Caso y los punteos de guitarras eléctricas en “No tengo dinero†son agregados adhoc para el disco de una cantante de 14 años que ahora busca su propio perfil.
Sin embargo, su estrella deja de brillar cuando trata de convencer que puede jugar con la sensualidad y la delicadeza. Su escasa creación de atmósferas (“El Noa Noaâ€), la sensación de manejar siempre el mismo molde interpretativo (como “Preciosa†con “Angelitos negrosâ€) y lÃricas más maduras -que exigen convencer al público de su natural crecimiento- (“Te sigo amandoâ€, “El compañero nuevoâ€) no logran equiparar su logrado debut discográfico. Porque ése gustó, ganó y goleó.
Es más, “Canta América†plantea un nuevo desafÃo para esta mini luminaria. Con todo el bagaje aprendido en la televisión y la breve experiencia acumulada en la industria discográfica, éste deberÃa ser su álbum de transición. El que la ayude a encontrar el rumbo que andaba buscando. La consolidación vendrá después. Con las loas y vÃtores del caso.
Atte. Escorpion
[size=18:dea8074aac][color=red:dea8074aac]MarÃa José Quintanilla sigue siendo una promesa
Canta América: MarÃa José Quintanilla[/color:dea8074aac][/size:dea8074aac]
Viernes 12 de marzo de 2004 - Rommel Piña
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[img:dea8074aac]http://www.lun.com/imagenes/2004/03/11/SPF2065.jpg[/img:dea8074aac]
[b:dea8074aac]Con su primera entrega, ganó, gustó y goleó. Ahora la pequeña cantante de “Rojo†busca su propio perfil y trata de despercudirse de su imagen inocente. Pero no siempre lo logra[/b:dea8074aac].
Cuarenta mil copias vendidas en pocos dÃas. Seis apariciones en portada en casi una semana. Su rostro en todos los canales de televisión. ¿Qué asegura eso? A [b:dea8074aac]MarÃa José Quintanilla[/b:dea8074aac], lo necesario para cumplir su labor mediática de manera incólume y para que “Canta Américaâ€, su segundo disco, intente repetir el fenómeno de ventas que su antecesor, “México lindo y queridoâ€.
Se pueden homologar las dos cosas. Quizás. “[b:dea8074aac]Canta América[/b:dea8074aac]†la abre a un repertorio más complicado y menos uniforme que las rancheras, pero surte el mismo efecto medial que su antecesor. Y por eso vende. Sólo que ahora los tonos y la interpretación de este tipo de temas le exigen un mayor compromiso en la entrega vocal a la pequeña y la selección de canciones también hace necesario despercudirla de su imagen inocente.
[b:dea8074aac]MarÃa José Quintanilla[/b:dea8074aac] es dueña de una voz prometedora. Y eso le permite desenvolverse bien en temas como “De qué manera te olvido†o “La muerte del Palomoâ€, que rescatan su buen manejo con los mariachis y las baladas. Incluso la incursión de DJ Caso y los punteos de guitarras eléctricas en “No tengo dinero†son agregados adhoc para el disco de una cantante de 14 años que ahora busca su propio perfil.
Sin embargo, su estrella deja de brillar cuando trata de convencer que puede jugar con la sensualidad y la delicadeza. Su escasa creación de atmósferas (“El Noa Noaâ€), la sensación de manejar siempre el mismo molde interpretativo (como “Preciosa†con “Angelitos negrosâ€) y lÃricas más maduras -que exigen convencer al público de su natural crecimiento- (“Te sigo amandoâ€, “El compañero nuevoâ€) no logran equiparar su logrado debut discográfico. Porque ése gustó, ganó y goleó.
Es más, “Canta América†plantea un nuevo desafÃo para esta mini luminaria. Con todo el bagaje aprendido en la televisión y la breve experiencia acumulada en la industria discográfica, éste deberÃa ser su álbum de transición. El que la ayude a encontrar el rumbo que andaba buscando. La consolidación vendrá después. Con las loas y vÃtores del caso.
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Atte. Escorpion